Comparativa B-SUV, Renault Captur, Peugeot 2008 y Nissan Juke (Con vídeo)
Uno de los segmentos más populares acaba de recibir la renovación de tres de sus figuras. Es hora de saber cuál es el mejor B-SUV nuevo que hay en el mercado. Es hora de comparar al Peugeot 2008, al Renault Captur y al Nissan Juke.
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Publicado: 15/03/2020 16:00
En poco tiempo el segmento de los B-SUV ha ganado mucha popularidad. ¿Las razones? Moda, tamaño, concepto polivalente, mayor espacio, mayor tecnología... En los últimos seis meses hemos atendido a la renovación de tres pesos pesados de la categoría. Los tres acumularán grandes cifras de ventas. Renault Captur, Nissan Juke y Peugeot 2008 se enfrentan en esta comparativa que tratará de dilucidar cuál es el mejor B-SUV nuevo que te puedes comprar. ¿Listo? Pues adelante que hay mucho por contar.
En pocos años el segmento de los crossover utilitarios no ha hecho más que crecer. Todo surgió desde la llegada del primer Nissan Juke, y desde entonces una especie de frenesí comercial ha provocado que a día de hoy sea uno de los segmentos más populares del mercado, casi empatados con los SUV compactos. Y en parte se debe a que sus hermanos mayores ya no son tan mayores, porque con el paso del tiempo los B-SUV han crecido considerablemente en tamaño, y se han hecho más atractivos para un mayor tipo de compradores que no tienen por qué estar anclados a los entornos urbanos.
Nuestros tres rivales tienen medidas muy semejantes y que se encuentran en consonancia con el segmento al que se dirigen. El más grande de los tres es el 2008 con 4,3 metros de largo, mientras que sus rivales se quedan 8 y 9 centímetros por debajo de esa cota. Sin embargo el 2008 es el más estrecho, aunque solo dos centímetros menos que el Juke, que con su metro ochenta es el más ancho de todos. Y una vez más el Juke gana por sus medidas, en este caso de altura, donde llega a rozar los 1,6 metros de altura. Ventaja que obtiene por sus llantas de 19 pulgadas.
Por el ojo entra el B-SUV
En cuanto a diseño tenemos dos modelos que cambian mucho y otro que no lo hace tanto. El 2008 es el que se presenta más espectacular de todos gracias a la nueva filosofía de Peugeot. En la parte delantera lo más llamativo son las luces diurnas de LED con la forma de dientes de sable. También diría que es el más musculoso de los tres por la gran cantidad de nervaduras y ángulos que presenta, además de por la forma del capó tan horizontal que es muy diferente a la de sus rivales.
De ahí pasamos al menos cambiado de los tres, el Captur. Renault ha sido fiel a la filosofía de no toques nada que funcione y por eso se ha limitado a renovar algunos detalles como por ejemplo los faros principales con la ya famosa C con los LED diurnos y con tecnología Full LED de serie. Se podría decir que es el más elegante de esta terna por toda la cantidad de elementos cromados que puede incorporar y por un toque más clásico y menos nervado. Un cambio que ya vimos en el Renault Clio.
Y en cuanto al Juke hay que decir que una de la claves de su primera generación fue el diseño y que esa misma receta la ha vuelto a repetir Nissan. Como pasa en el 2008, ha cambiado mucho con respecto a la generación anterior. También es curioso que ambos presenten detalles similares como las luces diurnas de LED separadas de los unos faros principales que a diferencia de sus colegas no pueden incluir tecnología Full LED.
Si echamos un vistazo a los culos he de reconocer que una vez más es el 2008 el que presenta un toque diferente. No es una trasera especialmente espectacular pero está muy bien presentada. Mucha superficie acristalada, un portón de grandes dimensiones y unos faros estrechos de LED enmarcados en una moldura negro brillante que da el toque de contraste. Grande es también un parachoques trasero que sobresale mucho del portón y que nos presenta dos salidas de escape auténticas embebidas en unas molduras decorativas algo grandes.
Aunque antes he dicho que el más nervado de los tres es el 2008, la trasera más tensa es la del Juke. Los diseñadores han jugado con las líneas y han creado un culo muy musculado. Buena superficie acristalada y un portón más pequeño que incrementa el tamaño y la altura del parachoques trasero y que genera la sensación de estar ante un coche más grande de lo que realmente es. Por cierto, el parachoques no presenta escape, ni siquiera falsos. Para qué complicarse.
Y una vez más el más elegante de los tres es el Renault. La delantera del Captur no ha cambiado mucho pero la trasera sí. Lo más llamativo sin lugar a dudas es la forma de los faros traseros. Una forma de C que enmarca perfectamente el ancho del coche y que también genera la sensación de estar ante un coche más ancho de lo que realmente es. Y otra vez los elementos cromados aportan ese toque refinado y más maduro. Sin lugar a dudas es el más neutro en su estilo.
Al tratarse de B-SUV los tres entran en el juego de las carrocerías con techo en contraste. Ninguno de los tres lo trae de serie pero sí en los acabados más altos como es el caso de las unidades de esta comparativa. Donde sí hacen gala de un buen abanico es en el apartado de la personalización y las combinaciones. El Captur es el más lanzado en este aspecto con hasta 90 combinaciones de colores diferentes solo para el exterior. Y el Juke por su parte es el que puede disponer de las llantas más grandes, llegando a las 19 pulgadas cuando sus colegas se quedan en las 18. Como buenos SUV que son los tres abusan de los plásticos negros tanto en pasos de rueda como bajos y parachoques.
Interiores con calidad y bien presentados
Como ya hemos dicho, los tres presentan un aspecto exterior muy diferente, y eso también se aplica al interior, donde vemos tres personalidades muy marcadas. En el caso del Captur tenemos un interior mucho mejor presentado que el de su predecesor, algo que no era muy difícil de conseguir todo sea dicho de paso. Los materiales son buenos, con una sensación de calidad percibida muy alta aunque sin llegar al límite del lujo. Mejor de lo esperado para tratarse de un B-SUV.
La presentación de los elementos es buena. Por un lado la instrumentación que puede ser analógica o bien digital con una enorme pantalla de 10,2 pulgadas o bien con una de siete como es el caso de la unidad de pruebas. En cuanto a la pantalla central es la más diferente por su posición vertical. Su tamaño máximo puede ser de hasta 9,3 pulgadas. Presenta una buena calidad de imagen aunque tiene un poco de lag en su funcionamiento. Pero lo mejor es que aunque presente muchos sistemas no todos se manejan desde ella, porque el climatizador tiene su propio modulo separado.
En el 2008 no podía faltar el i-Cockpit ya tradicional de Peugeot con su puesto de conducción cuanto menos extraño. Se caracteriza por un volante muy pequeño que cuesta reglar en altura. Si lo bajas mucho está muy abajo, pero si lo subes te tapa la visión del cuadro de instrumentos, así que cuesta encontrar el puesto de conducción adecuado. Pero donde no se puede poner pega alguna es en la vistosidad del interior. Un habitáculo muy bien acabado en cuanto a materiales que arroja una sensación de calidad muy grande y ligeramente superior a la del Captur.
El puesto de conducción no es el único problema del 2008, también lo es su sistema multimedia. Todo se gestiona desde la pantalla central, y aunque tengamos accesos rápidos en la botonera inferior, cada vez que queremos cambiar algo tenemos que acudir a la pantalla y desatender la conducción. Lo que sí me gusta es el cuadro de instrumentos digital que llega de serie a partir del acabado Allure. Tiene un esquema 3D y muchas combinaciones de información posibles que podemos gestionar a través del volante multifunción.
A simple vista el Juke es el que cuenta con un aspecto más vistoso, no tanto por la presentación pero sí por los materiales. En este acabado N-Design cuenta con una tapicería que combina la Alcántara, la piel y también el plástico. La calidad no es mala pero no es comparable a la de sus rivales por la sensación de fabricación. A pesar de ello hay que reconocer que el cambio dado en ese aspecto es impresionante. Aunque el límite también estaba muy bajo.
Lamentablemente hay que decir que el Juke es el más tradicional de los tres en la forma en la que presenta el salpicadero. Tenemos una pantalla táctil de hasta 8 pulgadas en la parte superior para así no desatender tanto la conducción. Por separado también está el módulo de la climatización, y a diferencia de sus rivales es el único que no puede contar con un cuadro de instrumentos 100% digital. A lo máximo que puede aspirar es a un instrumental parcialmente digitalizado con un panel TFT de 7 pulgadas entre las dos esferas analógicas.
Los B-SUV siempre han sido un poco esquivos a la tecnología, pero las últimos modelos en llegar están cambiando ese panorama. Nuestros tres modelos pueden contar con muchos gadgets y detalles tecnológicos que harán las delicias de compradores jóvenes y no tan jóvenes. En el apartado tecnológico el mejor equipado es el 2008 gracias a que puede incluir algunos sistemas que sus colegas no son capaces de hacer bajo ninguna circunstancia, como por ejemplo el asiento del conductor con función masaje. Eso sí, todos cuentan con una amplia conectividad para dispositivos móviles, con conexiones para Android Auto y Apple CarPlay.
Pero si el Peugeot gana en equipamiento pierde en personalización. En esos apartados ganan el Juke y sobre todo el Captur. Éste último es capaz de mostrar 18 combinaciones diferentes para el interior, aunque no en todos los equipamientos. Si quieres saber mucho más en detalle aspectos de equipamiento y personalización te animamos que te leas las pruebas correspondientes personalizadas de cada modelo. En ellas mostramos hasta el mínimo detalle, también en vídeo. Aquí te dejamos los enlaces.
El tamaño ya no es una excusa
Como ya he dicho los B-SUV han crecido considerablemente con respecto a sus primeras generaciones. Esto ha abierto el abanico de posibles clientes que pueden verse atraídos por sus formas y habitabilidad. Desde el primer coche de un comprador joven hasta el único coche familiar de una pareja sin hijos como el segundo coche de la casa para hacer esos recados de corto recorrido. A día de hoy los posibles usos de un B-SUV son mucho mayores.
Sirva como ejemplo el Juke. A la hora de entrar no hay grandes dificultades ya que la línea del techo apenas molesta, aunque sí que es cierto que yo mido apenas 1,75. Y una vez sentado en las plazas traseras, con el asiento del conductor adaptado a mi posición, tenemos, gracias a sus 2,63 metros de batalla, un espacio muy bueno para los ocupantes de las plazas traseras con tres o cuatro dedos para las rodillas y alguno más para la cabeza. Aunque los pasajeros más altos no irán muy sueltos.
El 2008 es el más corto de batalla de los tres, 2,6 metros entre ejes. Pero esa desventaja la resuelve bastante bien y se puede decir que aunque sea el más estrecho de los tres sobran un par o tres de dedos para las piernas. Eso sí, siempre y cuando el conductor no sea de tallo alto. La altura también es buena, y gracias a una mayor superficie acristalada no hay tanta sensación de agobio como en el japonés.
El Juke y el Captur tienen la misma distancia entre ejes ¿por qué? Pues porque usan la misma plataforma. Eso quiere decir que en lo que a espacio en la fila trasera se refiere es muy parecido al Nissan. Buen hueco para las piernas y la cabeza aunque la banqueta es ligeramente más alta. Cuatro pasajeros podrán hacer viajes largos sin problemas. Pero el Renault gana en habitabilidad no solo por el espacio, también porque su banqueta trasera se desplaza longitudinalmente 16 centímetros para ganar o restar volumen de maletero en detrimento del espacio para los ocupantes.
Ninguno de los tres contendientes está pensado para desplazar a cinco pasajeros durante mucho tiempo. El espacio para los hombros en la segunda fila es limitado, lo mismo que la altura de las plazas laterales. Lo más recomendable es ocuparlos con un máximo de cuatro viajeros, pero si por algún casual nos vemos obligados a contar con un quinto inquilino más vale que sea en recorridos cortos. En ese caso no hay un claro ganador y la contienda queda muy equilibrada.
En cuanto al volumen de carga, las capacidades también nos dan pie a pensar en varios usos diferentes de cualquiera de estos B-SUV. Los tres se mueven en cifras muy similares, aunque por poco el 2008 es el más grande de los tres con un volumen mínimo de 434 litros de y 1.496 litros de capacidad máxima. Le siguen el Captur y el Juke qué, sorpresa sorpresa, tienen el mismo cubicaje. 422 litros de capacidad mínima para los dos, aunque el Captur, gracias su segunda fila desplazable puede llegar a contar con 536 litros sin abatir la segunda fila. Si la abatimos descubrimos que el Juke es el más pequeño de los tres, con 1.088 litros en contra de los 1.257 litros del francés.
Bajas cilindradas, la clave de la oferta mecánica
En cuanto a la parte mecánica lo más habitual a día de hoy para el segmento B-SUV es encontrarse con bloques pequeños de baja cilindrada y turboalimentados. Y ese es el caso de dos de nuestros integrantes. Por un lado tenemos el Nissan Juke con un motor de tres cilindros y un litro de cubicaje. Desarrolla 117 caballos y actualmente es la única oferta disponible dado que ha sido el último en llegar al mercado. A continuación encontramos el Peugeot 2008 también con un motor de tres cilindros, 1.200 centímetros cúbicos y 130 caballos. Y por último tenemos al más discordante de todos. El Captur muestra un motor turbo de cuatro cilindros y 1.3 litros que desarrolla 130 caballos.
En cuanto a las cajas de cambio todos los modelos pueden disponer de transmisiones automáticas como es el caso del Juke y el Captur. Ambos echan mano de una caja de doble embrague y siete velocidades. Por su parte, aunque lo solicitamos en automático, nuestro 2008 monta un cambio manual con seis velocidades. Sin lugar a dudas las opciones automáticas son las más cómodas pero también suponen un importante incremento en el precio como más adelante veremos. Y exclusivamente todos ellos envían la fuerza del motor a las ruedas delanteras sin posibilidad de montar esquemas de tracción total.
¿Cuál será el mejor tras el volante?
A día de hoy las marcas se tienen muy controladas y vigiladas entre ellas y es difícil encontrar grandes diferencias entre modelos. Pero he de decir que rápidamente he dado cuenta que el Juke es el que presenta la configuración más deportiva. Aunque el chasis es el mismo que el del Captur la puesta a punto es muy diferente. La suspensión es la más dura de los tres, algo que limita el confort, sumar también la llanta más grande, pero que permite un mejor control dinámico. Ninguno de los tres modelos está especialmente diseñado para grandes alegrías, pero sin lugar a dudas el Juke es el que menos incómodo se siente en esos terrenos.
Aunque sea el que menos potencia tenga de los tres el motor 1.0 DIG-T rinde bastante bien. Sus 117 caballos cunden bastante y en parte se debe a que tenemos hasta 200 Nm de par motor. Las aceleraciones son buenas y no tendremos problemas para incorporarnos a una autopista o para adelantar en carreteras secundarias, aunque habrá que tener cuidado cuando vayamos cargados a tope. Su cambio automático es bueno y sigue el ritmo del motor. Aunque es tosco en arrancadas está muy bien presentado en un uso regular. Las únicas pegas del Juke las pongo en el confort, mejor con una llanta algo más pequeña, y también en el tema de la rumorosidad. Es el menos aislado de los tres y por lo tanto el que más ruido transmite al habitáculo.
En el 2008 por el contrario la sensación de confort es mayor. Tenemos un habitáculo más aislado y sobre todo un conjunto de suspensiones más flojo. Todo en el coche está pensado para que pase de una forma más tranquila y eso se nota principalmente en las curvas. El balanceo de la carrocería es mucho mayor que en el Juke y por lo tanto, dinámicamente hablando el 2008 es el peor de esta comparativa, algo que tampoco importa mucho porque en realidad el que se compra un B-SUV tampoco se va a centrar en ese aspecto.
A pesar de tener tres cilindros,la mayor cilindrada del PureTech le permite ser el que mejores prestaciones presenta. De 0 a 100 en 8,9 segundos y velocidad punta de 198 Km/h. La verdad es que hay que reconocer que PSA ha hecho muy buen trabajo con este motor. Aunque los tricilíndricos presentan varios inconvenientes el PureTech los camufla bastante bien, aunque sigue presentando un ruido algo extraño a bajas vueltas. La pena está en el cambio manual, demasiado errático y tosco en su comportamiento, y en una dirección que no transmite absolutamente nada de lo asistida que está.
Mes tras mes el Captur es uno de los SUV más vendidos del mercado y es por algo, porque es el que presenta mejor equilibrio en todo. En su comportamiento, también. A pesar de disponer del motor más grande de esta comparativa está en una posición intermedia en cuanto a prestaciones. Y eso se debe a que el Renault apuesta principalmente por el confort, y de hecho es el más cómodo de las tres unidades que tenemos aquí. Todo te anima a conducir de forma relajada, y si por algún casual elevamos el ritmo no es tan ágil como el Juke, a pesar de llevar la misma plataforma, pero tampoco tan blando como el 2008. Así que una vez más está en un término medio.
Gracias a que el TCe tiene un cilindro más el refinamiento del motor es mayor. No hay tanta rugosidad a bajas vueltas y también es el más silencioso. La caja de cambios optimiza la calidad de rodadura. Es un doble embrague pero con un tacto muy suave aunque algo perezoso. Sin lugar a dudas es el más enfocado a los viajes largos y tranquilos, donde cumple tan bien como si habláramos de un segmento superior. ¿Las pegas? Pues no hay ninguna especialmente grande, así que puedo concluir fácilmente diciendo que a la hora de conducir el Captur no es el más dinámico pero sí el más equilibrado.
Tanto Renault, como Nissan y como Peugeot plantean diversos programas de conducción. En todos tenemos un modo Sport que en realidad no afecta demasiado a la conducción ya que en ninguno de ellos se puede ajustar el tarado de la suspensión. En todos los casos el modo deportivo endurece la dirección, hace ligeramente más sensible el pedal del acelerador, y en los Juke y Captur hace que el cambio automático sea algo más agresivo. Pero en términos generales la conducción sigue siendo la misma para los tres.
En el apartado de los consumos las cifras oficiales nos dicen que los tres rondan los seis litros de media. Sin embargo en nuestras pruebas el más eficiente ha sido el Captur con una media de 6,5 litros a los 100 kilómetros. Le ha seguido muy de cerca el Juke con una media final de 6,6 litros a los y por último el 2008 con un marcador final de 6,8 litros. Así que el Renault se lleva por poco esa victoria, pero su motor más grande le hace presentar consumos más estables en todos los circuitos. Por el contrario los bloques de tres cilindros disparan su consumo en entornos urbanos, por encima incluso de los 8 litros de media.
Ya que hablamos de gastos, el tema del precio es algo muy importante en los B-SUV. Las marcas no solo se vigilan a nivel mecánico y de equipamiento, también lo hacen en los precios porque saben que un euro arriba o un euro abajo puede marcar la diferencia entre firmar una venta y no hacerlo. Si nos fijamos en los precios de salida hay un claro ganador, y ese es el Renault Captur con un precio inicial de 14.779 euros para el acabado Life, aunque su equipamiento y diseño dejan bastante que desear. A continuación encontramos el Peugeot 2008 con un precio de salida de 19.650 euros, y por último el más caro de inicio, el Juke con un mínimo de 20.850 euros aunque con el mejor equipamiento base de los tres.
Resultado equilibrado pero con un ganador
A lo largo de esta comparativa he tratado de darte toda la información posible para que a la hora de tomar una decisión tengas todas las armas posibles en la mano. Por mi parte me despido anunciando unos resultados finales muy justos pero que dejan un claro ganador en esta comparativa. Ese el Renault Captur, no solo por ser el más barato, también el más equilibrado en todo. Por su parte el Peugeot 2008 basa su apuesta en la estética y el equipamiento, y por último el Juke lo hace en una conducción más dinámica. Ahora te cedo a tí el testigo, ¿con cuál de los tres te quedarías?