BMW X3 xDrive20d Luxury Line, a prueba

BMW X3 xDrive20d a prueba

Uno de cada 3 BMW que se vende en el planeta pertenece a la familia X, a la familia de los todocaminos, por lo tanto cada vez que la marca decide renovar uno de estos modelos lo estudia a conciencia y eso es lo que ha pasado con el BMW X3, que presenta un diseño mucho más atlético y musculoso pero que también tiene un mayor espacio interior y por supuesto una mayor calidad.

Llegó al mercado en 2003 y vendió más de 50.000 unidades, por lo tanto es una apuesta muy importante para la casa. Con el motor diésel de 190 CV, tracción a las cuatro ruedas xDrive y cambio automático de 8 relaciones está disponible desde 51.000 euros. Aquí tienes todos los precios.

A nivel estético mantiene la línea y dimensiones del modelo anterior, aunque ahora es ligeramente más alto, ancho y alto, pero no hay un solo panel de carrocería compartido con su antecesor. Los principales cambios del frontal vienen dados por la inclusión de Faros LED Adaptativos de serie en toda la gama y unos faros antinieblas en los extremos del paragolpes.

No olvides suscribirte a nuestro canal.

Los riñones delanteros ha crecido de tamaño, incorporan una parrilla activa que abre y cierra sus lamas para refrigerar el motor o mejorar el flujo de aire, según sea necesario. En su vista lateral llama la atención estas aberturas en las aletas delanteras, tras el paso de rueda junto al nacimiento de la puerta, que mejoran la canalización del aire.

En la zaga destaca su alerón que integra la luz de freno, nuevos pilotos posteriores con tecnología LED apoyados en el portón del maletero -con apertura eléctrica de serie- y una salida doble de escape. Aquí tienes las diferencias con la generación anterior.

Una mejora de calidad notable

Cuando entras en su habitáculo salta a la vista que hay una mayor calidad, no solo por los materiales empleados o la unión entre ellos, si no porque hay algunos elementos que han sido cogidos prestados de “sus hermanos mayores”, de la Serie 5 o el Serie 6 GT. Elementos tales como la palanca de la caja de cambios, la instrumentación digital o el sistema multimedia con servicios Connected Drive, pantalla táctil y control por gestos.

Interior del BMW X3

Al poner las manos en el volante, gracias a su acolchamiento y cuero empleado en su recubrimiento, esta imagen de calidad que percibimos a nivel visual, comienza a transmitirse por el tacto, experiencia que continúa siendo satisfactoria cuando activamos el climatizador, interactuamos con la palanca de cambios o palpamos el salpicadero. Tenemos la sensación de estar en un vehículo lujoso que cuida los detalles.

En su habitáculo hay distintos logos “X” y “X3” por distintas partes del habitáculo, bajo el climatizador, en el travesaño que queda visible al abrir la puerta, o en la cara oculta del pilar B que es visible cuando nos subimos o bajamos del habitáculo.

En la renovación de este modelo no se han olvidado de las plazas traseras, detrás también se aprecian detalles de calidad, como el acabado de los asientos o con el recubrimiento de las puertas. Este modelo ha aumentado su longitud en 51 mm pero la batalla en 54. Ello afecta directamente a la habitabilidad y comodidad de los pasajeros traseros, y detrás hay espacio para que pasajeros de 1,9 metros de estatura viajen cómodamente.

Plazas traseras del BMW X3

El reposabrazos abatible descubre un compartimento donde dejar pequeñas botellas, también podremos abatir parte del mismo junto al respaldo de la plaza central y comunicarnos con el maletero, a parte de configurar la climatizador de tres zonas, una dedicada exclusivamente a los acompañantes traseros.

El respaldo de la banqueta trasera puede inclinarse ligeramente, pudiendo viajar en una posición más erguida consiguiendo un poco más de capacidad de carga en el maletero, que puede equipar apertura de manos libres. Su capacidad homologada es de 550 litros y si abatimos los asientos en una proporción 40/20/40 podremos cargar hasta 1.600. Con los asientos tumbados el respaldo de estos quedan enrasados con el piso del maletero pero ligeramente inclinados hacia arriba.

Esta unidad luce el acabado Luxury Line, para verlo con detenimiento puedes ver esta galería:

Impresiones al volante

No he tenido oportunidad en probar este modelo en terrenos sin asfaltar. La sensación de lujo y calidad que el modelo presenta en parado también se transmite al conducirlo, especialmente porque está muy bien insonorizado y por la sensación de robustez y estabilidad que transmite. Desde la puesto de conducción, uno se siente poderoso, se aprecia el nervio del capó y los generosos retrovisores no generan ruido aerodinámico.

Junto a la palanca de cambios se encuentra una botonera que nos permite cambiar el modo de conducción del X3 entre 4 programas. Eco pro, Confort, sport y Adaptative, el último de ellos cambio según nuestros hábitos la configuración del vehículo, que cambia si vamos conduciendo el coche de una manera muy sosegada y progresiva o si abusamos del pedal de freno y acelerador.

El consumo obtenido es superior al homologado

Teniendo en cuenta las medidas del X3 y su peso de 1.825 Kilos, podríamos esperarnos un consumo desbordado. Aunque no ha sido así, si que ha estado por encima del homologado, durante el tiempo de pruebas hemos obtenido consumos medios comprendidos entre 6,9 y 7,5 cada 100 Km. Mezclando carretera con ciudad, practicando una conducción normal con aceleraciones puntuales.

Conseguir los consumos homologados es muy complicado

Sacando el rendimiento a su motor, que permite realizar el 0 a 100 km/h en 8 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 213 km/h, el consumo puede establecerse en los 10 litros y no bajará hasta que tratemos con delicadeza el acelerador. En carretera hemos obtenidos registros que variaban entre 6,3 y 7.1 litros y el modo Eco Pro, nos ha mantenido en un límite entre 5 y 6 litros, siempre y cuando las condiciones de marcha nos fueron favorables: sin tramos ascendentes y sin tráfico.

Transmite mucha calidad pero también ha subido sus precio

Si tenemos que movernos mucho por ciudad, notaremos sus cotas en el momento de maniobrar. en este sentido los sensores de parking y su complejo sistema de cámaras nos ha ayudado en multitud de ocasiones. Además también he podido probar el sistema de aparcamiento automático.

Conclusiones

BMW ha hecho un gran trabajo de revisión con su X3 y el nombre de nueva generación le viene al pelo porque ha sido mejorado prácticamente en todos sus aspectos. Lo que menos me ha gustado: hay un poco de desconexión entre las órdenes que le mandamos al volante y lo que hace el vehículo, en parte porque está muy asistido.

Otra cosa que no me ha gustado tanto es el precio, aunque por otro lado, tenemos que recordar que es un modelo de lujo, y si lo vemos con respecto a sus competidores la relación precio calidad o precio equipamiento es bastante acertada, sobretodo porque el equipamiento de serie de esta nueva generación ha sido ampliado.

Lo que más me ha gustado: la calidad que transmite al ser conducido y el espacio interior; el vehículo es más grande por fuera pero también por dentro y eso es muy importante. Por último mencionar que hay mucha disparidad entre los registros de consumo homologados y los que he podido obtener, pero a su vez, los que he obtenido no me han parecido algo desproporcionado. Tendremos que probarlo a fondo en un futuro.

Ahora parece más un coche de lujo que un todocamino