PruebaBMW i3, aventura por carretera y un EcoTour (IV)
Hoy ponemos a prueba al BMW i3 en un recorrido que muchos realizan los fines de semana: una pequeña salida a la sierra y vuelta en el día. Además, participamos en un EcoTour contra contrincantes de múltiples categorías y circulamos por el circuito del Jarama en una jornada lluviosa y satisfactoria para el pequeño eléctrico.
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Publicado: 22/04/2014 10:00
Apostar por un coche eléctrico ya es por sí solo una aventura, pero ¿y si tenemos una casa en la sierra y queremos usar el BMW i3 para ir a ella el fin de semana? Después de plantear una ruta nos decidimos a probarlo. El trayecto es de 62 kilómetros y en su mayoría es una autopista y en cuesta arriba; la mayor pesadilla de un eléctrico. Es una tarea dura para el pequeño BMW pero en principio no debería haber problemas.
En esta ocasión, la carga completa me marca 132 kilómetros por lo que debería ser suficiente. En el destino tengo un enchufe preparado que me garantiza una vuelta saludable ya que mi intención es pasar el día en la sierra. A bordo del BMW i3 vamos 3 personas así que las condiciones no podían ser peores. En los primeros kilómetros de carretera trato de que el indicador de consumo de energía se active lo menos posible, aunque es inevitable una vez que empieza la pendiente. No rebaso los 90km/h y selecciono el modo ECO PRO +, el más eficiente de los tres, a pesar de que se desconecta hasta el climatizador.
Los kilómetros bajan a pares por cada 1.000 metros recorridos. Es normal, estoy haciendo un uso contrario al recomendado para un eléctrico. Aprovecho las pequeñas bajadas para ganar 1 o 2 kilómetros de autonomía y es curioso pelear por tan poca distancia. En un coche normal, cuando te quedan 130 kilómetros de autonomía, va siendo hora de pensar en parar en una gasolinera a repostar. En el BMW i3, ganar o perder un kilómetro es crucial y 132 es la máxima autonomía que hemos visto tras una carga completa.
Pienso mucho mis movimientos y procuro no encontrarme con algún coche que se incorpore a mi carril (el derecho) para frenar y tomar una salida. Hay que anticipar mucho cuando se trata del máximo ahorro. Al llegar a la primera zona de poblado, he consumido 60 kilómetros de autonomía, restándome 70. Apuesto a que a mi destino llegaría restándome 40, pero una vez que circulo por dentro del poblado para salir a la siguiente travesía, me doy cuenta de que la autonomía se ha quedado clavada. Sigo por la travesía y atravieso el siguiente pueblo. Subo un pequeño puerto y estoy en mi destino. La autonomía sorprendentemente no ha bajado mucho más y queda algo menos de la mitad de la autonomía, pero no mucho menos. Estoy sorprendido, aunque aquí no acaba todo.
Tras unas cuantas horas de recarga en un enchufe convencional, inicio la marcha inversa con poco más de 90 kilómetros de autonomía. Como empieza la cuesta abajo, quiero saber cuánto puedo ahorrar e incluso recargar. Jugando con el pedal del acelerador y su conducción ‘One pedal’ empiezo a conseguir kilómetros tras varios metros. La capacidad de recargar es mucho mayor a la de un enchufe y continúo cuesta abajo. Sigo obteniendo kilómetros y las barras se llenan. En apenas 10 kilómetros he conseguido introducir 30 kilómetros aproximadamente y esto significa que el motor eléctrico y los sistemas de recarga del vehículo en las condiciones adecuadas, son capaces de generar más carga que un enchufe convencional.
El BMW i3 en el EcoTour de AutoBild
Ayer os contaba que con la primera carga pude recorrer 110 kilómetros restándome 15. Pues bien, con esta misma unidad hemos participado en el EcoTour organizado por AutoBild en una categoría sin contrincantes que nos ha permitido llevar al límite al BMW i3. Una vez más había múltiples tipos de carreteras y se obtenían puntos por regularidad y eficiencia. Junto a Borja Hormigos, Jefe de Prensa de BMW, pudimos exprimir al máximo el rendimiento del BMW i3 y recorrimos un total de 120 kilómetros restándonos algo más de 30 kilómetros de autonomía. ¡Increible! En una segunda prueba de regularidad en el Jarama, logramos vencer al resto de rivales de todas las categorías. Eso sí, divirtiéndonos un poco a base de acelerador y contravolante en un circuito empapado por la lluvia. Anécdotas difíciles de repetir con un eléctrico.