¿Tienes un coche eléctrico? Si aparcas mal o se avería y se lo lleva la grúa, puede destrozar el motor
Remolcar o subir un coche eléctrico a una grúa no es una tarea tan sencilla como en el caso de un motor de combustión. Es vital conocer los riesgos para no lamentar una avería muy costosa o, incluso, que el vehículo acabe en el desguace.
Tener un coche eléctrico ofrece muchas ventajas, desde la reducción de emisiones hasta un menor coste de mantenimiento o un importante ahorro en energía.
Sin embargo, también conlleva algunos riesgos que los propietarios deben conocer, especialmente en situaciones de avería o cuando el vehículo es remolcado por una grúa municipal.
Pero no hablamos de los riesgos asociados a su manipulación en caso de avería. En este caso, nos referimos a que un error en el procedimiento puede acabar con el motor, la transmisión o, incluso, la batería completamente dañados.
Un remolque inadecuado no sólo puede generar una costosa avería, sino que puede dejar inservible un coche con muchos kilómetros aún por recorrer
Remolcar un coche eléctrico: un riesgo que pocos conocen
A diferencia de los coches de combustión interna, los vehículos eléctricos no cuentan con una caja de cambios tradicional ni con una posición de «punto muerto» en la transmisión.
Esto significa que el motor (o los motores, en caso de tracción total) están permanentemente conectados a las ruedas motrices.
Si se intenta remolcar un coche eléctrico con las ruedas motrices en contacto con el suelo, el motor actuará como una dinamo, generando electricidad de manera incontrolada, lo que puede dañar gravemente tanto el inversor como el motor eléctrico.
Para evitar esto, los fabricantes de coches eléctricos e híbridos recomiendan siempre que el remolque se realice con una grúa de plataforma.
En algunos casos, si se trata de un modelo de tracción delantera o trasera, podría utilizarse una plataforma rodante para elevar las ruedas motrices, pero este método también entraña riesgos debido a los frenos de estacionamiento electrónicos, que pueden bloquearse automáticamente.
Recomendaciones de los fabricantes
Algunos fabricantes han establecido procedimientos específicos para evitar daños al remolcar un coche eléctrico:
- Tesla y Nissan recomiendan usar exclusivamente grúas de plataforma y advierten que no se debe intentar remolcar el coche con ninguna de sus ruedas en contacto con el suelo.
- El Hyundai Kona Electric y Volkswagen ID.4 incluyen instrucciones para desbloquear el freno de estacionamiento en caso de ser necesario, pero siempre enfatizando el uso de plataforma.
- Algunos modelos de híbridos enchufables permiten un remolque limitado en distancias cortas y a bajas velocidades, pero siempre con las ruedas motrices elevadas.
Otro aspecto a tener en cuenta es que, además del inversor y el motor, un remolque incorrecto puede sobrecalentar el sistema de frenos regenerativos y provocar fallos en la electrónica del vehículo.
Coches eléctricos en el desguace
Un remolque inadecuado puede acabar con un coche eléctrico inservible y en el desguace.
Según los expertos, si un coche eléctrico es remolcado con sus ruedas motrices en el suelo, el motor genera electricidad que va directa al inversor y al propio motor, con el riesgo de sobrecarga y sobrecalentamiento.
Es más, algunos manuales de usuario, como el del Nissan Leaf, advierten explícitamente sobre el peligro de, no sólo de dañar el sistema eléctrico, sino también de provocar un incendio.
Todo ello puede derivar en una avería catastrófica, con un coste de reparación elevadísimo o inasumible por el seguro y/o el propietario.
El problema de las grúas municipales
El riesgo es especialmente preocupante cuando el coche es retirado por una grúa municipal.
En muchas ciudades, las grúas empleadas para llevarse vehículos mal estacionados sólo levantan las ruedas traseras y arrastran las delanteras (o viceversa), dependiendo del sistema de tracción del coche.
Si esto ocurre con un coche eléctrico de tracción delantera, las ruedas delanteras girarán mientras el coche es arrastrado, generando electricidad y provocando un daño irreparable en los sistemas electrónicos.
Cómo evitar un problema costoso
Para evitar estos problemas, es fundamental seguir estas recomendaciones:
- Usar siempre una grúa de plataforma: si tu coche eléctrico o híbrido debe ser remolcado, exígete que lo transporten en una grúa de plataforma.
- Evitar el arrastre con ruedas en el suelo: si no queda más remedio que usar una grúa convencional, las ruedas motrices deben elevarse con patines o plataformas rodantes.
- Informar al gruista: si estás presente en el momento en que se lleva el coche, asegúrate de que el operador de la grúa conoce los riesgos.
- Consultar el manual del vehículo: cada coche eléctrico tiene indicaciones específicas sobre cómo debe ser transportado en caso de avería o inmovilización.
Con el aumento de coches eléctricos en las carreteras, es importante que tanto propietarios como servicios de grúa conozcan estos riesgos.
Un remolque inadecuado no sólo puede generar una costosa avería, sino que puede dejar inservible un coche con muchos kilómetros aún por recorrer.