La millonaria demanda de Valeo a Nvidia por utilizar datos robados, una historia con consecuencias devastadoras para la empresa

En la industria del automóvil, la gran mayoría de los fabricantes sabe perfectamente en qué trabajan los competidores, valiosas informaciones que les llevan a diseñar sus estrategias de nuevos lanzamientos para contraatacar si lo consideran viable económicamente. Pero en el caso de las proveedoras de componentes, la fuga de información es más complicada, a menos que ocurra el desgraciado acontecimiento que le ha sucedido a Valeo y en el que se ha visto implicada también Nvidia.

Uno de los trabajadores especialistas en electrónica del gigante francés decidió apropiarse de nada menos que seis gigabytes de información relacionada con un nuevo asistente de aparcamiento que estaba desarrollando Valeo llevando gran parte de esa información a unas diapositivas que mostró en una videoconferencia en la que participaba sobre nuevas tecnologías invitado por la división pertinente de Microsoft. En tal evento, también participaban expertos de Nvidia, que se apropiaron de ellas mediante la impresión de pantalla.

La casualidad nunca está detrás de las filtraciones, el humano siempre

En las mismas podía leerse «ValeoDocs», pero lo que desconocía el empleado es que colegas de la misma empresa también participaban en el evento descubriendo la filtración de datos del código fuente. Tras su marcha a Nvidia con un jugoso contrato, la empresa francesa demandó tanto al trabajador como al propio rival informático, acusados ambos de apropiación indebida de información privilegiada y con una indemnización multimillonaria de por medio, dado que la parte demandada logró hacerse rápidamente con un contrato para suministrar todo el sistema, tanto la parte de software como el hardware.

La primera sentencia se conoció el pasado mes de septiembre, condenando al autor de la filtración a una indemnización de 14.400 euros a su ex-empresa, que ha reconocido sus hechos, pero falta la segunda que es mucho más cuantiosa. Valeo quiere recuperar el montante que se ha ahorrado Nvidia en el desarrollo de la tecnología y mucho más. Esta se ha defendido alegando que «ha colaborado en todo momento» y que la documentación siempre ha estado en manos del trabajador, sin acceso por parte de otros empleados, descargando toda responsabilidad en este.

Que rece Nvidia si solo es condenada a indemnizar a Valeo...

Fue la policía judicial alemana la que se incautó de los dispositivos en poder de Nvidia, ya que esta no denunció los hechos, señalando que «no tiene ningún interés en el código de Valeo ni en sus supuestos secretos comerciales y ha tomado medidas concretas y inmediatas para proteger los derechos de sus clientes». El que Valeo ha perdido y que ahora puede generar un importante problema, pues la empresa ha pedido también al juzgado la prohibición de uso del código fuente, por lo que el desconocido fabricante puede verse envuelto en la situación. No solo con la desinstalación del sistema, sino que también puede devolver el palo a Nvidia por los problemas y consecuencias causadas.