Peugeot RCZ R, toma de contacto en el Jarama

Cuando Peugeot presentó en 2.009 el RCZ en el Salón de Frankfurt causó gran expectación entre el publico. El deportivo francés de silueta similar al Audi TT ofrecería una estética y prestaciones deportivas por un precio sustancialmente inferior al del alemán. Tras una renovación estética en 2012, cuatro años después de su presentación, vuelve a Frankfurt para presentar al RCZ R, modelo de serie más potente de la historia de Peugeot.

El motorde gasolina 1.6 THP de 200 CV, anterior tope de gama, resultaba muy convincente, pero la agresiva estética del RCZ pedía a gritos un modelo aun más potente y divertido al que no le importara pisar un circuito algún fin de semana.

Tras 55.000 unidades vendidas del RCZ en todo el mundo, 1.150 en España, Peugeot decidió trabajar junto a Peugeot Sport para crear un nuevo RCZ que ofreciese potencia, dinámica y comportamiento acorde con las aspiraciones del coupe deportivo francés.

Así nació el RCZ R. El motor THP 1.6 eleva la potencia hasta los 270 CV, lo que se convierte en uno de los motores de mayor relación cilindrada/potencia con una potencia específica de prácticamente 170 CV/litro. Para estar a la altura de este motor el chasis ha sido puesto a punto, se le ha añadido un diferencial mecánico de tipo Torsen y nuevo sistema de frenos entre otros cambios.

Bloque 1.6 THP de 270 CV

Para alcanzar los 270 CV de potencia con el bloque THP de tan solo 1.6 litros de cilindrada tuvieron que unir fuerzas los chicos de Peugeot Sport y el departamento de calidad de PSA. Peugeot Sport trabaja en la mejora del motor y del chasis mientras que el departamento de PSA se encarga de la fiabilidad.

El THP 1.6 no ha llegado a su límite puesto que Peugeot Sport ha conseguido sacar de él 300 CV, sin embargo con esta potencia no supera los estrictos estándares de calidad de PSA para ser comercializado en un vehículo de serie. El 1.6 THP de 270 CV está garantizado para más de 200.000 km.

El RCZ R alcanza los 250 km/h como velocidad máxima, limitada electronicamente. Realiza el 0 a 100 km/h en 5,9 segundos, alcanza los 400 metros desde parado en 14,2 segundos y los 1.000 metros en 25,4 segundos. Teniendo presente estas prestaciones homologa tan solo 6,3 litros a los 100 km en su ciclo mixto y emite 145 g de CO2/km recorrido.

Las modificaciones del 1.6 THP para alcanzar los 270 CV del RCZ R contempla un nuevo turbocompresor -fruto de la experiencia con el RCZ Racing Cup-, nuevo sistema de escape, eleva la tasa de compresión hasta 9,2:1 -a la altura de un Porsche 911 GT3- y un intercooler específico. Internamente el motor cuando funciona a bajo régimen se activa en modo confort, mientras que alto régimen entra en modo racing.

El combustible óptimo para el RCZ es gasolina de 98 octanos, aunque también admite 95 octanos con los que pierde 5 o 6 kW de potencia. Según Peugeot el RCZ R tiene oculto un modo de socorro con el que puede funcionar con combustible de hasta 91 octanos. Todos los motores son arrancados y probados antes de salir de la fábrica.

El refinamiento del motor no solo contempla aumento de potencia hasta los 270 CV a 6.000 rpm y 330 Nmde par máximo entre 1.900 y 5.500 rpm, respecto a los 200 CV y 275 Nm de del anterior tope de versión las emisiones se CO2 se han visto reducidas en 10 g hasta los 145 g. CO2 por km recorrido. y el consumo en 0,4 litros, lo que supone una mejora en cuanto a eficiencia (6,7 l./100 km y 155 g CO2 en el THP de 200 CV).

Otras mejoras para el rendimiento

El Peugeot RCZ R se ha puesto a punto para estar a la altura de la nueva potencia ofrecida por el motor, no solo ha sufrido mejoras el bloque de gasolina. La altura del vehículo se ha reducido en 10 mm, los amortiguadores se han vuelto más duros y la barra estabilizadora se ha atrasado para ganar agilidad. Todo esto para adaptarse al nuevo diferencial Torsen de deslizamiento limitado que mejora la estabilidad sobre todo en curvas.

El RCZ tampoco va descalzo, las llantas de 19 pulgadas de nuevo diseño y 0,5 pulgadas más anchas montan gomas Goodyear Eagle F1 Asymmetric235/40 R19. El sistema de frenado firmado por Peugeot Sport está compuesto por discos de 380 mm de diámetro y 32 mm de grosor sobre un soporte de aluminio, lo que le permite mejor refrigeración y menor aporte de peso al conjunto del sistema.

Estos discos son de alto rendimiento y resistentes al día a día. Necesitan menos de 61 metros para frenar desde 130 km/h hasta parar por completo.

El alerón trasero retráctil ha sido sustituido por uno fijo que ofrece mejores prestaciones y ayuda a contribuir en el ahorro de peso al prescindir del sistema que le permitía plegarse. El peso en orden de marcha del RCZ (con conductor) ha sido reducido desde los 1.411 kg del RCZ 1.6 THP 200 CV hasta los 1.355kg.

Diferencias a la vista respecto a un RCZ

Exteriormente el RCZ R tiene un empaque más deportivo: la altura rebajada, llantas especificas de 19 pulgadas bi-tono y el alerón fijo es lo que visualmente llama más la atención. En la zaga ademas encontramos un nuevo difusor trasero que enmarca las dos salidas de escape, una situada en cada extremo.

Los emblemas de la marca “Peugeot” y “R” se muestran en rojo en la parrilla. La “R” es mostrada también en la zaga y en las llantas. Los arcos del techo son en negro mate y solo puede escogerse entre cuatro colores de carrocería: Rojo Erythrée, Negro Perla Nera, Gris Sidobre y Blanco Opale.

En el interior la “R” roja comparte protagonismo con los nuevos asientos deportivos tapizados en piel y alcántara con costuras de contraste en rojo, como todo el resto del interior. La “R” sobre un fondo cromado es encontrada en el reposacabezas de los asientos delanteros y bajo la palanca de cambios. Al abrir la puerta el embellecedor de las talonearas nos da la bienvenida con el logo de Peugeot Sport R.

Unas vueltas por el Jarama

Sobre el papel el RCZ R pinta muy bien, ¿Pero que tal se porta en circuito? Peugeot eligió el lugar adecuado para comprobarlo, el circuito de Jarama, donde pudimos dar unas vueltas rápidas en el Peugeot más rápido hasta la fecha.

Lo primero que percibes al entrar en el habitáculo es la increíble comodidad de los nuevos asientos deportivos, como pudimos comprobar unos segundos más tarde estos agarran al cuerpo de forma muy satisfactoria.

Los cambios de marcha son más cortos y resulta mucho mas fácil llegar a la zona roja del cuenta revoluciones que en los otros RCZ que hemos probado. El ESP completamente desconectable sigue de serie en el RCZ R, pero por razones de seguridad no nos permitieron tocarlo.

El diferencial Torsen permite trazar las curvas a mayor velocidad y más cerradas que los RCZ corrientes, la entrega de los 270 CV se realiza de manera sorprendente en el francés. Tracciona muy bien y consigue un paso por curva con gran estabilidad.

A pesar de ser un compacto de tracción delantera, el diferencial evita los subvirajes de manera sobresaliente. El eje trasero se porta bien y puede servirnos de ayuda a la hora de afrontar las curvas, ya sean rápidas o lentas.

La dirección la he notado algo más dura y directa. El trabajo de esta y de los nuevos frenos es espectacular, se nota que Peugeot Sport ha metido mano en todo para ofrecer un producto a la altura de su firma.

Los 270 CV del león rugen con un sonido que sin ser exagerado sabe encandilar al oído, sin embargo a bajas revoluciones se muestra más dócil, perfecto para un uso diario pero con las prestaciones necesarias para divertirnos en un circuito de vez en cuando. Justo el cliente tipo que busca Peugeot para este RCZ R.

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Fotos: JuanJo Delgado