Volvo desarrolla un nuevo sistema de evaluación de choque con cascos de ciclistas

Hasta ahora, ningún fabricante se había preocupado por ahondar más en tecnologías de seguridad con los ciclistas. Sin embargo, los suecos sí han profundizado más en este colectivo desarrollando el primer sistema de pruebas de colisión entre los cascos y los vehículos.

Un desarrollo que no es exclusivo tampoco de la marca sueca, dado que en el estudio e investigación también han participado expertos en medicina de diferentes campos y proveedores de la industria de la automoción, con unos resultados que se pondrán al servicio público, el resultado de un largo tiempo invertido en lo que comenzó como un proyecto piloto para conectar cascos de bicicleta con vehículos a fin de evitar accidentes.

Todas las pruebas se han realizado en los laboratorios de Volvo en la sede central de Göteborg, estudiando las diferentes lesiones que un ciclista puede sufrir en una colisión, incluidas las que se extienden a largo plazo después de un período de curación, utilizando cabezas de maniquíes equipadas con cascos de bicicleta y lanzadas a distintos puntos del capó del motor completamente parado.

Incluso, en diferentes ángulos y lanzado como si se tratara de una catapulta con gran velocidad, todo para medir las los daños causados bajo la aplicación de las mismas técnicas de análisis que en las pruebas de seguridad en las cabezas de los peatones.

Todo un avance en la materia, y en la seguridad vial, considerando el actual sistema de prueba, en el que los cascos son lanzados desde diferentes alturas, no teniendo en cuenta ángulos, fuerza o velocidad, entre otros parámetros, por lo que no es posible tener en cuenta los accidentes entre vehículos y bicicletas.