Prueba Audi Q2, actualización tecnológica

Cuatro años después del nacimiento del modelo de entrada de la familia Q, el Audi Q2 se actualiza con un ligero lavado de cara, una oferta mecánica revisada y una ampliación de su dotación tecnológica. Ya hemos podido conocer las novedades del SUV urbanita del fabricante de los cuatro aros en su presentación.

En este restyling, el Q2 renuncia definitivamente a los faros halógenos y propone ópticas led desde el nivel de acceso con una firma lumínica de nuevo cuño. Además, por primera vez permite equipar los faros Matrix Led. Este sistema de iluminación matricial está compuesto por siete diodos individuales para la luz principal, otros siete para los intermitentes dinámicos, y diez diodos para la luz diurna. Los pilotos traseros también son de nueva factura y pueden tener tecnología led. En el caso de equipar los faros matriciales también se incluye intermitentes traseros dinámicos.

La parrilla octogonal ha perdido altura para ensanchar visualmente el coche y para dejar espacio por encima a tres pequeñas entradas de aire muy disimuladas inspiradas en el Audi Sport Quattro de 1984, un detalle de espíritu racing que también se homenajea en algunos de los últimos lanzamientos de la marca alemana.

Las formas geométricas están más presentes que nunca incluso en los paragolpes, que han sido rediseñados y muestran entradas y salidas de aire pentagonales de generoso tamaño para dar una imagen más dinámica, especialmente con el equipamiento opcional S line. Con esta actualización, el Q2 mide 17 mm más que en el modelo anterior hasta alcanzar los 4,21 m de longitud, una ganancia debida a los nuevos volúmenes de los paragolpes. El resto de cotas se mantienen inalteradas.

Además del acabado base es posible optar por las líneas de equipamiento Advanced y S line. Las posibilidades de personalización del exterior son abundantes y es posible, por ejemplo, cambiar el tono del pilar C que de serie está pintado en el color de la carrocería aunque también pueden ir acabados en negro, gris y plateado y en carbono.

También se renueva la paleta de colores para la carrocería con cinco nuevos tonos: verde Manzana, gris Manhattan, azul Navarra, gris Flecha y azul Turbo. Del mismo modo hay disponibles un amplio abanico de llantas de aleación que van desde las 16 a las 19 pulgadas.

Más equipamiento de seguridad y confort

No hay grandes cambios de diseño en el interior del SUV germano, donde las novedades se centran en las nuevas formas para las salidas de aire de la climatización y las palancas de nuevo diseño tanto para las versiones manuales como para las automáticas. Hay multitud de asientos, tapicerías y colores para escoger, unas posibilidades de individualización que se agrupan en siete paquetes.

Las versiones de acceso proponen una instrumentación analógica que puede ser sustituida por el cuadro totalmente digital Audi Virtual Cockpit de 12,3 pulgadas. Destaca por ofrecer una formidable calidad de imagen y varias opciones de personalización en la forma de visualizar la información.

En el apartado multimedia, el MMI radio plus supone el sistema de infoentreteniento más sencillo al proponer una pantalla a color de 7 pulgadas. Con el paquete Connectivity se incluye un sistema con pantalla de 8,3 pulgadas que lleva preparación para el sistema de navegación y conectividad con Android Auto y Apple CarPlay.

El sistema más completo disponible es el MMI Navegación plus. Mantiene la misma pantalla flotante de 8,3 pulgadas pero implementa funciones remotas que permiten bloquear el vehículo a distancia o comprobar el nivel del depósito de combustible mediante la aplicación gratuita myAudi. También incluye los servicios Audi connect con navegación con Google Earth e información del tráfico en tiempo real, entre otras posibilidades.

La capacidad de carga del Q2 no ha cambiado en este restyling por lo que sigue ofreciendo un maletero de 405 litros que se amplían hasta alcanzar los 1.050 litros cuando se pliegan los respaldos de los asientos traseros. Las versiones con tracción quattro tienen 50 litros menos en ambas mediciones. El portón trasero eléctrico se queda en la lista de extras.

La gama de motores del nuevo Q2 2021 está compuesta por dos opciones TFSI y un TDI, al margen del espectacular Audi SQ2 2021. A pesar de la tendencia del mundo del automóvil, este modelo alemán no ha incluido ninguna mecánica electrificada así que los tres propulsores disponibles se conforman con la etiqueta medioambiental C de la DGT.

Como opción de acceso se propone el Q2 30 TFSI con el motor de gasolina de tres cilindros 1.0 TFSI que desarrolla 110 CV y un par máximo de 200 Nm. Está vinculado obligatoriamente a un cambio manual de seis marchas y es de tracción delantera.

La oferta en gasolina se completa con el Q2 35 TFSI que recurre a un motor de cuatro cilindros 1.5 TFSI de 150 CV con sistema cylinder on demand (COD) que desactiva dos cilindros ocasionalmente para reducir el consumo. De serie emplea una caja manual y opcionalmente puede escogerse la transmisión de doble embrague S tronic de siete marchas.

En gasóleo la propuesta se concreta en el Q2 35 TDI S tronic quattro con el propulsor 2.0 TDI de 150 CV, siempre asociado a la caja de cambios automática y a un sistema de tracción total quattro que estrena un embrague multidisco de nueva generación. Más adelante se añadirán nuevas opciones diésel incluyendo un 30 TDI que será la opción más económica.

Novedades en dirección y suspensión

Durante el evento de presentación tuvimos oportunidad de conducir el Q2 35 TFSI S tronic que es, sin duda, la opción más apetecible de la gama. Es un modelo que destaca por su dinamismo y muestra una aceleración de 0 a 100 km/h en apenas 8,6 segundos. Ahora la dirección progresiva viene de serie y da una mayor agilidad a este modelo puesto que se vuelve más directa a medida que aumenta el giro del volante. El confort es adecuado aunque la insonorización del habitáculo podría ser mejor.

De serie este Audi propone una suspensión trasera de eje torsional en variantes de tracción a un solo eje mientras que las versiones quattro optan por una suspensión trasera multibrazo. De manera opcional hay suspensión deportiva que reduce la altura de la carrocería al suelo en 10 milímetros. El tope de gama de estos sistemas es la suspensión con control de amortiguación que deja escoger la firmeza del tarado.

Una de las áreas que más se han reforzado en el Q2 2021 ha sido el apartado de seguridad. La cámara frontal en el retrovisor interior es nueva y gracias a ello tiene más asistentes de seguridad. Por ejemplo, el modelo más pequeño de la familia Q lleva de serie el Audi pre sense front, un sistema de frenada automática que detecta otros vehículos, peatones o ciclistas. También se puede disponer de sistemas como el asistente de conducción adaptativo, el reconocimiento de señales de tráfico mediante cámara de vídeo, el aviso de cambio de carril o el asistente de tráfico cruzado trasero.

El nuevo Audi Q2 ya está a la venta desde 27.960 euros. La línea Advanced incrementa el precio en 2.100 euros respecto al acabado base y es la opción que presenta un buen equilibrio entre precio y equipamiento. La personalidad más dinámica se enmarca en el Q2 S line que tiene un sobreprecio de 1.250 euros con respecto a la línea Advanced.