Los empleados de Volkswagen probarán una flota de unidades del ID.3

El pistoletazo de salida del Volkswagen ID.3 está a punto de producirse. La marca alemana empezará muy pronto las primeras entregas de la edición especial y limitada a 30.000 unidades que se puso a la venta hace un año. Ya no hay más retrasos, las primeras del eléctrico llegarán en agosto a los clientes de Reino Unido y Alemania, y otros esperarán hasta septiembre.

Aunque ya sabemos que algunos equipamientos estarán "capados" hasta una actualización que se realizará en los concesionarios, la firma alemana trabaja en este "parche" a la espera de que no se demore más de los necesario. Y, como lo propio es hacer pruebas que verifiquen si el funcionamiento es correcto o no, Volkswagen ha fabricado una serie de 150 unidades para que sean los propios empleados los que realicen los ensayos.

Si bien advierten que no cuentan todavía con la actualización correcta, sí dispone de algunas mejoras, por lo que en las próximas semanas, la marca recibirá una completa información de todos los trayectos que se realicen con el nuevo compacto eléctrico, acumulando miles de kilómetros que servirán para analizar su funcionamiento y comportamiento dinámico en diferentes situaciones.

Los responsables de la marca distribuirán las unidades entre los empleados de las fábricas de Zwickau, Chemnitz y Dresden, Alemania, en diferentes tandas, obteniendo más información según diferentes estilos de conducción. El objetivo es conocer si verdaderamente el primer modelo de Volkswagen ID. está al mismo nivel de un motor de combustión en términos de adquisición y funcionamiento, como se viene señalando.

El nuevo Volkswagen ID.3 se ofrecerá con un solo motor de 150 kW, equivalentes a 204 CV, colocado en el eje trasero y asociado a una batería con tres niveles de capacidad, de 45, 58 y 77 kWh en las versiones normales, si bien la edición especial del ID.3 1ST solamente se ofrecerá con la intermedia que cuenta con una autonomía máxima de 420 kilómetros.