Aparece a la venta el VLF Force 1 personal de Henrik Fisker
Uno de los pocos VLF Force 1 V10 que fueron fabricados ha aparecido recientemente a la venta en las instalaciones de Canepa, uno de los más reputados especialistas de clásicos y exóticos estadounidenses. Esta exclusiva pieza está basada en el Dodge Viper y es el ejemplar personal de Henrik Fisker, uno de los propietarios de la compañía y su diseñador.
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Publicado: 26/02/2020 14:00
Fue en 2016 cuando Henrik Fisker se unió al proyecto de Gilbert Villareal (ex Boeing) y Bob Lutz (ex GM y Chrysler), añadiendo la ‘F’ final al emblema de VLF Automotive. En ese momento, enero de 2016, también fue presentado el espectacular deportivo que ilustra estas imágenes, el VLF Force 1 V10, un brutal trabajo de recarrozado sobre el Dodge Viper de 3ª generación (5ª generación para los más aficionados al deportivo de Dodge).
Empleando el bastidor y la mecánica de 10 cilindros y 8.4 litros del deportivo estadounidense, Henrik Fisker creó este radical y musculado deportivo, que salvo por unos pocos detalles en poco o nada se parece al modelo de Dodge del que deriva. Como otros trabajos de recarrozado de este tipo, las modificaciones técnicas son mínimas, por lo que comparte gran parte del esquema mecánico y de bastidor, con la salvedad de pequeñas modificaciones, y la mayoría de sus mandos y elementos interiores.
El motor V10 de 8.4 litros del Force 1 recibe diversas mejoras en los pistones y en las áreas de admisión, refrigeración y escape para elevar la potencia hasta unos espectaculares 755 CV (745 hp) y 865 Nm de par máximo. La transmisión sigue siendo una caja manual de seis velocidades, sin opción de montar transmisión automática, una de las principales pegas que algunos analistas achacaban a la última generación del Viper.
Tremendo potencial permitían que el Force 1 pudiese pasar de 0 a 96 km/h (0-60 mph) en solo 3 segundos, con una velocidad máxima de 351 km/h. Además era capaz de completar el cuarto de milla en solo 10.97 segundos con una velocidad final de 220.29 km/h.
En teoría iban a ser fabricadas 50 unidades de este modelo, sin embargo, el anuncio de este ejemplar asegura que este es uno de los solo 5 que fueron fabricados. Lo más curioso es que esta unidad, que con menos de 1.740 kilómetros de uso se encuentra prácticamente a estrenar, fue fabricado para el mismísimo Henrik Fisker, su diseñador. Por lo que teniendo en cuenta que la compañía está formada por tres socios, podemos pensar que tres de ellas fueron a parar a ellos y que por tanto, tan solo otras dos tuvieron como destino el garaje de un cliente real. Aunque esto nunca ha sido confirmado por la marca.