El Xiaomi SU7 impresiona en Nürburgring, pero sufre un revés en el uso diario que no tiene el Taycan

Más conocida por ser una experta en el campo de la electrónica de consumo y en terminales de telefonía móvil, Xiaomi sorprendió al mundo con la presentación del primero de una nueva gama de coches eléctricos. El gigante asiático, como muchos otros, pretende ir a por todas las oportunidades que se le pongan en el camino, pero no todo es oro lo que reluce.

El Xiaomi SU7 se ha erigido como el eléctrico más rápido del mundo en el circuito de Nürburgring, superando al mismísimo Porsche Taycan Turbo GT en sus dominios, y del que la firma asiática saca pecho. Es normal que lo haga y que lo utilice como un poderoso argumento de venta, porque Xiaomi no tiene la misma trayectoria en la industria del automóvil, ni la experiencia ingenieril que la marca alemana.

Pastillas de freno de un utilitario en un Xiaomi SU7 de casi 700 CV

Sin embargo, a pesar de presumir de tiempos y de avanzadas tecnologías a bordo del SU7, fuentes alemanas se han hecho eco de las pruebas a las que se ha visto sometido el modelo, algo habitual entre los medios de prensa del motor, como servidores que tuvimos ocasión de ponernos a los mandos del Xiaomi SU7. Pero otros lo han hecho más intensamente, como harían con cualquier otro coche, detectando un grave problema que pone en entredicho a la marca y un aviso a los propietarios: está falto de frenos.

Un jarro de agua fría para Xiaomi, que se ha visto obligada a realizar la siguiente advertencia: «Nos gustaría recordarle urgentemente que el Xiaomi SU7 Max es un coche de lujo de alto rendimiento para uso en carretera. Por favor, no intente realizar maniobras de conducción extremas como las que tienen lugar en pistas de carreras profesionales. Para ello se está desarrollando la variante Ultra, que recientemente batió el récord de vuelta en Nordschleife».

El servicio postventa no es un punto fuerte de Xiaomi, ni en China

El SU7 Max cuenta con dos motores eléctricos que desarrollan una potencia máxima de 673 CV con los que alcanza los 100 km/h, desde parado, en menos de tres segundos. Aunque los coches eléctricos frenan rápidamente al ajustar el grado de recuperación de energía, nunca está de más contar con un poderoso sistema de frenos de Brembo; pero sus grandes pinzas no alojan unas pastillas de freno a la altura. Son más pequeñas y están indicadas para un «uso en tráfico normal cotidiano y con un bajo ruido».

Xiaomi ha explicado que «después de una decena de paradas consecutivas y a fondo, desde 100 km/h, este hecho apenas reduce la distancia de frenado en dos metros, situándose en 33,3 metros». Uno más que se suma a una lista que no para de crecer. La pasada primavera, el propietario de un flamante Xiaomi SU7 se quedó tirado en pleno estreno. La marca reconoció que no sólo no podía repararlo, sino que tampoco podía sustituirlo por otra unidad porque todas las que estaba fabricando ya tenían dueño...