Volkswagen reorganiza sus plantas alemanas con vistas a 2028

Volkswagen ha anunciado sus últimos planes para producción de nuevos modelos en Alemania, de aquí a 2028, considerando la convivencia de los modelos ID con los fundamentales Golf y Tiguan, amén de otros por conocer. El fabricante busca optimizar su capacidad de producción existente, y no añadir más.

Volkswagen reorganiza sus plantas alemanas con vistas a 2028
Vista aérea del complejo de Volkswagen en Wolfsburgo - Volkswagen

6 min. lectura

Publicado: 29/09/2023 22:15

Volkswagen está desviándose de lo inicialmente planeado para adaptarse a las cambiantes condiciones del mercado. El fabricante ha anunciado cambios en los modelos asignados a sus fábricas en Alemania, preparándose para la llegada de más modelos eléctricos, dadas las ambiciones de electrificación total que anunció hace tiempo.

Debido a la demanda inferior a la prevista de algunos modelos, como el Volkswagen ID.3, a un menor volumen de ayudas públicas, y al elevado coste energético debido a la guerra en Ucrania, se va a suprimir el tercer turno en la planta de Zwickau. Dicho tercer turno se estableció hace 32 años. De esta forma, se aprovechará mejor la capacidad de la fábrica en el primer y segundo turno.

Volkswagen Wolfsburg
Vista del complejo central de Volkswagen en Wolfsburg, Alemania

Volkswagen mira al futuro con la enésima reorganización de sus plantas

Hoy se han desvelado los planes para aprovechar mejor sus fábricas. A partir de la misma base técnica, se producirán distintos modelos según hagan falta, de forma más flexible que como viene haciéndose hasta ahora. Además, se han cancelado los planes de hacer una fábrica anexa en Wolfsburgo, el corazón de su capacidad productiva en Europa, presupuestada en 2.000 millones de euros.

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Además del Volkswagen ID.3, en Wolfsburgo se va a producir un segundo modelo totalmente eléctrico. Será un SUV pequeño que se venderá en grandes volúmenes a partir de 2026. Estos modelos convivirán tanto con el Volkswagen Golf -que sobrevivirá como eléctrico- como con el nuevo Tiguan. A partir de 2025, la fábrica también producirá el sustituto del actual Tiguan Allspace (siete plazas).

La planta de Osnabrück, además de la berlina Arteon y el SUV compacto T-ROC Cabrio, ambos de motorización térmica, mantendrá su relación con Porsche. De acuerdo a fuentes consultadas por la publicación «Automobilwoche», la versión eléctrica de la gama Porsche 718 -sus modelos más pequeños- se producirá allí también. En cuanto al proyecto Trinity, el que será el buque insignia de la marca, se relocalizará en la planta de Zwickau. Hay muchas esperanzas en este modelo, pensado para retar a Tesla de igual a igual, pero se ha retrasado sobre la planificación previa, que era lanzarlo en 2026, por cuestiones relacionadas con la división de software, Cariad.

Render Volkswagen Trinity 2028
Recreación del futuro Volkswagen Trinity que llegará en 2028

El resto de la planificación de turismos tanto para las fábricas alemanas como para las del resto del mundo se mantendrá tal cual, indicó el fabricante al término de su comunicado. La fuente también ha señalado que habrá un equivalente de CUPRA del nuevo Golf eléctrico, lo que sugiere que será el sustituto del actual Born.

La gama eléctrica actual de Volkswagen consta en Europa de los ID.3, ID.4 e ID.5, además de los Audi Q4 E-tron, Q4 Sportback E-tron, y CUPRA Born. El Volkswagen e-Up! se dejó de producir, lo mismo que el e-Golf de la generación previa. Además, hay que acordarse del ID. BUZZ , tanto comercial como de pasajeros. Para Volkswagen, está claro que el futuro será 100% eléctrico, pero está teniendo dificultades para encajar su producto sin tubos de escape con la misma eficacia que el tradicional, sobre todo por la presión de fabricantes que antes, simplemente, no existían. En la actualidad, les falta competitividad frente a otras alternativas.

Fábricas multimarca en Volkswagen para contener los gastos globales

Volkswagen lleva años racionalizando su gama, reduciendo el número de modelos y de versiones dentro de cada gama, así como en las opciones para elegir. En ese sentido, se va acercando a la forma asiática de hacer las cosas, con un menú con menos opciones para elegir, tiempos de entrega más cortos, y más eficiencia a la hora de fabricar.

Y Volkswagen tiene que racionalizar también su producción, evitando el temido problema del exceso de capacidad, que significa básicamente tirar el dinero. Si nos vamos a un ejemplo extremo de racionalización, hay que hablar de Tesla: solo cuatro turismos -en producción- mínimas diferencias de componentes, e incluso de pinturas. Cómo no, las cosas han de cambiar en su división de software. Los problemas con Cariad le costaron el puesto al anterior consejero delegado, Herbert Diess, que abandonó su posición hace un año. Su sucesor, Oliver Blume, compagina los cargos de máximo responsable tanto del Grupo Volkswagen como de Porsche AG -cargo que ocupa desde 2015-.

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