La decisión de Volkswagen sobre sus coches más baratos: Polo, Taigo y T-Cross no tendrán continuidad

Volkswagen afronta una nueva era. La marca alemana ha redefinido todos los planes que el anterior CEO al frente de la firma tenía en su cabeza y que ya había trasladado a su junta directiva. Una gama de coches eléctricos paralela a la de combustión prácticamente llevada hasta el límite que la Unión Europea permitía este tipo de tecnología aunque con la ayuda de la electrificación. Un enorme desembolso de dinero y de recursos al que los nuevos gestores no pretenden dar continuidad.

La futura norma Euro 7 está poniendo tan cuesta arriba cumplir que algunas marcas están optando por sacrificar modelos, y así reducir las emisiones promedio de la flota, ya que la ganancia por unidad vendida, el margen de beneficio será negativo frente a los costes invertidos en tecnología para este propósito. En Volkswagen, también habrá sacrificios obligados con la electrificación, pues aunque habrá un nuevo Tiguan, la firma ha confirmado que tendrá una vertiente eléctrica y el nombre Golf seguirá pero convertido en un eléctrico también.

Volkswagen eliminará modelos de combustión en favor de los eléctricos

Cabe recordar que el Passat ha sido el primero en desaparecer, que solo se mantendrá su carrocería familiar y que el nuevo Volkswagen ID.7 ocupará su hueco el próximo año. El rocambolesco puzzle de la actual marca de Wolfsburg saltará a mediados de la década por los aires, pues fuentes de confianza nos han transmitido que ya hay tres modelos más que desaparecerán al final de su ciclo comercial: los T-Cross y Taigo, además del Polo. El utilitario bailaba en una fina cuerda que definitivamente se ha roto.

Volkswagen será una marca 100% eléctrica en 2033, pero no puede esperar una década para dar forma a la nueva gama, la transformación es inmediata y progresiva

Los de Wolfsburg no tienen intención de matar ninguno de estos tres modelos señalados antes de tiempo, por lo que se mantendrá el ciclo de vida habitual de 7 años. Con este factor sobre la mesa, el Polo se despedirá del mercado a finales de 2024, el T-Cross a finales de 2025 y el Taigo aguantará un poco más, hasta finales de 2027. Tres de una tacada que serán sustituidos por dos eléctricos de nueva generación basado en la plataforma «MEB +» cuyas primeras pruebas técnicas han comenzado, los ID.2 e ID.2 X que se fabricarán en Landaben, Navarra, junto al Skoda Elroq.

El nombre Polo no será enterrado, otra institución en Volkswagen

Los detalles técnicos, por ahora, son escasos, pero sí podemos decirte que la plataforma «MEB +» está lista para ofrecer tracción total en los modelos más pequeños y, por tanto dos motores eléctricos, al fusionar en una sola estructura la escisión de la «MEB entry» solo para los modelos más pequeños. Una arquitectura que es equivalente a la «MQB Evo» utilizada en los modelos de combustión, pero con este plus que no está disponible en la arquitectura convencional para los más pequeños. Un detalle muy importante porque de ello depende el ofrecer versiones deportivas de la talla de un GTi o de un R.

Hoy, los planes de los futuros modelos eléctricos de la marca de Wolfsburgo no contemplan una opción por debajo del que actualmente se conoce como ID.2, por lo que un ID.1 no será realidad ni a corto ni a medio plazo. Lo que sí sabemos es que el nombre Polo es toda una institución en la marca alemana, como lo son el de Golf y Tiguan, y que tampoco tienen intención de enterrar definitivamente.