Prueba en banco de potencia: BMW M5 Competition pack vs M6 Competition pack
Hace tiempo que BMW puso en el catálogo a estos dos BMW M. Son los más potentes pero también los más veteranos. Pesan casi dos toneladas y superan los 600 CV en el banco de potencia… Y sí. Con más de 700 Nm de par, todo está orientado al eje trasero. ¡Hora de sudar!
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Publicado: 23/05/2017 08:00
El BMW M5 y el BMW M6 son, actualmente, los veteranos de BMW M. A la espera de una renovación generacional inminente para el BMW M5 y sin planes claros sobre su hermano ‘mayor’, estos dos buques de guerra todavía siguen representando el máximo rendimiento con motor de ocho cilindros de la casa de Múnich (con permiso del BMW X5 M y BMW X6 M). Y si por algo se caracterizan es por ser tan llamativos como superlativos en todos los sentidos.
Oficialmente el Paquete de Competición ofrece 575 CV para el M5 y 600 para el M6 ¿El banco de potencia confirmará estos datos?
Animados por el mismo propulsor de 4.4 litros de cilindrada y 560 CV de base, las unidades de prueba que hoy nos ocupan tienen instalado el Paquete de Competición. Un opcional que cuesta 12.137 euros para el M6 en cualquiera de sus tres carrocerías (Coupé, Cabrio o Gran Coupé) y en el BMW M5 ya no está disponible a menos que no se adquiera una unidad de stock (puesto que se está preparando la producción para la nueva Serie 5) y que es poco frecuente de ver.
Principalmente porque estéticamente afecta muy poco a ambos vehículos; ciertos acabados en negro de brillo intenso como las colas de escape o unas llantas específicas de 20 pulgadas son algunas pistas que podemos usar. Pero si no tienes un ojo clínico, es muy difícil de percibir.
Donde sí cambian estos dos coches es en la potencia máxima, aparentemente superior en el M6 (600 CV) que en el M5 (575 CV). Aunque los BMW M han pasado por el banco de pruebas de Autoworks Motorsport , y ciertamente hay una pequeña diferencia que analizaremos en su debido momento, la entrega de potencia de estos dos gigantes es poco menos que calcada.
La carrocería está rebajada en 10 mm y la dirección es más directa y la suspensión, más deportiva, pero son detalles difícilmente apreciables sin una gran experiencia en circuito y un modelo estándar para compararlo en el mismo momento y en esta ocasión hemos tenido a nuestra disposición el templo madrileño de la velocidad: el Circuito del Jarama, donde hemos podido comprobar el comportamiento de los dos titanes que BMW tiene en su catálogo actualmente.
Desafortunadamente, sólo los modelos ‘vitaminados’ nos acompañaron durante la experiencia en circuito... Pero, ¿realmente son tan diferentes el BMW M5 Competition Package y el BMW M6 Coupé Competition Package?
El BMW M5 cuesta (o más bien costaba) 122.050 euros y el BMW M6 Coupé cuesta 151.000 euros de base. Las unidades de prensa van vestidas con traje de gala, sobre todo si hablamos del BMW M6 que incorpora pintura BMW Individual Frozen Brilliant White (4.918 euros) e interior de Cuero Merino Sakhir Orange (que realmente es rojo) con contenido ampliado por salpicadero y puertas que cuesta 9.799 euros. El BMW M5, por su parte está pintado en el color Monte Carlo Blue, también ampliado en color negro en esta ocasión.
Ambos están equipados con frenos carbocerámicos, que en el BMW M6 cuestan 11.243 euros (en el BMW M5 habrá que conformarse con una unidad en stock) puesto que el Paquete de Competición incluye los frenos opcionales, pero se tornan necesarios cuando hablamos de coches con pesos elevados y potencias tan masivas, sobre todo si usamos estos coches en circuito; si podemos retrasar el punto de fatiga en los frenos, mejor que mejor.
Prueba en banco de potencia
Sabemos que sobre el papel, el BMW M6 con Paquete de Competición desarrolla 600 CV, mientras que el M5, 575 CV. No esperábamos grande diferencias entre ambos y por ello ambos coches han pasado por las manos de Autoworks y su banco de potencia para comprobar si la diferencia es notable o realmente estamos ante un tema de ‘Marketing’.
Y lo realmente sorprendente de estos dos coches es la capacidad de morder los rodillos y generar asombro hasta en los mismos mecánicos de Autoworks. El BMW M5 alcanza el par máximo poco por encima de las 2.000 rpm, para mantenerse plano más allá de las 6.000 rpm.
Tan sólo una pequeña caída a 4.200 rpm en par, y en potencia entre 4.000 rpm y 4.200 rpm, que en este caso es un pequeño valle y no presenta pérdida, que repunta de nuevo para estirar y estirar hasta el final... hasta los 615 CV a 6.225 rpm y 700 Nm a 5.920 rpm.
El BMW M6, que se supone que da una potencia de 25 CV por encima del M5 según la ficha oficial, alcanza el par máximo a 2.000 rpm, un poco antes que el BMW M5, y presenta el mismo escalón a mitad de vueltas pero 200 rpm más allá que la berlina. En todo el recorrido de la lanzada, los pequeños repuntes le hacen merecedor del primer puesto con una potencia de 630 CV a 6.385 rpm y un par máximo de 710 Nm a 5.980 rpm.
Sin embargo, ambas gráficas presentan unas diferencias tan pequeñas que es muy difícil, con los datos en bruto, atreverse a afirmar que el BMW M6 es un claro vencedor en esta prueba. Claro está que desarrolla más potencia y genera más par, pero en pequeños momentos puntuales que en un circuito, la diferencia no será de motor, sino de puesta a punto del vehículo.
Por último agradecerle a Autoworks Motorsport la posibilidad de entrar a su banco de potencia para realizar esta prueba y...atentos que aquí no acaba la comparativa.