PruebaHyundai i20, presentación (III): Dinamismo, conclusiones y valoración
Llega el momento de ponerse tras el volante del nuevo Hyundai i20. Probamos el 1.25 MPI de gasolina con 85 CV y el 1.4 CRDI diésel de 90 CV. El modelo coreano no puede presumir de grandes prestaciones y propone una conducción relajada asegurando mucha suavidad y un buen confort de marcha incluso fuera de la ciudad.
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Publicado: 08/12/2014 09:00
La oferta mecánica del Hyundai i20 se compone de los motores de gasolina 1.25 MPI de 85 CV y 1.4 MPI de 100 CV, además de los diésel 1.1 CRDI de tres cilindros y 75 CV y el 1.4 CRDI de 90 CV. Llega el momento de ponerse tras el volante y comprobar las virtudes del modelo coreano en la ciudad y fuera de ella.
Todas las fotos del Hyundai i20 durante su presentación las puedes encontrar en nuestra galería de imágenes
Comportamiento dinámico
No cabe duda de que ninguno de los motores brilla por sus prestaciones y basta decir que la mecánica que tiene una aceleración más poderosa, el 1.4 MPI de 100 CV, necesita 11,6 segundos para pasar de 0 a 100km/h. En el lado opuesto está el 1.1 CRDI, que alarga el tiempo hasta 16 eternos segundos. Por tanto, las mecánicas se rinden a su condición de coche urbano y proponen una conducción relajada.
En este sentido el i20 cumple muy bien porque su conducción es muy agradable y confortable. La dirección goza de una acertada asistencia, la caja de cambios es precisa y muy suave, la frenada es dosificable (con frenos de disco en las cuatro ruedas en todas las versiones) y la suspensión filtra bien las irregularidades del asfalto.
Durante la presentación pudimos probar el motor de acceso, el gasolina 1.25 MPI de 85 CV con cambio manual de cinco marchas, y el turbodiésel más potente 1.4 CRDI de 90 CV y cambio de seis velocidades. Tanto uno como otro destacan por ser muy suaves y ofrecer una sonoridad y vibraciones contenidas. Además, durante la presentación sendos motores lograron unos consumos moderados.
Aunque ambos tienen una potencia similar, el 1.25 MPI tiene unas prestaciones más pobres quizá lastrado por unas relaciones de cambio largas para favorecer los consumos. Su uso está orientado para las grandes urbes y los alrededores, pero en un viaje con abundante equipaje puede quedarse corto de potencia.
El 1.4 CRDI no es un tiro, pero es más satisfactorio porque ofrece una mejor respuesta en la zona baja del cuentarrevoluciones y permite una mayor versatilidad de uso aunque hay que tener en cuenta que hay una notable diferencia de precio entre ambos: el turbodiésel cuesta 2.300 euros más.
Conclusiones
Las primeras unidades del Hyundai i20 llegarán a los concesionarios durante el presente mes de diciembre. Un modelo con el que la marca coreana ha puesto toda la carne en el asador porque compite en el segmento más demandado de Europa y el segundo más solicitado en España.
Por ello disfruta de un diseño elegante y sofisticado, que le da un empaque de coche más grande, además de un habitáculo cuidado y refinado. Además, puede disfrutar de tecnologías poco habituales en el segmento B como los sensores de aparcamiento delantero y trasero, el volante con calefacción, el sistema de aviso de abandono de carril o el techo solar panorámico.
Su habitabilidad interior y maletero hacen plantearse la necesidad de un coche más grande, no ya en ciudad sino incluso para afrontar viajes largos cargados de maletas ¿Realmente es necesario dar salto al segmento C? La apuesta del i20 es que un coche urbano puede ser tan polivalente como un compacto.