Este Yugo tiene 900 CV y tracción total gracias a dos motores V8, y lo venden

El Zastava Yugo recibió el sambenito, merecido en parte, pero no del todo, de ser uno de los peores coches de la historia. Pero con paciencia, trabajo y grandes dosis de ingenio se han creado algunas preparaciones interesantes. Esta es seguramente la más brutal de todas ya que han conseguido meter dos motores V8 y convertirlo en una bestia de tracción total y 900 CV.

Este Yugo tiene 900 CV y tracción total gracias a dos motores V8, y lo venden

7 min. lectura

Publicado: 19/06/2020 21:00

Zastava Automobili nacía en los años 50 en Serbia, capital de la antigua Yugoslavia. Como hicieron otras marcas en España, empezaron fabricando coches bajo licencia Fiat, aplicando sus propios diseños y/o variantes para ser comercializados en la Europa del Este. A medida que fue pasando el tiempo, y ya metidos en los años 70, decidieron dar el salto a Europa y Estados Unidos con el modelo Yugo.

Aquí fue cuando nació la leyenda (a veces negra) de este coche, sobre todo a partir de 1985, cuando empezó la comercialización del Zastava Yugo. Cuando llegó al mercado americano era uno de los pocos coches que, nuevo, se podía comprar por menos de 4.000 dólares.

En concreto, eran 3.990 dólares (el PVP, transporte y preparación iban aparte). Llevado a hoy en día estaríamos hablando de un precio aproximado de 8.200 euros, ligeramente más caro que por ejemplo un Dacia Sandero, su coetáneo hoy en día.

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"Todo el mundo necesita alguna vez un Yugo", rezaba su publicidad en Norteamérica

¿Era barato? Sin duda. ¿Ofrecía lo que prometía? Hombre, es que tampoco era que prometiese mucho además del hecho de costar poco, porque realmente su motor de 45, 55 o 65 CV -según versión- corría menos de lo que gastaba.

Y sus calidades estaban muy lejos de lo que se podría esperar. Pero por otro lado era fácil de reparar, ya que compartía multitud de piezas con Fiat o SEAT, siendo de mecánica simple. Eso en EEUU no era especialmente una ventaja. La fábrica casi fue destruida por un bombardeo aéreo en 1999, por el conflicto en Kosovo. Hoy día de esa fábrica salen los Fiat 500L.

Pero aquí es cuando la historia la vamos a complicar un poco más. ¿Y si cogemos un Yugo y lo potenciamos? ¿Cuánto? Pues lo que podamos. Si eres americano lo normal es meter un V8, pero quien dice uno también puede decir dos. Y si ponemos uno delante y otro detrás, ya tenemos tracción a las cuatro ruedas, y sin árbol de transmisión que complique las cosas.

Motor delantero V8 de este Yugo tan especial

Aquí es donde entra en juego Jim McKamey y su Yugo de 1986. Se propuso construir el Yugo más bestia de todos y sí, realmente podemos decir que lo ha conseguido. Para ello retiró el motor original 1.3 y, después de construir un subchasis delantero nuevo y alargar el morro, meter en su interior un motor V8 de 8,2 litros (500 pulgadas cúbicas en lenguaje americano) que originalmente pertenecía a un Cadillac Eldorado de séptima generación.

Tras los asientos delanteros, y después de reforzar convenientemente el resto del coche, incluyendo una jaula de seguridad, Jim instaló un segundo V8 igual al que iba delante. De esta forma, ambos motores son capaces de desarrollar aproximadamente 900 CV. Todo ello gracias a 16 cilindros y 16,4 litros. Un Bugatti Chiron tiene el mismo número de cilindros, pero menos de la mitad de cubicaje.

No fue un trabajo sencillo, ya que era necesario que la transmisión de ambos motores e incluso los carburadores trabajasen como uno solo. Si no, habría posibilidades de que que cada motor decidiese ir por su cuenta.

El coche no solamente creció en longitud, sino también en anchura, y también vio reducida su altura con el fin de conseguir darle una mayor estabilidad. El conjunto pesa ahora 1.905 kg. No demasiado para un vehículo rellenado con acero de Detroit, pero lejos de los 920 kg que pesaba el Yugo original.

Pero a pesar de todas las modificaciones, lo mejor es que se ha conseguido mantener su aspecto exterior y que sea fácilmente reconocible por todo el mundo como lo que es, un sencillo Yugo que ha estado entrenando sus músculos a base de anabolizantes americanos.

Con semejante potencia, la suspensión o los frenos no tenían ni dónde agarrarse. Tras adaptar unas llantas cromadas de un Chevrolet Corvette, se le instaló una suspensión hecha a medida con ayuda de Ridetech, nuevos frenos y un interior en el que se prescindía de cualquier lujo. Bueno, creo que ese trabajo ya venía hecho de fábrica.

Lo curioso es que, lejos de lo que uno podría pensar, este Yugo vitaminado con 900 CV se desenvuelve mejor de lo que podríamos imaginar. Incluso parece hasta ágil, y no se trata únicamente de un coche pensado para correr en línea recta muy rápido. En el vídeo anterior, es capaz de lidiar en una pista de conos de una forma más que digna.

Curiosamente, este Yugo está ahora a la venta en el Marketplace de Facebook y a un precio que haría abrir los ojos a cualquiera que solamente mirase de qué coche se trata. 22.700 euros al cambio por un Yugo con 34 años parece demasiado, pero para este coche puede ser incluso barato.

Son más o menos 12 euros a pagar por kilo. Bueno, dejando de lado las bromas, se trata sin duda de un curioso trabajo del que su propietario tiene que sentirse orgulloso. ¿Para cuándo este coche en el Grand Theft Auto?

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