Nuevo Range Rover Vogue SDV8: imparable

El protagonista de nuestro artículo es todo un mito en el mundo off road y en el mundo de los todoterreno de lujo: se trata del rey, de la gran referencia.

Este modelo de 2 toneladas de peso puede sonrojar a mucho especialistas del mundo 4x4 sin renunciar a la tecnología y le lujo. ¿Lo quieres todo? Lo tienes.

Existen cierto modelos que llegado el momento revolucionaron el mercado, bien por ser los primeros en equipar ciertas tecnologías o en representar un nuevo concepto en el mundo del automóvil y algo parecido debió pasar el día que Land Rover decisión crear un vehículo que valiera para todo.

El Range Rover nació en 1970 y desde entonces han pasado solo 4 generaciones ¿Cómo es esto posible? Porque cada generación que sale al mercado sigue siendo un éxito en su pequeño segmento. Todos los Range Rover se caracterizan por tener una formas recta en sus diseño, por lucir una gran superficie acristalada y por llevarte allá donde te propongas.

Es como si la mejor ber­lina de lujo y el mejor todo terreno estuvieran peleando por conseguir el mismo título.

Aspecto exterior e interior.

El diseño que luce la última generación del Range Rover es cuando menos atrevido y arriesgado, es difícil que un diseño más bien sencillo resulte agraciado cuando se aplica a grandes dimensiones. La parrilla frontal bajo el nombre del modelo está acompañado por unos grupos ópticos con tecnología led de aires futurista que mantiene la seña de identidad de la marca. La superficie lateral y las ventanillas mantienen un cuidado equilibrio por mantener el ADN del modelo intacto.

Este tanque tiene una longitud de 4’9 metros, 1’98 m de anchura y 1’83 metros de altura, es todo un mastodonte. ¿Su peso? 2360 kg.

Si lo observamos lateralmente nos damos cuenta de que los pilotos delanteros y traseros están unidas por una línea que atraviesa las manecillas de las puertas y da movilidad el diseño. En la puerta delantera también vemos cómo han añadido unos detalles que parecen branquias. Cuanto más te acercas al modelos más te das cuenta de lo grande que es.

Pese a sus generosas dimensiones el aspecto del Range transmite elegancia y serenidad.

Sin embargo lo más llamativo del modelo, la imagen con la que te quedas, es el nivel de lujo que hay en el interior. Así que tras abrir la puerta y dejar que se encaje con el cierre automático descubres que dentro hay un nivel de refinamiento altísimo digna de una berlina de alto lujo.

Y es que todo está recubierto por un cuero de calidad excepcional: da pena sentarse en él. Las grandes dimensiones del modelo y la luz que inunda el habitáculo gracias al techo panorámico y la superficie acristalada hacen que el interior parezca un salón, eso sí la tapicería clara ayuda a crear esta sensación.

Los asientos recogen el cuerpo a la perfección, son cómodos y amplios y están llenos de detalles de calidad, como el resto del habitáculo. Al principio abruma su tecnología, el confort y el lujo, en seguida te acostumbras y cuando cambias de coche, recuerdas con ojos iluminados el nivel de detalle presente en el modelo.

Los mandos de la consola central integran tanto el selector del cambio como el “All Terrain Select” y botones que influyen en la dinámica de conducción como la altura de la suspensión y el funcionamiento de la reductora. La guantera es doble y trae unos cascos inalámbricos por si alguno de los pasajeros quiere escuchar un cd u otra emisora.

Hay ciertos detalles de contraste, por su concepción el habitáculo tiene una presentación muy clásica y encajar con el detalle de la instrumentación que es completamente digital proyecto de manera virtual todos sus elementos como las agujas y esferas. Una pena que esos magníficos diseño que se proyecta con gran calidad y nitidez no sean personalizables, pero mira, un mal menor para este estandarte del lujo.

En la consola central se encuentra el selector del cambio que es circular, como otros modelos de la marca. Cuando el vehículo está apagado con el contacto quitado, el cilindro/selector de marchas se enrasa con la superficie de la consola central.

La evolución del modelo es evidente, ahora es más ligero,ancho, bajo y largo que antes, incorpora más tecnología, motores más potentes y es más respetuoso con el medio ambiente. Elegancia y glamour allá donde mires.

¿Miedo a salir fuera de la carretera? Sistema Terrain response

Uno de las cualidades intrínsecas del ADN del Range Rover es su movilidad. En general, todos tenemos la sensación de que adentrarse en terreno off road es éxitoso si se cumplen, al menos, dos requisitos, tener un vehículo adecuado y tener experiencia.

Pues bien, quien quiera o necesite adentrarse con el Range Rover fuera del asfalto no va a necesitar saber expresamente cuándo bloquear los diferenciales ni cuando engranar la reductora para tener una aventura offroad, ahora solo es necesario indicar mediante el mando giratorio del «Terrain Response» el tipo de terreno por el que nos estamos movimiento.

El sistema se ocupa de manera completamente autónoma de gestionar de la manera más eficientes los bloqueos de los diferenciales, el control de tracción, el funcionamiento de la caja de cambios y de la respuesta del motor. El resto es todo magia.

En movimiento & capacidades

El Range Rover tiene un sistema de tracción permanente realmente efectivo, por lo que tiene un gran de capacidad de avance fuera del asfalto. Dispone de bloqueo del diferencial central y del trasero, de reductora, de un generoso recorrido de la suspensión y altura libre.

Al comenzar la marcha el sonido del motor apenas es perceptible, gracias al aislamiento excelente del habitáculo. El sonido del motor penetra algo más al interior cuando nos encontramos en proceso de aceleración. Por fuera el diesel V8 suena como el de un tanque imparable.El cambio automático ayuda al conjunto ya que es realmente suave.

Por ciudad tenemos mucha visibilidad ya que parece que vamos en un trono justiciero que nos da poderes por encima del resto de usuarios de la carretera. Su descomunal tamaño nos pone las cosas difíciles a la hora de maniobrar o de dejar el vehículo en un parking. No hay problemas en introducir el vehículo, pero las plazas de los mismo son muy muy justas y si sacamos las manos por el techo solar podemos tocar los carteles de los parking o el mismo techo si no son especialmente altos. Es sencillamente brutal.

Las cámaras exteriores sirven para no destruir todo lo que haya a nuestro paso. Además de su uso en ciudad (espacio entre vehículos, bordillos) también nos servirá en terreno off road para ver referencias con rocas o matorrales contundentes. A pesar de las tropecientas cámaras, no es fácil maniobrar con él.

Nuestra unidad de pruebas no tiene un consumo bajo. Es un diesel, sí, un V8 de 340cv pegado a una locomotora, por lo que sus registros son al menos de 11L a los 100km. 9`7 litros es el dato más bajo que hemos conseguido en carretera, a velocidad constante y tranquilos. El depósito de combustible es de 100L, si tenemos cartera para llenarlo, el confort que tiene el RR nos nos permitirá notar la menor fatiga, seas un pasajero de la fila de asientos delanteros como traseros.

La suspensión neumática, que es de serie en toda la gama nos aísla bastante del estado del asfalto. En carreteras reviradas sale a relucir el lado más torpe del RR, con unas inercias innegables, por lo que si buscamos prestaciones dinámicamente no puede hacer nada frente a rivales como el Touareg o el Cayenne, etc… pero fuera del asfalto no tiene rival.

Conclusiones

La suspensión y puesta apunto trata de disimu­lar las inercias y aguanta una conducción alegre de una manera más que digna, pero el dato del peso está ahí y puede aparecer en cualquier momento.

Si sueles conducir de una manera relajada, pro­bablemente no llegues nunca a saber lo mucho que pesa. El motor Diesel de la versión SDV8, con 340cv funciona con mucha suavidad y la mayoría de sus clientes es muy probable que no echen en falta un motor de gasolina que ofrezca mejores prestaciones

Te permite hacer algo que no sé si puedes hacer con algún otro vehículo: ¿acaso hay algún coche en el mercado que te permita atravesar un río, embarrar hasta los topes su elegante carrocería y luego asistir a una velada de etiqueta?