Mayo marca el inicio de la recuperación de las ventas de coches en la era poscoronavirus

La pandemia del coronavirus está teniendo unos efectos dramáticos sobre el sector del automóvil y, en especial, sobre las ventas de coches nuevos. Una situación que no se concentra en una única región. Se trata de algo global. Las ventas globales cayeron un 43% el pasado mes de abril. Un registro realmente malo debido a la paralización (casi total) de la actividad comercial. En una cantidad ingente de países los concesionarios estaban cerrados y los ciudadanos tuvieron que hacer una cuarentena para evitar la propagación del virus. Era muy difícil comprar un coche nuevo.

¿Y qué ha pasado en el mes de mayo de 2020? Debido a que se ha vuelto a reportar un notorio descenso de las matriculaciones, podríamos pensar que la situación sigue siendo igual de mala. Sin embargo, y poniendo en contexto estas nuevas cifras de ventas, nos encontramos ante un punto de inflexión. El inicio de la recuperación del mercado en la denominada «era poscoronavirus».

En mayo, según los datos extraídos de 96 mercados y las estimaciones obtenidas del resto, las ventas de coches a nivel mundial se han situado aproximadamente en los 5.2 millones de unidades, lo que supone un retroceso del 31% con respecto al mismo periodo de tiempo del pasado ejercicio. En el quinto mes de 2019 los registros globales superaron la barrera de los 7.9 millones de matriculaciones. La diferencia es notable.

Como hemos señalado previamente, se trata de un mal resultado, pero si se compara con los datos de abril, sin lugar a dudas en mayo se ha producido un punto de inflexión. Un cambio de tendencia. Es más, las ventas crecieron un 27% entre los meses de abril y mayo gracias a la fuerte recuperación que se está produciendo en Estados Unidos-Canadá (+60%) y en Europa-Turquía (+104%).

A medida que en los principales mercados se han relajado las restricciones y se ha podido recuperar una cierta actividad comercial, el sector del automóvil inicia su regreso hacia la normalidad. Ahora bien, antes de lanzar las campanas al vuelo, el proceso de recuperación será lento. China no va a ser capaz de «tirar del carro» y compensar las caídas que se producirán tanto en el mercado europeo como en el norteamericano.

En mitad de esta coyuntura numerosos fabricantes de automóviles están llevando a cabo profundas reestructuraciones a nivel global. Nissan y el Grupo Renault son algunas de las compañías automotrices que están aplicando duras medidas con las que garantizar su viabilidad en los duros tiempos que se avecinan.

Fuente: Fiat Group World