El Volkswagen Taigo y la «fiebre SUV» ponen en peligro al Polo

Cayeron los monovolúmenes, algunas de las berlinas del segmento compacto, los descapotables y hasta versiones más deportivas de los utilitarios. Los SUV han invadido el mercado hasta el punto de que los fabricantes han imprimido alguno de los formatos antes señalados en este tipo de carrocería, atreviéndose con descapotables o muy deportivos y con unas prestaciones muy elevadas, hablando de segmentos más convencionales y populares como el compacto o el de los utilitarios.

Hace unos meses que uno de los jefes de Volkswagen aseguró la continuidad de cinco modelos, cuatro europeos y uno chino, los Golf, Tiguan, Passat, Tayron y T-Roc. Pero lo cierto es que esas declaraciones no se han cumplido. El fabricante se ha cargado el Passat en Europa y en Estados Unidos, lo que significa que no todos tienen asegurada su continuidad. Entonces, ya te avanzamos que la situación del Polo era complicada, pues Ralf Brandstätter no consideró a este modelo, que es una referencia para todos los competidores del segmento, como uno de los intocables. Y lo cierto es que no lo es. Gracias a nuestros confidentes, podemos decirte que hoy no se vislumbra una nueva generación de este modelo que sería la séptima en su historia.

Los factores que Volkswagen maneja para sustituir al Polo con el Taigo

Volkswagen ya ha anunciado sus resultados comerciales del pasado año 2021, apuntando un dato muy significativo: un 40% de las ventas totales corresponden a los modelos SUV de su gama de productos. Nada menos que casi la mitad. Un informe en el que también ha destacado que los clientes del segmento B prefieren un SUV antes que un utilitario convencional. Blanco, y en botella, leche. La supervivencia del Polo se ha complicado con el novedoso Volkswagen Taigo.

Alguno se preguntará también por el T-Cross, una alternativa SUV al utilitario pero, a pesar de que este modelo todavía se encuentra en la primera parte de su vida comercial, no es tampoco otro intocable. Nuestras fuentes internas apuntan que seguirá el procedimiento normal con un facelift de medio ciclo de vida, pero no se ha garantizado su futuro. Es más, el foco se ha centrado concretamente en el recién llegado, el Taigo.

Y no precisamente porque sea el último en llegar y haya que potenciar sus ventas, sino porque el fabricante alemán se marcado el objetivo de concentrar todos los esfuerzos en este modelo. El Taigo es un crossover muy atractivo, con un aire deportivo y con unos motores similares a los del Polo, además de tener el ingrediente que tanto gusta: la mayor altura al suelo. Un factor muy importante es también su coste de desarrollo, muy reducido al ser un gemelo del Nivus desarrollado para Sudamérica, frente a lo que supondría un nuevo Polo, teniendo en cuenta que en tres años se lanzará un eléctrico, el Volkswagen ID.1. Más ahorro y un tiempo que el Taigo puede cubrir con creces.