Volkswagen T-Cross: este es el nuevo hermano pequeño del T-ROC

El nuevo Volkswagen T-Cross.

La marca alemana ha presentado en un evento especialmente organizado en Amsterdam el nuevo modelo de acceso a su gama SUV, el nuevo Volkswagen T-Cross. Una nueva alternativa para el segmento subcompacto que podemos describir como la opción crossover para los clientes del Volkswagen Polo, modelo con el que comparte numerosos elementos.

Como por ejemplo la propia plataforma, ya que el nuevo T-Cross está basado en la MQB A0, la variante de menor tamaño de la conocida plataforma compacta. Esta es empleada por modelos como el mencionado Volkswagen Polo o la nueva generación del Seat Ibiza, por lo que no es de extrañar que el nuevo crossover comparta mecánicas y transmisiones con estos modelos.

Otra manera de definir el crossover es que este es la versión de Volkswagen del Seat Arona, aunque lo cierto es que poco parecido guardan entre ellos, salvo la plataforma y los órganos mecánicos. Sus dimensiones por el contrario son muy parecidas como podemos ver en la tabla comparativa inferior.

Dimensiones

*Medidas en litros sin y con respaldos abatidos.

Diseño

A nivel estético no encontramos sorpresas, ya que como es habitual, la marca adelantó varias imágenes y bocetos del modelo en los días previos a su presentación. Por lo que ya sabíamos que a nivel de diseño estaba relacionado con su hermano mayor de gama, el Volkswagen T-Roc. Modelo que se posicionará a medio camino del T-Cross subcompacto (segmento B) y el Tiguan (segmento C).

En el frontal encontramos una nueva lectura del diseño que ha caracterizado a los últimos lanzamientos de la marca, con una gran parrilla que abraza los faros horizontales en su zona inferior y unas ópticas auxiliares con formas cuadradas en la misma posición donde se encuentran las ópticas auxiliares del T-Roc. Aunque en el caso del nuevo crossover subcompacto cuenta con una inserción plástica que discurre por la zona inferior de la parrilla, conectando ambas ópticas auxiliares.

En la zona posterior encontramos unos pilotos con un diseño muy particular, que en combinación con la zaga de aspecto macizo, dotan al T-Cross de una fuerte personalidad en esta perspectiva. En el interior encontramos más similitudes con el Volkswagen Polo, como es el caso del salpicadero, que cuenta con líneas y una distribución muy similares a las del utilitario. La consola central está coronada por la gran pantalla central, que aparece enmarcada por la misma forma geométrica que el tablero de instrumentos digital, herencia directa de la nueva generación del Polo.

Imagen muy personal y juvenil.

Gama

La gama mecánica está compuesta por los conocidos motores gasolina TSI de 3 y 4 cilindros de 1.0 y 1.5 litros, con un abanico de potencias entre los 95 y los 115 caballos, además de un diésel TDI de 1.6 litros y 95 CV. Como era de esperar, el nuevo T-Cross contará con opción de equipar transmisión automática DSG de doble embrague y 7 relaciones, según versiones, además de cajas manuales de 5 y 6 velocidades, y todas las versiones serán de tracción delantera.

La marca alemana ha revelado que la comercialización de nuevo Volkswagen T-Cross comenzará en los primeros meses de 2019, concretamente en mayo. Su producción se inicia este mes de diciembre en la planta navarra de Landaben. Por el momento no tenemos los precios de la nueva gama, pero la marca apunta un precio que se sitúa unos 1.500 € por encima del Polo equivalente.

La descripción de la marca enumera un equipamiento tecnológico de primer nivel en el que podemos destacar la presencia de sistemas de seguridad como el sistema de frenada de emergencia con sistema de detección de peatones, detección de fatiga, control de crucero adaptativo y asistente de arranque en pendiente, además de asistente de aparcamiento. También cuenta con acceso sin llaves y a partir del nivel Sport equipa el tablero de instrumentos digital Volkswagen Digital Cockpit..