PruebaPorsche Cayenne 2015, presentación (II): Diseño, habitabilidad y equipamiento
El Porsche Cayenne 2015 presenta multitud de virtudes, algunas de ellas no apreciables a simple vista, pero muchas de ellas pensadas para un mejor comportamiento y una mejor habitabilidad. La calidad y el uso diario son dos cualidades adscritas al ADN de la marca, y en este caso el Porsche Cayenne 2015 hace honor a las mismas.
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Publicado: 26/09/2014 14:30
En su día Ferdinand Porsche pronunció unas palabras que poco después se convertirían en realidad: “Si construyéramos un modelo todoterreno según nuestros estándares de calidad, y tuviera un escudo Porsche en el capó, la gente lo compraría.” Y vaya si lo han hecho, ya os contaba en la primera parte de la prueba las exitosas cifras que ha logrado el Cayenne a lo largo de su breve historia, al igual que os contaba la gama y los precios que se han fijado para España.
En esta segunda parte de la prueba me dedicaré a hablaros de aspectos de diseño, que guarda varios detalles especiales, de la habitabilidad, detalle que no hay que olvidar y que realmente sorprender y por último del amplísimo equipamiento de serie y opcional que presenta el Porsche Cayenne 2015.
Diseño y habitabilidad
En términos de diseño el nuevo Cayenne me recuerda un poco a la historia del 911. Porsche ha optado por un estilo inconfundible desde el principio, puede ser más o menos acertado, pero es su elección, y al igual que ha ocurrido en el deportivo, mantendrán esa línea hasta que poco a poco llegue a ser perfecta. Estos alemanes y sus ideas cuadriculadas.
En cuanto a esta generación hay que decir que el diseño es mucho más estilizado, más ágil y menos brutote que todas las generaciones anteriores. Gracias a los logros conseguidos en temas mecánicos, los diseñadores han conseguido reducir drásticamente el tamaño de las rejillas delanteras. ¿Os acordáis de aquellas enormes parrillas con las que apareció el primer Cayenne?
Toda la sesión de fotos de la prueba la encontrarás en la extensa galería de imágenes del Porsche Cayenne 2015, 70 fotos con todo detalle
La reducción del tamaño de las parrillas delanteras ha conseguido ofrecer una línea frontal más afilada, menos SUV. Realmente da la sensación de ser un coche más bajo de lo que ciertamente es. Los diseñadores del Cayenne querían darle un aspecto más voluminoso y para ello en vez de crecer a lo ancho han logrado el mismo efecto cambiando la forma del capó. Antiguamente este presentaba una línea en forma de V, pero ahora este pasa a formar parte de las aletas delanteras, aportando esa sensación de más anchura, que no es real.
En los laterales se acierta a ver unas líneas mucho más marcadas. Cada nervio dibujado en la carrocería está marcado profundamente, arrojando un aspecto de más empaque, más dinámico y menos gordinflón. Como detalle curioso los diseñadores han querido imitar la línea inconfundible del 911 en el Cayenne, desde el borde de ataque del frontal hasta el pequeño alerón trasero. Para lograrlo han tenido que insinuar un ligero descenso en la línea del techo.
La parte trasera nos depara, al igual que la delantera, unas nuevas ópticas, ahora con tecnología Bi-Xenón de serie y LED para el Turbo. Son más estrechas y pequeñas, estilo propio de los últimos modelos de Porsche. Por último y para ayudar a una identificación rápida del modelo se han dispuesto tres tipos de escape. Si es un solo tubo estamos hablando del Diésel, si son dos esféricos nos encontramos antes las versiones S y por último si la salida es doble pero con una forma más rectangular es que estamos presenciando al todopoderoso Turbo.
Una vez dejamos el exterior y nos adentramos en el interior nos embarga un olor especial, un aroma de cuero y calidad, que invita a sentarse y disfrutar del viaje. La calidad es notable, en un 95%, el interior está cubierto de cuero de la mejor calidad y de apliques que simulan la madera y la fibra de carbono. Sin embargo ese otro 5% sorprende por el uso de plásticos que no esperaba encontrar en un Porsche. Parece que han abierto la caja de piezas de Volkswagen y las han colocado con la intención de ahorrar un poco.
Una vez dejamos este detalle aun lado nos encontramos con la consola central que ya conocíamos. Pocos cambios en este aspecto, muchos botones, cada uno corresponde a un parámetro determinado, climatización, navegador, radio, configuración variable de la altura, dureza de la suspensión y bloqueos de los tres diferenciales para cuando nos adentramos fuera de las carreteras, no me cansaré de repetirlo, en este terreno el Porsche Cayenne sigue sorprendiendo por su comportamiento.
Por primera vez, y como exigían los clientes el Cayenne, cuenta con una opción interior de cuero bitono
Si nos ponemos a los mandos nos encontramos con un volante parecido al del 918 Spyder y con las cinco esferas míticas. La más grande de todas indica las revoluciones a los extremos nos encontramos con los indicadores de temperaturas y nivel de combustible, estando las otras dos reservadas para el tacómetro y una que varía a nuestro gusto, pudiendo indicar la navegación o el ordenador a bordo entre otras.
Te sientes donde te sientes te encontrarás cómodo, el Cayenne está pensado principalmente para cuatro ocupantes, pero un quinto no irá para nada incómodo, ya que el asiento es individual pero más estrecho. Es destacable el espacio para las piernas de los asientos traseros, teniendo en cuenta que la longitud total no llega a los cinco metros, es impresionante la comodidad que arroja, un valor muy superior al de otros rivales.
Por último el maletero, con una variación de 618 y 1.728 litros es perfecto, tanto para los trayectos urbanos del día a día como para la hora de afrontar largos recorridos cargados a tope. Un botón permite bajar la altura del coche al máximo, facilitando así la carga y descarga de bártulos, eso sí, siempre relacionado con la suspensión neumática. La capacidad de uso diario está tan marcado en el ADN de Porsche como la deportividad, y los pequeños detalles como este lo demuestra.
Equipamiento
La nueva generación del Cayenne presenta un equipamiento de serie ampliado. Común para todas las versiones se nos presentan elementos los faros Bi-Xenón, portón trasero automático, control de presión de los neumáticos y un nuevo sistema de audio de gran calidad. Además a todo esto cada una de las versiones equipa levas en el volante, que por primera vez puede ir acompañado de la calefacción del mismo. En anteriores ocasiones solo existía la posibilidad de escoger uno de los dos, o deportividad o comodidad, ahora ya no hará falta devanarse los sesos.
Una vez acabamos con el equipamiento de serie, que ya de por sí es bastante completito, empezamos con los extras, y es aquí donde empiezan los problemas. La lista no es grande, es lo siguiente. La capacidad de personalización es absoluta, y no me refiero al color de la carrocería o de la tapicería, sino que es posible elegir mil elementos sin la necesidad que estos vayan asociados a otros elementos. Gran detalle, que se aprecia y que nos permite que el precio sea lo más ajustado a nuestros requerimientos.
Si te contara todos los elementos esto podría ser más largo que el Quijote, por lo que me centraré en los más llamativos y prácticos. A las ya mencionadas ópticas se les puede añadir el sistema Porsche Dynamic Light System, que por sí solo se encarga de cambiar la potencia de los haces en función de los obstáculos o tráfico que nos encontremos. También debo hablar del cierre confort de las puertas. Esta función es habitual verlo en berlinas de lujo, y ahora por primera vez en el Cayenne, basta con acercar la puerta al quicio para que el sistema entre en funcionamiento, cerrando la puerta de forma sutil por sí mismo.
La seguridad, tanto activa como pasiva, ha sido uno de los puntos principales en el desarrollo de la nueva generación del Porsche Cayenne.
Antiguamente el parabrisas calefactable impedía la incorporación de los típicos asistentes de carril o el control de crucero adaptativo, sin embargo en esta ocasión los ingenieros se han devanado la cabeza y han sido capaces de crear una lámina que va ubicada entre las dos capas del parabrisas que hace el mismo efecto además de reducir la filtración de sonido al habitáculo. Gracias a este avance, por el Cayenne es ahora capaz de montar más elementos de seguridad activa, como el asistente de cambio de carril, el aviso de invasión de línea y el freno multi-colisión que actúa una vez producida una colisión impidiendo que el coche se mueva libremente y produciendo un segundo accidente más grave.
El nuevo Cayenne no es solo ofrece un amplio equipamiento de serie, confort y calidad, sino que también es capaz de evitarnos multas. Es muy común que con los controles de crucero lleguemos a una cuesta abajo y el coche incremente la velocidad sin nosotros quererlo, y lo más normal es que haya algún radar camuflado que nos pilla. Sin embargo esto no pasará en este caso, ya que el control de velocidad es capaz de actuar por sí solo sobre el pedal del freno, manteniendo en todo momento la velocidad prefijada y ahorrándonos algún susto en forma de multa, eso sí, siempre que se circule a velocidades legales.
La lista de equipamiento sigue y sigue, pero te acabo de contar los principales cambios respecto a las versiones anteriores. Sin embargo no puedo despedir esta segunda parte sin hablarte del Porsche Car Connect, una aplicación que por el momento sólo estará disponible para el S E-Hybrid. A través de nuestros teléfonos móviles podremos informarnos acerca del nivel de batería o combustible, la climatización y la ubicación del coche. De esta forma tendremos un perfecto conocimiento del estado del coche sin tener que estar en él. En un futuro cercano Porsche espera ampliar esta posibilidad al resto de la gama.
Con esto doy por finalizada esta parte de la prueba del Porsche Cayenne 2015. En las próximas dos partes pasaré a la acción, os hablaré con todo detalle las sensaciones que son capaces de aportar los pesos pesados de cada categoría, el S Diésel y el todopoderoso Turbo. No os lo perdáis, porque igual os sorprenden las conclusiones. Nos vemos.