Volvo XC90 D5, así es su diseño exterior y habitabilidad (II)
Tras la introducción y el repaso a la gama del XC90 del día de ayer nos metemos de lleno a evaluar el aspecto exterior y el habitáculo del nuevo SUV sueco. Sin lugar a dudas el diseño es una de sus claves para atraer clientes al concesionario.
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Publicado: 02/07/2015 09:00
Para Volvo el XC90 es su buque insignia, el que porta el estandarte de la marca hasta lo más alto y un modelo que ha vendido más de 636.000 unidades durante su primera generación, cifra que esperan superar en esta segunda. Además de todos estos atributos, el nuevo XC90 será el primero en plasmar el impactante diseño del Volvo Concept Coupe de hace ya un par de años.
El vehículo posee un diseño muy depurado sin ángulos flojos que derrocha robustez, sobriedad, elegancia y deportividad. Una vez dentro nos damos cuenta de que el vehículo ha sido cuidado hasta el más mínimo detalle: diseño limpio, alta calidad de materiales y ajustes, tecnología de abordo, confort y sobre todo seguridad, una característica innata en todos los Volvo que el fabricante se preocupa por mantener.
Lo primero que nos resalta a la vista es que el nuevo XC90 parece mayor que su antecesor y de hecho lo es. Ha crecido hasta situarse en casi los 5 metros de largo -4.950 mm para ser más exactos-, casi dos metros de ancho -1.923 mm- y 1.776 mm de alto.
El frontal se muestra muy robusto e imponente de líneas limpias y definidas. La nueva parrilla de grandes dimensiones de barras dobles verticales se encuentran custodiadas por las ópticas Full LED que dibujan el bello lenguaje de diseño “Martillo de Thor”, en el centro de este se encuentra el nuevo logo de Volvo de mayor tamaño que esconde en su interior una cámara. Las grandes entradas de aire laterales embellecidas con cromados emanan deportividad y bajo estas se esconden sutilmente las luces antiniebla.
El perfil y la zaga del XC90 no olvidan su vinculación con la primera generación, aunque con un diseño que en la evolución ha encontrado el punto idóneo entre el pasado y el futuro. ¿Qué sería de este SUV sin sus características ópticas que siguen el montante D hacia el techo? Estas encuentran una nueva firma en su interior de iluminación 100% LED que en su diseño tratan de abrazar al pontón a la altura de la línea de cintura. Todas estas líneas ya fueron adelantadas de alguna manera en el Volvo Concept XC Coupe.
Sin duda el diseño exterior es uno de los grandes pretextos para que los clientes se hagan con un SUV sueco en lugar de otros grandes rivales del segmento. La imagen en general resulta muy atractiva y fresca dentro de un segmento en el que el diseño se ha vuelto cada vez más conservador, además es capaz de transmitir el carácter tecnológico inherente dentro del nuevo Volvo sin pretender ser un vehículo traído del futuro.
En el interior del habitáculo contemplamos un diseño que rompe con todos los lazos del pasado y será la línea a seguir los por los futuros modelos de Volvo. Nos olvidamos casi al completo de la botonería para acostumbrarnos a una consola central protagonizada por una gran pantalla táctil de 9 pulgadas que nos hace pensar en cierta manera en el Tesla Model S. De hecho la consola central solo dispone de nueve botones que se limitan a las luces de emergencia, la calefacción de las lunas, mandos del sistema de audio, abrir la guantera y el botón “atrás” para el sistema de info-entretenimiento.
Por cierto, el nuevo sistema Sensus resulta muy rápido e intuitivo sobretodo para aquellos que están acostumbrados a navegar por los menús de una tablet. En poco tiempo te familiarizas con él y os aseguro que es una pasada el tener todos los sistema de asistencia a la conducción en un único menú con el que poder desactivar y activar los que desees con solo tocar la pantalla. A partir de octubre estará disponible el Apple CarPlay para este sistema.
Otras de las grandes novedades es la eliminación del clásico cuadro de mandos analógico por uno completamente digital mostrado por una pantalla digital de 12,3 pulgadas. El diseño de los gráficos que muestra es muy moderno aunque sigue representando las clásicas esferas del velocímetro (derecha) y el tacómetro (izquierda) mostrando entre ellas información relevante como la ruta del navegador.
Los materiales del interior han sido especialmente seleccionados para no ser cuestionado por su calidad y sus ajustes, de hecho la elección de superficies de todo tipo (plásticos, cuero, inserciones de metal o madera) no deja ningún punto débil a la vista. Volvo asegura que es el interior más lujoso que han fabricado jamás.
Posee detalles que serán capaces de enamorar a sus potenciales clientes como la bandera sueca en los asientos, la llave/mando forrada a juego con el tapizado del interior o un sensor que nos cierra automáticamente la cortinilla del techo panorámico cuando nos la hemos dejado olvidada al aparcar el vehículo y la temperatura interior asciende considerablemente. Seguimos con el botón de arranque y parada que se encuentra en el túnel central y es de accionamiento giratorio emulando el giro de muñeca que se realiza arrancando con una llave convencional y el retrovisor interior carece de marco dándole un aspecto de cristal flotante que además posee una brújula en su interior que te muestra hacia qué punto cardinal nos dirigimos.
Para los oídos más exigentes, Volvo tiene como opción el excelente sistema de sonido Bowers & Wilkins de 19 altavoces y 1.400 vatios de potencia con el que emular la sala de conciertos de Gotemburgo.
El habitáculo rebosa practicidad y confort. Podemos modificar la configuración de los asientos dependiendo de nuestras exigencias: el asiento del acompañante es abatible, la segunda banca dispone de tres asientos modulares que pueden abatirse y desplazarse hacia delante o hacia atrás individualmente (11 cm) y la tercera fila puede también abatir ambos asientos por separado. La distancia entre ejes es de casi 3 metros (2.984 mm) que junto a una buen trabajo del interior nos aseguran la máxima comodidad para todas las plazas.
La tercera fila de asientos posee reposavasos y salida del climatizador individual en el interior del montante C e incluso una pequeña guantera. El acceso es cómodo para niños pero resulta algo complicado para adultos debido al hueco que deja el asiento de la segunda banca. Las tres filas de asientos están situadas a modo de anfiteatro de forma de que haya visibilidad de la carretera para todos los ocupantes. A pesar de esta forma de situar los asientos la tercera fila puede albergar a personas de hasta 1,70 metros de altura según Volvo. Además, el fabricante sueco no se olvida de la seguridad de la segunda y tercera fila de asientos incorporando para todos ellos airbags laterales.
Al abatir los cinco asientos de las últimas filas la superficie es completamente plana desde el comienzo del maletero hasta los asientos delanteros. El volumen del maletero depende de la configuración de los asientos: como mínimo disponemos de 277 litros con siete ocupantes, 700 litros con cinco ocupantes y 2.000 litros si solo disponemos de las plazas delanteras. En el caso de optar por una versión de cinco plazas la capacidad del maletero no aumenta para así no romper la superficie plana del mismo. Dispone además de la opción de abrir el portón trasero sin manos, tan solo pasando el pie por debajo del parachoques posterior.