Toyota Yaris GRMN, 210 caballos para el Yaris más potente jamás fabricado
Toyota siempre ha estado ligada a la competición, pero desde hace años esa faceta no se dejaba ver en sus coches de calle. El regreso al WRC le ha dado alas a la marca japonesa, que nos presenta ahora el Toyota Yaris GRMN.
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Publicado: 07/03/2017 12:45
WRC, Dakar, Fórmula 1... Toyota lleva en su ADN el espíritu de competición. La marca ha cosechado triunfos y victorias a lo largo y ancho de este mundo, aunque hacía ya tiempo que es raza no se había transferido a sus coches de calle. Sin embargo, el regreso al campeonato de Rallies ha rejuvenecido a los japoneses, que nos presentan un pequeño cohete: el Toyota Yaris GRMN. Que ya se nos adelantó semanas atrás.
Las siglas GRMN, que significan Gazoo Racing Master Nürburgring, nos adelantan el más pasional, deportivo y radical Toyota fabricado en muchos años. Una versión extravitaminada del Toyota Yaris que no solo viene marcado por un apellido de competición sino que también tiene aires de competición.
Exteriormente se trata de la última actualización del Yaris, que por cierto, al igual que el GRMN, se ha presentado de forma europea en el Salón de Ginebra. A este diseño urbano se le suman una serie de accesorios y modificaciones que incrementan esa sensación de deportividad que tanto se espera.
Parachoques delantero y trasero, llantas de 17 pulgadas firmadas por BBS, alerón trasero, y un pequeño difusor en la zaga son los cambios más destacados de la carrocería de tres puertas, la única que va a ser comercializada en esta edición. En cuanto a su interior las novedades son más sutiles: asientos tipo baquet, pedales de aluminio, cuadro de instrumentos rediseñado y un volante en cuero extraído de su hermano el Toyota GT86.
Pero el Yaris GRMN no solo es apariencia, sino que ha sido modificado de rabo a cabo para que así sea digno de tales siglas. En cuanto al chasis, ha sido reforzado con soportes adicionales. Además se han añadido barras estabilizadoras de mayor tamaño en el eje delantero, así como una barra superior entre las torretas de la suspensión.
Ésta ha sido completamente rediseñada para así poder hacer frente a un mayor dinamismo y potencia. Al conjunto se ha sumado un diferencial de deslizamiento limitado tipo Torsen y unos frenos de mayor tamaño, ventilados y con calibradores de cuatro pistones para el eje delantero. Todo ello para hacer frente a un motor que nunca antes se había montado en el pequeño Yaris.
Ese no es otro que un bloque gasolina atmosférico de cuatro cilindros y 1.8 litros de cilindrada que desarrolla 210 caballos de potencia. Es decir, 110 más que el más potente de los Yaris acutales. Una caja manual de seis velocidades se encarga de gestionar la potencia y la fuerza que va a parar directamente a las ruedas delanteras.
Por el momento no han trascendido datos de rendimiento, más allá de la potencia, aunque Toyota afirma que estamos ante el urbano deportivo más rápido en el 0 a 100 Km/h. Si tenemos esto en cuenta, el Yaris GRMN será capaz de hacer una marca que ronde los siete segundos, e incluso puede que los baje.
Todavía habrá que esperar unos cuantos meses para que el Yaris más potente que se ha fabricado nunca inicie su comercialización, hasta principios del 2018. Será el primer modelo con las siglas GRMN que se venda en el viejo continente. De hecho, al igual que el resto de Yaris, será producido en la fábrica que Toyota poseen en Valenciennes, Francia.