Volkswagen toma el control de la filial china JAC Volkswagen
Volkswagen ha dado un paso adelante para asegurarse la producción de vehículos de la familia MEB -100% eléctricos- en China al tomar el control de la empresa conjunta con JAC y parte de su matriz, JAG, tras consumarse la operación anunciada en mayo.
5 min. lectura
Publicado: 13/12/2020 22:00
Allá por 2017 Volkswagen estableció en China una nueva joint-venture, esta vez con el fabricante estatal JAC Motors Company. Su sede está en Hefei, la capital de Anhui. La JV conocida como JAC Volkswagen es la vía de entrada de SEAT al mercado chino.
Aprovechando las medidas aperturistas del Gobierno de China, Volkswagen ha tomado el control de la empresa conjunta, con una inversión de unos 1.000 millones de euros. Así, su participación ha pasado del 50% previo al 75%, y lo que antes era JAC Volkswagen ahora es Volkswagen (Anhui) Automotive Company Limited.
Este movimiento es similar a lo que BMW hizo con Brilliance, alcanzando también el 75%, y Tesla directamente entró en China sin asociarse con un fabricante local -antes era obligatorio-. Todo esto da a los fabricantes extranjeros un margen de maniobra muy superior.
Tomar el control de JAC Volkswagen ha sido una decisión estratégica por parte del primer fabricante mundial de automóviles. Los futuros modelos de la compañía serán eléctricos y basados en la plataforma MEB, y para ese futuro se han hecho muchos cambios y otros tantos han sido anunciados.
Para empezar, la semana que acaba ha sido testigo de la inauguración del nuevo centro i+D en Hefei. En este lugar se van a centrar las actividades de i+D, control de calidad, ingeniería simultánea e incluso producción de modelos pre-serie. Para 2025 tendrán 500 empleados solo para i+D.
Tomando el control de JAC Volkswagen también se aseguran los alemanes acelerar los ciclos de desarrollo y poner en la calle modelos completamente nuevos en un tiempo inferior. También han asegurado que mejorará la eficiencia y fortalecerá la presencia de Volkswagen en China.
A partir del año que viene habrá una ampliación de la capacidad de producción en cuando a infraestructuras y equipamiento, así como unas instalaciones para el ensamblado de baterías eléctricas, componentes y validación de estos.
Pretenden producir vehículos en serie, ya con plataforma MEB, a principios de 2023. La capacidad que se ha planificado es de 350.000 unidades al año. Las baterías serán suministradas por Gotion, un proveedor de la zona, en la que Volkswagen también ha comprado una participación significativa.
Pero no solo eso, el acuerdo de compra contempla que Volkswagen también se hará con la mitad de JAG, es decir, la compañía matriz de JAC, de titularidad estatal. En mayo ya se firmó una declaración de intenciones en estos términos con el Gobierno de la Provincia de Anhui, y ha superado los trámites burocráticos.
La actividad Volkswagen (Anhui) formará parte de los resultados operativos de Volkswagen AG, hagámonos idea de la importancia de esta operación. La empresa alemana se quiere asegurar la presencia en Hefei y los proveedores, con el objetivo de lanzar una gama MEB en solo tres años.
Esta operación que ha realizado Volkswagen se puede tomar, como la de BMW con Brilliance, como un aviso a navegantes (fabricantes chinos), empezará a haber un mayor control de las empresas extranjeras en la industria del automóvil en China, protegida por el Estado durante 30 años.
Volkswagen mantiene las actuales JV con SAIC Motor y con FAW Group
El primer vehículo MEB será el Volkswagen ID.4, que se producirá tanto en la planta de SAIC-VW en Shanghái como en la de Foshan de FAW-VW. La capacidad combinada de ambas plantas es de 300.000 unidades anuales. El ID.4 ya se fabrica en Zwickau, Alemania.