Volkswagen y Ford, en riesgo de recibir sanciones de la UE por no cumplir los objetivos de CO2 para 2025

Los fabricantes automovilísticos en Europa tienen ante sí un gran desafío de cara al año próximo. Las marcas deberán vender sus coches nuevos y cumplir con unos objetivos de emisiones de CO2 más estrictos.

La UE mirará las emisiones medias de los coches que cada marca venda en el Viejo Continente y, si no han cumplido con la marca impuesta, serán sancionados y tendrán que pagar una multa por cada gramo de CO2 que excedan. Unas sanciones que, por cierto, han sido puestos en duda recientemente al considerarlos como ilegales.

El objetivo de la Unión Europea es el de reducir la huella de carbono del transporte y acelerar la electrificación del mercado, algo que no está acompañando en los últimos meses, donde existe un estancamiento de las ventas de vehículos eléctricos nuevos.

Entre enero y junio de 2024, la cuota de mercado de coches eléctricos en Europa cayó al 13,3 por ciento, frente al 13,8 por ciento del año anterior, en un contexto en el que las ventas globales crecieron un 4,3 por ciento en la región.

La marca de CO2 que deben cumplir los fabricantes

Las emisiones de CO2 de los coches nuevos deben ir bajando de forma progresiva de aquí al año 2035, momento a partir del cual las marcas solo podrán vender vehículos con tecnología cien por cien eléctrica y dejar a un lado aquellos con motor de combustión, incluidos los híbridos.

Los fabricantes tuvieron que enfrentarse a un límite de 116 gramos de CO2 por kilómetro que entró en vigor en 2021. Por entonces, según datos de Dataforce, casi todas las marcas cumplieron con el objetivo, pero aun así tuvieron que afrontar el pago de un total de 550 millones de euros.

Para el próximo año 2025, el límite será mucho más estricto: el parque de vehículos nuevos tendrá que cumplir una media de 93,6 g/km de CO2. Visto lo visto, con los datos del primer semestre del año 2024, las marcas deberán aumentar drásticamente las ventas de vehículos eléctricos e híbridos, en un contexto actual nada favorable para ello.

La UE impone multas de 95 euros por gramo de CO2 que exceda cada coche por encima del límite.

Ford y el Grupo VW, en riesgo

Lo cierto es que cada marca de coches tiene marcado su propio objetivo en base a la masa promedio de su flota. Es decir, que no todos los fabricantes tienen que cumplir con la misma cifra exacta de emisiones de CO2. Por ejemplo, BMW o Mercedes han tenido en 2021 límites superiores debido a la venta numerosa de SUV grandes.

Como puedes ver en el anterior gráfico de Dataforce, prácticamente todos los fabricantes cumplen ya con las marcas establecidas para el 2024 si miramos a los datos de ventas del primer semestre del año. Hay dos excepciones: el Grupo Volkswagen y Ford, que están en serios apuros sobre todo de cara al próximo año 2025.

Si miramos al objetivo del año que viene, entonces vemos que Tesla, que solo vende coches eléctricos, y Geely (Volvo) son los únicos fabricantes que se dan con el objetivo cumplido. Toyota es el que está más cerca de hacerlo, apoyado claramente por una potente gama de vehículos híbridos.

Cómo reducir las emisiones medias

Las estrategias para lograrlo están bien definidas, pero no son tan sencillas: sobre todo, la de incrementar sus ventas de coches eléctricos e híbridos, en vistas del estancamiento de la demanda y la eliminación de los incentivos a la compra en mercados como el alemán.

Pero también se pueden plantear llegar a acuerdos de agrupación entre fabricantes para formar parte de un fondo común de emisiones. De esta forma, las marcas en problemas podrían reducir las emisiones de sus flotas de coches nuevos.

«Los compradores deben prepararse para el aumento de precios de los coches de gasolina y diésel, mientras que los vehículos eléctricos serán más asequibles con la introducción de nuevos modelos», afirma Benjamin Kibies, analista de Dataforce.

Fuente: Dataforce