Prueba comparativa Volkswagen Caddy vs Citroën Berlingo (con vídeo)
Las nuevas generaciones del Citroën Berlingo y el Volkswagen Caddy son dos de las referencias del mercado entre las furgonetas. Cada una de ellas tiene sus propios trucos para ofrecer la máxima polivalencia y cualidades de monovolumen ¿Cuál interesa más?
Vamos a enfrentar dos de las furgonetas más populares del mercado: el superventas Citroën Berlingo con el recientemente renovado Volkswagen Caddy. Dos modelos que en sus versiones destinadas a particulares tienen una faceta monovolumen compatible con el uso laboral. Máxima versatilidad.
En cuanto a diseño las dos furgonetas son muy diferentes pero no se puede negar que tienen un aspecto muy moderno y atrevido. El modelo alemán propone algunas opciones de equipamiento como la posibilidad de tener faros led o llantas de aleación de hasta 18 pulgadas mientras que el francés propone algunas opciones más de personalización en cuanto a detalles de color.
Los dos modelos se ofrecen en dos tamaños de carrocería, uno medio y otro largo (Berlingo Talla XL y Caddy Maxi), y en ambos casos el Berlingo es 10 cm más corto y 5 cm más alto que el Caddy. Las dos marcas ofrecen la posibilidad de configurar el interior con cinco y siete plazas en sendos tamaños de carrocería. ¿Echamos un vistazo al interior?
En el Berlingo encontramos una posición de conducción más elevada mientras que el Caddy es el que tiene los asientos confortables. Tanto en uno como en otro casi todo está realizado en plástico duro pero de tacto agradable, aunque los ajustes son un poco mejores y más sólidos en el alemán. Ambas marcas han puesto el acento en la durabilidad.
Dimensiones | Caddy | Berlingo Talla M | Caddy Maxi | Berlingo Talla XL |
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Longitud | 4,50 m | 4,40 m | 4,85 m | 4,75 m |
Altura | 1,83 m | 1,88 m | 1,83 m | 1,88 m |
Anchura | 1,85 m | 1,85 m | 1,85 m | 1,85 m |
Plazas | 5 / 7 plazas | 5 / 7 plazas | 5 / 7 plazas | 5 / 7 plazas |
Las dos pueden tener un equipamiento abundante para este segmento, ya sea de serie o de manera opcional. Es posible disfrutar de acceso y arranque sin llaves, freno de estacionamiento eléctrico, climatizador bizona, techo panorámico o una base de carga para smartphones. También pueden tener cámara trasera, en el caso del Berlingo incluso con varias vistas pero peor resolución de imagen.
La apuesta por la practicidad va más allá en el Berlingo con incontables compartimentos y huecos donde dejar cosas. Hay espacios por todas partes: hay múltiples huecos en las puertas, un compartimento gigante en la consola, hay dos guanteras e incluso se pueden guardar cosas en el techo y bajo el suelo ¡Son 92 litros adicionales de espacio! Encontrar un lugar para guardar algún objeto es fácil, lo difícil será recordar dónde lo guardaste.
Por su parte, el Caddy destaca por sus pantallas. El modelo de Volkswagen es la única furgoneta que puede equipar una instrumentación totalmente digital recurriendo a una pantalla de 10,25 pulgadas. En el francés el cuadro siempre es analógico aunque da la posibilidad de añadir un head-up display que no puede tener el alemán.
Otra pantalla que marca la diferencia es la del sistema multimedia. Ambos coches brindan conectividad con Android Auto y Apple Carplay, pero Citroën propone una pantalla flotante de 8 pulgadas mientras que, dependiendo de la versión, Volkswagen ofrece una pantalla integrada de 8,25 ó 10 pulgadas.
Estas dos furgonetas proponen unas plazas traseras con distintas opciones de modularidad. En el Citroën estas plazas son abatibles dejando un suelo casi plano, una solución práctica. En el Volkswagen también son abatibles, dejando un evidente escalón, pero además también son plegables y extraíbles ofreciendo una mayor funcionalidad. El proceso de extracción es muy sencillo pero los asientos son muy pesados.
En el Caddy los asientos posteriores dan un espacio para las piernas bastante notable y encontramos elementos como las bandejas plegables, varios bolsillos tras los respaldos delanteros, salidas de aire traseras y un par de tomas USB. La pena es que las ventanillas son fijas, no se pueden abrir.
Nada más abrir las puertas traseras del Berlingo que, por cierto, son más pesadas que las del Caddy, se observa una diferencia clave a primera vista y es que esta fila propone tres asientos independientes, los tres del mismo tamaño. En el germano la fila trasera está seccionada en dos partes con una proporción 60:40. Eso hace que la furgoneta gala gane enteros en su función monovolumen.
En el Citroën también encontramos bandejas plegables, una toma USB y salidas de aire que en este caso permiten regular el caudal, pero a diferencia del Caddy en esta furgoneta tenemos elevalunas eléctricos e incluso es posible equipar cortinillas. Eso sí, el espacio para las piernas es más pequeño probablemente con la intención de aprovechar más la zona de carga.
Las versiones con siete plazas de estos dos modelos desafían a los monovolúmenes más grandes añadiendo una tercera fila de asientos compuesta por dos asientos independientes bastante espaciosos y que son extraíbles. En el caso del Berlingo en Talla XL, es decir la carrocería larga, estas dos plazas también son deslizantes.
El acceso al espacio de carga se realiza mediante dos portones de gran tamaño que en el caso del Berlingo puede ofrecer una luneta practicable. El francés también cuenta con otro elemento práctico y es que la cubierta del maletero, que es rígida, se puede colocar a dos alturas y soporta hasta 25 kg de peso.
Ambos modelos tienen un maletero gigantesco con una capacidad inalcanzable para un turismo. A pesar de su tamaño compacto, en estas versiones de carrocería media son capaces de dar más de 1.200 litros de capacidad medidos hasta el techo en el caso del Caddy y más de 1.300 litros en el caso del Berlingo.
Sí, el Berlingo es más capaz que su rival aunque su carrocería es más corta. Recordad que es un poco más alta y comentaba antes que se había sacrificado un poco de espacio para los ocupantes de la segunda fila así que Citroën ha jugado muy bien sus cartas en este aspecto concreto.
Maletero | Caddy | Berlingo Talla M | Caddy Maxi | Berlingo Talla XL |
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Maletero con 7 plazas en uso | 191 litros | 65 litros | 446 litros | 322 litros |
Maletero con 5 plazas en uso | 1.213 litros | 1.355 litros | 1.720 litros | 1.900 litros |
Maletero con 2 plazas en uso | 2.556 litros | 3.000 litros | 3.105 litros | 3.500 litros |
En cuanto la configuración de la gama mecánica hay varias características diferenciales entre ambos modelos. La propuesta en gasolina se concentra en un único motor de 110 CV para el Berlingo y de 114 CV para el Caddy, con la diferencia importante de que Volkswagen recurre a un propulsor de cuatro cilindros mientras que la marca de los chevrones se conforma con uno de tres, una característica que puede decantar la balanza hacia el alemán.
De todos modos la mayor parte de la oferta se centrará en los motores diésel que en ambos casos están disponibles en estos coches con dos niveles de potencia. El francés propone el bloque 1.6 BlueHDI con 102 y 130 CV mientras que su oponente casi calca las características con el 2.0 TDI de 102 y 122 CV.
Por último ¿qué pasa con los combustibles alternativos? Aquí sí que hay diferencias muy importantes porque Citroën va a ofrecer una versión 100% eléctrica del Berlingo (el Citroën ë-Berlingo) que no tendrá equivalente en el Caddy, mientras que Volkswagen apostará por una versión híbrida enchufable (PHEV) y otra de gas natural (GNC) que no estarán disponibles en el francés.
Conduciendo el Citroën Berlingo con el motor BlueHDI de 130 CV queda claro que es una opción mecánica excelente. Tiene un buen empuje y sobre todo sorprende por su consumo, qué es unas décimas más bajo de lo que es capaz de ofrecer su oponente. Así que lo normal será situarse entre los 5,5 y 6 l/100 km aproximadamente, salvo que hagamos mucha ciudad o vayamos cargados con frecuencia. Si el recorrido acompaña y nos esforzamos en hacer una conducción decididamente eficiente se pueden conseguir medias por debajo de los 5 l/100 km, impresionante.
Desde luego son valores fantásticos y se suman a un buen confort de marcha gracias una razonable insonorización y a unas suspensiones de tarado muy blando. Queda evidenciado que las furgonetas actuales poco tienen que ver con las de hace algunos años que eran mucho más espartanas. Ahora la propuesta de las versiones dirigidas a particulares es más próxima a la de un monovolumen tradicional.
Una característica que puede decantar la balanza en algunos casos es que la furgoneta francesa propone un sistema que mejora la tracción del eje delantero, el Grip Control, pero no puede tener versiones con tracción total que sí están disponibles en el Volkswagen: el Caddy 4Motion. Esa ventaja de la alemana puede ser interesante para aquellos que vayan a hacer un uso del vehículo fuera de las zonas asfaltadas en actividades de ocio o que circulen con frecuencia en lugares donde el clima adverso sea habitual.
A bordo del Volkswagen Caddy con el motor TDI de 122 CV la experiencia es ligeramente diferente. Gasta un poquito más que su rival pero sigue consiguiendo unos registros magníficos y nuevamente la conducción eficiente encuentra recompensa. Este modelo ofrece una conducción similar a la de un turismo gracias a una posición más baja y a una adecuada agilidad fruto de unas suspensiones de tarado más firme que las del Berlingo.
El Caddy está disponible con cambio manual o una caja automática DSG de doble embrague y siete marchas que multiplica la comodidad de uso. Es un dato importante porque el Berlingo sólo puede configurarse con cambio manual: antes también había disponible una caja automática EAT8 de convertidor de par con 8 marchas pero ha sido eliminada de la gama.
En cuanto a sistemas de seguridad poco tienen que envidiar estas furgonetas a cualquier turismo compacto ya que pueden equipar control de crucero adaptativo, asistente de ángulo muerto, asistente de mantenimiento en el carril, cambio automático de luces, un sistema de reconocimiento de señales de tráfico o un asistente de estacionamiento automático.
Tampoco hay que olvidar que el precio suele ser más bajo en la furgoneta francesa así que unido a que es capaz de ofrecer un consumo algo más contenido queda claro que el Citroën Berlingo es una magnífica elección desde el punto de vista económico. Por su parte, quien busque versiones con cambio automático o con tracción total debe poner la mirada en el Volkswagen Caddy, que propone una experiencia de conducción más cercana a la de un turismo. La decisión es tuya.