ComparativaComparativa Mazda MX-5 2015 vs MX-5 2014
Hablar del Mazda MX-5 es hacerlo de uno de los iconos más populares del mundo del automóvil. Sin duda, la cuarta generación, recién estrenada, ha sido uno de los lanzamientos del año. La cultura 'Miata' es un fenómeno que va más allá del propio producto y había que estar a la altura para no decepcionar a los entusiastas. Muchos se acuerdan de la primera generación al ver el resultado del nuevo roadster, pero es inevitable mirar a la tercera y partir de lo bueno que ya tenía. Hoy comparamos el Mazda MX-5 ND vs NC.
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Publicado: 09/12/2015 12:00
‘Long live the roadster’ o ‘larga vida al roadster’ es el grito de guerra con el que Mazda quiere volver a recuperar un espíritu que poco a poco ha ido cayendo en el olvido a favor de turismos versátiles, cómodos y con un alto grado de asistencias a la conducción.
En definitiva, un aburrimiento en comparación con el nuevo Mazda MX-5. Un coche tan atractivo como adictivo. Uno de esos ‘caprichos’ que hay que darse una vez en la vida, porque si te gustan las sensaciones al volante, créeme cuando te digo que ve difícil que con el mismo presupuesto encuentres algo mejor.
‘Jinba-Ittai’ es una expresión que trata de hacernos entender cómo se siente uno al volante del roadster, y es que los arqueros Yabusame son especialistas en un espectáculo concreto disparando flechas en movimiento. Para ello, el jinete y el caballo deben entenderse y estar en perfecta sintonía.
Y así entienden en el país del sol naciente el Mazda MX-5; un coche al que no le hace falta nada más que curvas y más curvas porque el vehículo y su conductor están perfectamente integrados y se entiende prácticamente como uno solo. Un roadster que estrena en la actualidad su cuarta generación en un momento de racionalidad, eficiencia y confort (no es el entorno más receptivo para un coche que prácticamente no representa ninguno de estos valores).
Sin embargo, se estrena en una época afortunada para Mazda que con su nueva línea de trabajo, la introducción de la eficiencia y el lenguaje ‘Skyactiv’, está sabiendo adaptarse a los nuevos tiempos y le es posible actualizar un coche tan emocional como icónico.
Personalmente, hasta que no vi el profundo trabajo que Mazda estaba realizando en las raíces de la marca, no pensé en un nuevo Mazda MX-5 y mucho menos en la vuelta del motor rotativo ni como concepto. ¿Recordáis aquello de Zoom-Zoom? Pues es hora de pensar en KODO – Alma en movimiento. Y con todo el cambio que ha supuesto, es de esperar que las diferencias entre la tercera generación (NC) sean abultadas respecto a la cuarta (ND).
Con el giro tan radical que la marca japonesa ha llevado a cabo, es de esperar que el salto generacional del Mazda MX-5 sea el más abultado de cuantos ha habido hasta el momento. Además, era hora de plantear de nuevo el coche, que a medida que se estrenaba una nueva generación, ganaba potencia, pero también tamaño y peso... y detractores, por supuesto.
Era hora de mirar a la primera generación (NA) y coger sus atributos, de mirar a la segunda generación (NB) y entender sus virtudes. De desmontar un NC y quedarse con lo bueno, y de poner ideas en común para que el ND fuera el roadster definitivo. No es momento de seguir creciendo, sino de dividir pesos, adaptar ‘Skyactiv’ al conjunto y de trazar la silueta más bonita que se haya hecho jamás para el Mazda MX-5; casi un Jaguar F-Type a escala cuyo resultado es un peso inferior a 1.000 kilos y el tamaño más contenido hasta la fecha.
En 2014 se vio por primera vez el coche en vivo, no sin antes verlo camuflado en Nürburgring, miles de conjeturas y un sin vivir de teorías. E incluso desde aquel primer momento hasta la llegada a los concesionarios, hemos tenido que esperar un año más y entendemos que el acontecimiento es importante porque la tercera generación ha estado nada menos que diez años en el mercado. Y no podría ser un acontecimiento de primer nivel sin un volumen de producción que desde 1989 suma más de 950.000 unidades.
Pero no podemos entender la evolución sin poner al lado del nuevo coche una unidad del último modelo, y nos referimos al Mazda MX-5 NC 1.8 de 126 CV con acabado Style y color Crystal White Pearl, que en las sucesivas entregas se va a enfrentar al Mazda MX-5 ND 1.5 131 CV Luxury en color Ceramic White. ¡No os lo perdáis!