VW traza el futuro de sus baterías y reclama un cambio: «Dependemos demasiado de los fabricantes asiáticos»
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Publicado: 31/08/2024 12:00
A pesar de que Volkswagen anunció recientemente que su estrategia de electrificación pasaría a ser un camino más lento y con una transición más progresiva, debido sobre todo a la desaceleración de la demanda que ha sufrido el mercado, la compañía alemana sigue asentando sus bases para ser una auténtica referencia en la industria.
A lo largo de los últimos meses, el Grupo Volkswagen ha alcanzado algunas asociaciones clave para recuperar terreno en mercados tan importantes para ellos como China y para generar un entramado empresarial potente con el coche eléctrico como protagonista.
Una de las patas en las que VW se quiere asentar en los próximos años es el de la fabricación de baterías. Sus planes iniciales contemplaban levantar seis plantas en Europa y Norteamérica, una de ellas junto a su socio nórdico Northvolt, y con una inversión de 15 mil millones de euros. Sin embargo, esos planes se han visto limitados o retrasados en el tiempo.
Para explicar la situación en la que se encuentra el Grupo Volkswagen en la actualidad, uno de los miembros de su consejo de administración, Thomas Schmall, ha querido resolver cualquier atisbo de dudas en una entrevista para un medio alemán.
«La batería es una tecnología central»
Schmall quiso aclarar las dudas que podían haber surgido en torno al gigante automovilístico alemán, confirmando que su estrategia de desarrollo es a largo plazo y contemplando las posibles fluctuaciones que sufre el mercado. Y aclara: «Nunca dijimos que en el Grupo VW queríamos producir nosotros mismos todas las baterías que necesitábamos. El plan desde el principio era fabricar nosotros mismos la mitad y comprar la otra mitad».
Frente a la competencia feroz procedente desde China, Volkswagen quiere ganar protagonismo y aspira a ayudar a reducir la dependencia del mercado asiático. «La batería es una tecnología central del coche eléctrico . Esto es tan importante como el motor en un motor de gasolina o diésel. Pero hoy la industria automotriz depende casi por completo de los fabricantes de baterías asiáticos. Tenemos que cambiar eso».
El protagonismo de China en la fabricación de baterías es, a día de hoy, insalvable: «Al principio tendremos una cadena de suministro dominada por China. Aunque las materias primas proceden de otros lugares, hasta ahora el procesamiento se ha realizado principalmente en China. Pero nos defenderemos. No sólo invertimos en fábricas de baterías, sino también en nuestro propio suministro de materias primas».
Tres plantas de baterías de PowerCo
El Grupo Volkswagen centrará sus planes de fábricas de baterías en tres emplazamientos: Alemania, España y Canadá. «Si queremos asumir un papel de liderazgo en la tecnología de baterías, entonces tenemos que tomarlo en nuestras propias manos», asegura Schmall.
La idea inicial del grupo era llegar a los 200 GWh de capacidad productiva al año gracias a cinco fábricas, lo que daría lugar baterías para 2,5 millones de coches eléctricos. No obstante, el directivo alemán aclara: «Ahora estamos construyendo menos fábricas de baterías, pero estamos construyendo una muy grande en Ontario, Canadá. Actualmente estamos planificando hasta 170 gigavatios hora en tres ubicaciones en Salzgitter, Valencia y Ontario».
A través de PowerCo, la división de baterías de Volkswagen, los alemanes serán una empresa flexible y que se desarrolle en función de cómo avance el mercado. El hecho de contar con menos plantas de las previstas puede parecer una noticia negativa; sin embargo, esto puede significar que se destinen más recursos a las ya planificadas, como la de Sagunto, en Valencia.
«Si es necesario, podemos ampliar fácilmente nuestras ubicaciones en Valencia y Ontario. En Salzgitter, en cambio, la ampliación resulta difícil por razones de espacio. Aún no sé si la expansión llegará a España y Canadá. Pero en los seis años hasta 2030, ciertamente es factible si es necesario. Lo haremos paso a paso en bloques de 20 gigavatios hora cada uno. Lo planeamos así desde el principio. Si todavía no hay demanda, puedo posponer la construcción de un bloque».
No se sabe si la apuesta de Volkswagen por las baterías tendrá como protagonistas a las cada vez más populares baterías LFP, aquellas con menos densidad energética pero mucho más baratas de producir. Schmall no ha querido dar pistas explícitas: «Nuestra celda unitaria es flexible. Las fábricas están diseñadas para que podamos cambiar de NMC a LFP en unas pocas semanas. El segmento básico de los coches eléctricos requiere baterías más baratas».
Y sobre las baterías de estado sólido, ¿cuándo se empezarán a fabricar en Volkswagen?: «Todavía en esta década»
Fuente: FAZ.net
