PruebaNissan 370Z Nismo: Introducción, versiones y precios (I)

Hay coches como el que hoy os presentamos que son difíciles de empezar a describir porque su alta carga emocional hace que resulte complicado escribir los primeros renglones de la forma más adecuada. Por ello, pido disculpas si estas primeras líneas resultan complicadas de entender con facilidad. Probablemente el Nissan 370Z Coupé sea, como mis primeras líneas, una creación incomprendida (en nuestro país), y sólo unos pocos compradores con ciertas agallas, puedan permitirse el lujo de valorar esta apuesta frente a un mercado repleto de ofertas por los 46.600 euros que piden de base y estiran hasta los 57.950 de la variante más radical con el apellido Nismo.

Silueta inconfundible para el deportivo de Nissan

Los coches con Z de Nissan han sido una inspiración para una generación de conductores actuales que en su adolescencia pasaban horas frente a los videojuegos de carreras o películas como ‘A Todo Gas 3’. Poco a poco se comprende que el coche no ha nacido para ser el más confortable y ni siquiera el más rápido (si no, no existiría el Nissan GT-R), sino para crear una tendencia nueva que podríamos denominar ‘Street Racer’; algo así como corredor callejero. Por aquellos videojuegos y películas parecía como si este coche se creara originalmente para realizar una apuesta a punto acorde al gusto de cada usuario. Y a día de hoy, el apellido Nismo no es ni más ni menos que la puesta a punto que propone el propio fabricante.

Con el Nismo, la última letra del abecedario no es suficiente

Pero bajando los pies a la tierra, la realidad es que muchos años después nos encontramos frente a este coche y es tal como uno se imagina: una maravilla en diseño, un coupé de dos plazas... y por si fuera poco nos ponemos al volante de la versión Nismo del Nissan 370Z. Para ponernos en órbita es un coupé de dos plazas de tracción trasera, con un motor delantero atmosférico V6 de 3.7 litros y 344CV de potencia máxima. Significa un aumento de 16 CV frente a las versiones ‘normales’.

Interior con mezcla de materiales y una posición de conducción baja pero confortable

Se presenta con cambio manual de 6 velocidades sin disponibilidad de una transmisión automática y entre el equipamiento que diferencia al Nismo de las versión básica y ‘Pack’ (intermedia), encontramos una barra de refuerzo, que además es visible tras los asientos exclusivos de la versión, un emblema con el número de serie, molduras específicas, volante en piel y alcántara, un kit exterior aerodinámico propio, con escapes, llantas y paragolpes también específicos, emblemas Nismo repartidos por algunas zonas del coche y otros detalles. Pincha aquí para conocerlos todos.

El equipo de frenos es de discos ventilados de 4 pistones delante y de 2 pistones detrás. La relación del cambio de marchas es compartida con las variantes convencionales (de cambios manual, lógicamente), y los neumáticos son prácticamente iguales en la versión Pack y en la versión Nismo: 245/40 con llanta de 19 pulgadas delante y 285/35 R19 detrás (en la versión Pack la anchura es 275).

Llantas específicas y de 19 pulgadas con el grabado de la versión

No me gustaría despedir esta primera parte introductoria, donde dejamos mucho lugar a la imaginación de lo que será esta prueba sin admitiros que hay que entender este coche para enamorarse profundamente. No hay que buscar en él el empuje de un turbo porque no lo hay. Tampoco los acabados de primera categoría, porque entonces no sería un Z. Y por ello, antes de aceptar el reto de Nissan debemos recomendar probar uno, para salir, o bien decepcionado o tan enamorado que no habrá otra letra posible en el abecedario. Si eres del segundo grupo, seguro que nos entiendes.