¿Mal de ojo de Volkswagen? Scout Motors se enfrenta ya a su primera demanda en USA y aún no ha comenzado a operar
Scout Motors es Volkswagen, por mucho que a los alemanes les cueste reconocerlo, por lo que si multan a una lo hacen a la otra. Y ambas van a ser denunciadas en el estado de California por tratar de saltarse las normas de venta de coches nuevos, apostando por un modelo que en Europa ha demostrado no funcionar.
El modelo de agencia ha demostrado que no es la fórmula más interesante para seguir captando a clientes, sino que solamente los aleja. Mercedes fue la primera marca que apostó por este formato y no le ha salido nada bien granjeándose importantes problemas con los concesionarios, como también ha ocurrido con Stellantis y Volkswagen.
El nuevo formato de venta ha sido un absoluto fracaso en Alemania, pero los altos cargos de la firma de Wolfsburgo siguen convencidos de que pueden aplicarlo al otro lado del Atlántico en la nueva gama de coches eléctricos de Scout Motors. El problema es que en Estados Unidos este tipo de venta está regulado y no está permitido, por lo que los concesionarios de coches nuevos de california han decidido demandar a Volkswagen.
Scout Motors no puede aplicar las ventas de agencia en USA
El objeto de la demanda es claramente la prohibición de un modelo de venta directa a los clientes, un sistema de venta de coches que viola una normativa firmada a principios de 2024, también por Volkswagen. La Asociación de Concesionarios de Automóviles Nuevos de California considera que no sólo es una violación de uno de los principios de esta regulación, sino que también es algo que afecta negativamente a los clientes y a los empleados de los concesionarios que, a la larga, perderán sus empleos.
Con el formato de agencia, desgraciadamente «sobran» asesores de ventas porque sólo unos pocos se dedicarán a trasladar los pedidos al fabricante, reduciéndose considerablemente su labor en los minoristas. Pero la propia asociación ha chocado también con un muro que no habían previsto, y es que Volkswagen considera que no es la que tiene que recibir la pertinente demanda, ya que ella no ha incumplido nada. En todo caso, sería Scout Motors.
De hecho, Scout ha enviado una comunicación oficial apuntando en esta línea, que se «trata de un fabricante de automóviles independiente y que la empresa es la única responsable de la ingeniería, el diseño y la producción de los vehículos Scout», al mismo tiempo que los responsables «admiten que la venta directa es el mejor soporte para los clientes de la marca».
Volkswagen tiene tiempo de «enmendar» el primer error de Scout
Una respuesta a la misiva oficial de la asociación, que anunciaba «la intención de prohibir a Scout Motors o cualquier nueva línea de vehículos de un fabricante con una red de distribuidores de California vender directamente a los consumidores».
La única forma de esquivar la demanda por la violación del proyecto de ley 473 es que los de Wolfsburgo vendiesen los modelos de Scout que, por cierto, aún no se han presentado, a través de los concesionarios de Audi, Porsche, Bentley o Lamborghini o, incluso, de una nueva red de franquicias para Scout Motors que ni existe.
Una demanda que puede caer en saco roto, porque Scout Motors solamente ha presentado sus dos primeros modelos y ninguno son modelos de producción, por lo que por ahora no venden coches. Se han abierto unos libros de reservas para lo que se requiere un depósito y no se formaliza ningún tipo de contrato de compra y venta, por lo que la demanda puede ser desestimada.