El WRC vuelve a coquetear con el tramo de clasificación

La decisión de Sébastien Ogier de penalizar aposta para tener una mejor posición de salida en el Power Stage del Rally de Suecia ha puesto en el disparadero, una vez más, la normativa del orden de salida. Para el francés, el hecho de abrir pista durante la primera etapa por ser líder del WRC se tradujo en un ritmo nefasto que le llevó a terminar último entre los prioritarios, haciendo que la historia se repitiese sábado y domingo una vez que se daba la vuelta al orden de salida dictaminado por la clasificación del rally. El propio Ogier reconocía que había estado todo el rally limpiando tramos y votando entre las roderas de los coches históricos.

Por esta razón, la posibilidad de recuperar el tramo de clasificación ha vuelto. Cabe recordar que el tramo de clasificación no es más que una especial disputada antes del inicio del rally y que permite a los pilotos elegir su puesto de salida para la jornada del viernes, evitando así que el líder del WRC salga siempre perjudicado. Entienden todos los fabricantes implicados en el WRC que con la igualdad reinante puede ser un foco de espectáculo y un pequeño aliciente, ya que las dos etapas restantes mantendrían el esquema actual respecto al orden de salida.

El tramo de clasificación, utilizado en 2013 por última vez en el seno del WRC y que en el ERC sigue vigente, no es la única propuesta que se ha deslizado encima de la mesa. Otra opción para mantener el sistema actual y evitar tener que organizar un tramo de clasificación pasa por ajustar las penalizaciones en el Power Stage. Se evitaría que cualquier piloto siguiese los pasos de Ogier si las sanciones que afectan a la disputa del Power Stage se aplicasen al tiempo de ese tramo y no al general del rally, aunque eso obligaría a definir muy bien qué penalizaciones cumplen o no cumplen esta circunstancia.

Fuente: AutosportFotos: Red Bull Content Pool