Una Nissan agobiada por múltiples problemas acabará con el experimento de Datsun (otra vez)
Falta poco para que se haga oficial, Nissan pasará al ostracismo por segunda vez. Nissan ha sido incapaz de hacerse con una cuota de mercado relevante en los países emergentes donde se implantó con la marca Datsun, y la matriz tiene que soltar lastre.
6 min. lectura
Publicado: 13/05/2020 22:00
Bajo la batuta de Carlos Ghosn, el ex directivo que sacó a Nissan de la quiebra hace 20 años, el grupo japonés experimentó una gran recuperación. Entre los ambiciosos planes de expansión internacional estuvo la creación de una marca de bajo coste pensando en los clientes más humildes, y esa marca fue Datsun.
Se trataba de copiar -con algunas diferencias- la estrategia que le había funcionado a Renault con Dacia, tener una marca de bajo coste para mercados emergentes. Datsun se reintrodujo en algunos países en 2013, llevaba difunta desde mediados de los años 80, cuando Nissan terminó con la marca.
Y el nombre le venía que ni pintado, porque en su propio génesis significa eso. En 1914 se fundó en Japón la Kwaishinsha Motorcar Works para fabricar automóviles partiendo de la experiencia recopilada en EEUU. Como fue un holding formado por Den, Aoyama y Takeuchi, se tomaron sus iniciales para el primer modelo: DAT.
Más adelante la compañía decidió producir un modelo más económico, y se formó el juego de palabras Dat+son, del inglés "son", que significa "hijo". En 1933 la compañía fue absorbida por Nissan y se cambió a Dat+sun, cambiando el significado, pues "sun" (sol) hace referencia al sol naciente de la insignia nacional. En 1986 Datsun terminó sus operaciones.
Actualmente Datsun está presente en mercados asiáticos (La India, Indonesia, Nepal y Sri Lanka), de la órbita rusa (Bielorrusia, Kazajistán y Rusia), en El Líbano y en Sudáfrica. No llegó a dar el salto a mercados latinoamericanos, donde habría que tenido que competir con la industria local y modelos importados de otros asiáticos.
Los resultados comerciales de Datsun no acompañan, y Nissan necesita recortar gastos de forma apremiante. La compañía japonesa arrastra diversos problemas: meses de caídas en las ventas, gama de modelos envejeciendo, la crisis de los Diesel, la crisis del "Brexit" en Europa, el arresto en Japón (y posterior fuga) de su CEO estrella, Carlos Ghosn, una parálisis ejecutiva desde 2019 y ahora la crisis del coronavirus. Son demasiados problemas.
El 28 de mayo será la conferencia de resultados económicos del año fiscal japonés, que terminó el 31 de marzo, ya con la pandemia extendida por todas partes. Según cálculos preliminares de Nissan, en el año fiscal 2019/2020 las ventas han caído un 12%, hasta los 10,2 billones de yenes de facturación. Además, en lo que va de año las acciones de Nissan han caído un 40%.
De acuerdo a una fuente no identificada y citada por Bloomberg, en dicha conferencia Nissan anunciará en qué va a recortar, Datsun tiene todas las papeletas para desaparecer, a pesar de que podría haber sobrevivido solo con el mercado de la India. No es por tanto una confirmación final, pero es un secreto a voces.
Nissan planea ahorrar 2.800 millones de dólares con el nuevo plan a medio plazo
Además, Nissan tiene que anunciar el cierre de alguna fábrica más para maximizar la producción de las demás. Según Bloomberg, las plantas de Nissan en el año fiscal recién finalizado ha sido del 65%, y el objetivo es llegar al 80% en tres años. Eso permitiría aumentar mucho la rentabilidad, las fábricas deberían operar en ese margen o superior.
En otras palabras, Nissan había previsto a medio plazo que su capacidad de producción anual bajaría de 7,2 a 6,6 millones de unidades en tres años, pero tras el reajuste que está pendiente de anunciarse bajaría a 5,4 millones. En Barcelona hay mucha preocupación por si se anuncia el cierre de la planta de la Zona Franca.
La portavoz de Nissan, Azusa Momose, no ha hecho comentarios
Otra posibilidad es que Nissan decida retirar el enchufe a la fábrica de Sunderland (Reino Unido), que produce mucho más que Barcelona, pero el Reino Unido está encallado en las negociaciones con la Unión Europea, no puede garantizar que las islas se queden fuera de la eurozona en lo comercial, y la fábrica perderá su interés. Barcelona permanecerá en el mercado único, Sunderland seguramente no.
Nissan concentrará sus esfuerzos en donde tiene más éxito, que es Estados Unidos, Japón y China. Los vehículos de la gama Datsun probablemente se sigan vendiendo, pero con insignias Nissan. En cuanto a Infiniti, la fuente de Bloomberg dice que recibirá estímulos, nuevamente en los mercados donde aún permanece, donde no se incluye Europa. General Motors apostó por lo mismo hace pocos años, ha encogido de tamaño, pero económicamente de momento es una decisión sensata.
Fuente: Bloomberg