Las zonas de bajas emisiones (ZBE) cambiarán el parque automovilístico español
Aunque solo afecte a los grandes centros urbanos, las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) van a provocar cambios en la movilidad de todos los españoles que no cuenten con vehículos ECO o CERO, y se alterará el mercado de usados en gran medida.
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Publicado: 20/12/2022 21:00
A partir del año que viene, se generalizarán por las ciudades de más de 50.000 habitantes en España las Zonas de Bajas Emisiones o ZBE, que son un imperativo legal al que los ayuntamientos se tendrán que someter. En dichas ZBE, los regidores tendrán que poner medidas para reducir la contaminación, y eso pasa por restringir el tráfico privado.
Seguramente has leído mucha basura desinformativa durante meses, y según nos acercamos a la fecha, aún más. En este artículo intentaremos poner un poco de luz y dejar las cosas claras. Primero de todo, cada ayuntamiento puede definir las ZBE con los criterios que estime oportunos.
Así lo define la normativa correspondiente, la Ley 7/2021, de 20 de mayo, de cambio climático y transición energética en el Artículo 14. Ahí no se define qué tipo de vehículos pueden circular o dejar de hacerlo. Eso sí, hay que aclarar que las ZBE también pueden llegar a municipios de más de 20.000 habitantes si tienen problemas de contaminación en el aire.
Cada ayuntamiento lo hará a su manera, y hay que consultar los detalles localmente: zonas, qué vehículos no pueden pasar, excepciones, etc.
Dos ciudades se han tenido que adelantar a esta normativa por su gran tamaño, Madrid y Barcelona, que han empezado por poner las mayores trabas a los vehículos sin distintivo ambiental, los de Categoría A. Por pura lógica, es el primero colectivo contra el que se va, dada su antigüedad y la tecnología obsoleta de control de emisiones.
Hay quien piensa que los vehículos históricos podrán circular como si nada por las ZBE, y esto hay que matizarlo. Primero de todo, los vehículos históricos tienen que cumplir varias condiciones a la vez:
- Tienen que haber sido catalogados, clasificados y reconocidos como vehículos históricos por la Administración, no basta que tengan simplemente más de 30 años, y deben estar originales o con modificaciones razonables/habituales para la época (tuning no).
- Son vehículos que se utilizan siempre ocasionalmente y no de forma habitual, que es lo que defiende la FEVA, y las excepciones para lor VH están enfocadas precisamente a eso: que no son para uso diario (p.e. para ir a trabajar). Si eso se convierte en un problema, se actuará en consecuencia.
Por otra parte, la normativa que va a permitir esas excepciones todavía no está en vigor, será la revisión del Real Decreto 1247/1995, de 14 de julio, por el que se aprueba el Reglamento de Vehículos Históricos, actualizado por última vez el 23 de octubre de 2020. Hay mucha desinformación al respecto.
Por ejemplo, no es cierto que no paguen impuesto municipal (IVTM o Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica), eso depende de la ordenanza de cada Ayuntamiento, unos bonifican el 100% de la cuota y otros no. Tampoco es cierto que tengan un seguro más barato, eso dependerá del seguro que se contrate.
Aclarado ya lo de los vehículos históricos, queda la obviedad de que los vehículos siguientes en ser perseguidos serán los de distintivo B, los gasolina posteriores al 2001, los diésel posteriores a 2006, y todos aquellos que cumplieron Euro 3 gasolina o Euro 4 diésel y que se haya justificado documentalmente ante la DGT.
Llevamos años denunciando en Motor.es que usando el criterio de fecha de corte se han quedado con la clasificación ambiental todos los vehículos que cumplían la normativa antes de su entrada en vigor. Por poner un ejemplo, todos los Opel Astra H (desde 2004) cumplían Euro 4 antes de la obligatoriedad de la normativa, o eso es lo que el fabricante explicó en su momento.
En un primer momento, todos los conductores perjudicados por la entrada en vigor de las ZBE y que no puedan acogerse a alguna excepción (véase residentes, traslados por fuerza mayor, de personas de movilidad reducida...) se verán en el dilema de deshacerse de su vehículo o cambiarlo por otro que sí puedan permitirse. No, no se dispararán las ventas de los nuevos.
Todo esto afecta solo a la movilidad urbana, en carretera abierta no hay ningún impedimento legal a usar coches de cualquier época -salvo que sean muy muy antiguos-
Todo esto va a provocar distorsiones en el mercado. Puede inundarse de anuncios de coches que no tienen precisamente valor como coleccionables ni son interesantes solo por no tener el distintivo ambiental, y ante un exceso de oferta, los precios caigan. Por otro lado, modelos antiguos que sí tienen etiqueta, como un gasolina con 20 años, pueden cotizar al alza si cambian de manos más rápidamente.
Ni fabricantes ni distribución tienen que pensar que por arte de magia los españoles van a acudir en masa a los concesionarios a comprar coches a precios inflados, con una disponibilidad regular tirando a mala, y con características que no necesitan. Si no pueden permitírselos ni financiando ni con ayudas del Gobierno, se eliminará un problema a cambio de engordar otro. Y a mucha gente esto le va a pillar con el paso cambiado.