Volvo EM90, el monovolumen eléctrico que nadie esperaba… y que Europa ni tiene ni tendrá

Dos de las marcas más lujosas del mercado habían decidido tirarse a la piscina con una de las carrocerías más demandadas hace años, y ahora prácticamente denostada por completo. Los monovolúmenes han empezado a recobrar vida ahora con los coches eléctricos, decidiendo los japoneses de Lexus incorporarla a su gama de productos en un movimiento estratégico.

El Lexus LM debía obligar a otras grandes marcas rivales a dar un paso al frente, pero esta vez la marca nipona, en parte, se equivocó. Porque los suecos sí se hicieron eco y tenían a mano un modelo que les servía como rival. El Volvo EM90 se erigía como una alternativa al nipón, pero a diferencia de este, completamente eléctrico. La elección del cliente quedaba en manos de la propulsión.

Volvo ha capeado la falta de un alto de gama con maestría

Sin embargo, por la parte de los suecos no ha terminado materializándose, porque su lanzamiento en el Viejo Continente estaba programado para finales de 2024 pero no se ha producido. A principios del pasado año, Volvo confirmaba el debut comercial de su primer monovolumen pero, a decir verdad, ni siquiera se ha llegado a comunicar precios en ningún país europeo.

En sus sitios webs no aparece en la sección de coches eléctricos, solamente el esperado Volvo ES90 que será presentado en unos meses, pero no hay rastro alguno del EM90. Algo que, en gran medida, se entiende y no tiene nada que ver con que las ventas de coches eléctricos sean bajas. Porque, en el caso de Volvo, ha sido todo lo contrario.

A principios del pasado año, Volvo se encontraba en una delicada situación con un buque insignia que acumulaba miles de pedidos pero congelado. Los suecos presentaron el EX90 un año antes, se anunciaron los precios y estaba listo para su comercialización cuando este fue paralizado. Y no ha sido hasta este pasado verano cuando se ha anunciado las primeras entregas, por lo que Volvo tuvo que buscarse un sustituto temporal.

El Volvo EM90 tiene un importante punto en contra y no es ser eléctrico

Los meses han pasado y Volvo ha sabido aguantar, a sabiendas de que no iba a llegar de ninguna forma. La excusa de que fabricaba en el gigante asiático le ha permitido trazar su estrategia a la perfección, especialmente con un modelo que, a pesar de su lujoso interior y sus 640 kilómetros de autonomía, estaba condenado al ostracismo total.

Los casi 120.000 euros que costará en Reino Unido son también un impedimento para que el Volvo EM90 se convierta en un éxito, por lo que si llegará a lo largo de este año 2025 al continente europeo o no es un misterio. La realidad es que tampoco le hace falta, con el nuevo XC90 tiene la papeleta solucionada…