Prueba Fiat Tipo SW, igual de bueno pero más práctico

El Tipo SW será la última variante de la gama en llegar a los concesionarios

Ni uno, ni dos, sino tres son las versiones del nuevo Fiat Tipo. La casa italiana quiere recuperar ese mercado en parte perdido por la ausencia de berlinas compactas, sencillas, prácticas y económicas. Un mercado en auge en los últimos años. Por eso han salido a la luz una nueva gama de productos que tienen como intención conquistar a miles de compradores. El Tipo ya no es solo una berlina o un compacto, sino que también es familiar. El Fiat Tipo SW que he tenido ocasión de probar y conocer de primera mano.

Como ya he dicho, con la llegada del Station Wagon se completa una gama muy atractiva. Fiat sabe que es lo que necesitan sus clientes, y los que no lo son. Y para ello se ha decantado por dejar a un lado el Fiat 500 y sacar una línea de productos que tiene como principales lemas la sencillez y la practicidad, sin dejar de lado el aspecto económico ni la habitabilidad.

A la hora de crear el Tipo SW los diseñadores se centraron en crear dos voladizos exactamente iguales

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Estamos ante la variante más práctica de todas. El Tipo ha sido concebido desde sus inicios como una berlina compacta. De ahí han ido surgiendo las diversas carrocerías que conocemos: la compacta de cinco puertas, y esta familiar. La peculiaridad de esta última es que no deriva de la berlina como todos podríamos imaginar, sino del compacto. Esto hace que estemos ante una copia exacta en temas de diseño, salvo por la zaga que se extiende casi 22 centímetros.

El SW, al igual que el compacto, monta faros principales con luz diurna tipo LED, cosa que el sedán no tiene

Como es lógico, es la variante más grande de las tres que hay, y aunque muchos puedan pensarlo, el Tipo SW no sacrifica habitabilidad para dar más espacio al maletero. Las cotas interiores son las mismas pero en la zona de carga nos encontramos ante un espacio de 550 litros de capacidad mínima. Un hueco impresionante con la comodidad de una boca de carga baja y ancha, lo que facilita la entrada y descarga de maletas y demás equipaje.

Y seguimos con las semejanzas con el Fiat Tipo 5 puertas. En el interior nos encontramos con el mismo espacio. Mismo salpicadero, misma distribución, misma tecnología. No cambia nada. Los materiales siguen siendo correctos, plásticos blandos en determinadas zonas y plásticos duros en su mayoría. La verdad es que a pesar de la abundancia de este componente, da la sensación de estar bien fabricado. Pensado para darle mucho uso y para durar mucho tiempo.

Es un coche pensado para familias, así que por todo el interior se presentan espacios donde poder dejar gran cantidad de utensilios. Además Fiat ha eliminado la típica molestia de tener que agacharse para meter a los niños. Es un coche relativamente alto. Entrar y bajar de él es sumamente cómodo y sencillo. Sus puertas abren en un ángulo casi recto, 80º, y encima los asientos están situados en una posición relativamente alta. Como ya he dicho: todo muy bien pensado.

Lo mismo pasa por dentro. Interior diferente al sedán, pero exactamente igual que el compacto

Pero bueno. Dejando a un lado el tema práctico y habitacional del Fiat Tipo SW, es hora de entrar en detalle en el campo del comportamiento. Ya te puedo adelantar que es igual de bueno que sus hermanos mayores. A pesar del ligero incremento de peso, este no se deja notar a la hora de conducir. Un coche muy práctico y con un comportamiento realmente bueno.

Prueba Fiat Tipo SW 1.6 Multijet 120 CV

Y llegamos al tercero de la gama. Si hace unos meses te hablaba del comportamiento del Fiat Tipo sedán, y hace unas horas del Fiat Tipo 5 puertas, es hora de hablar del hermano mayor, de la variante Station Wagon. Al igual que sus hermanos pequeños la gama mecánica del Tipo SW está formada por unidades diésel y otras gasolina, me entre 95 y 120 CV. Una gama ajustada en su rango de potencia pero que como ya te iré diciendo es más que sobrada.

Si me pusieran una venda en los ojos y me pusieran a conducir cualquiera de los hermanos Tipo, te soy sincero y te diría que no noto diferencia alguna. Bien es cierto que los tres modelos equipaban el mismo motor y el mismo cambio, pero ni siquiera en el tema dinámico noto diferencia alguna. Y esto es un lujo si hablamos de un familiar como lo es este Station Wagon.

La verdad es que para tratarse de un familiar, la zaga ha sido extendida con muy buen gusto

En cuanto a transmisiones, la gama Tipo contará con cambios manuales, automáticos y otro de doble embrague

Uno podría pensar que por tener una carrocería más larga y por pesar algún kilogramo de más se iba a ver afectada la conducción. Pero nada más lejos de la realidad. Como ya he dicho en la prueba del Fiat Tipo 5 puertas, la gama Tipo va sobrada de todo. Tanto de espacio como de rendimiento. Bien es cierto que no he tenido la ocasión de probar la variante de acceso, pero teniendo en cuenta que estamos ante la misma cilindrada y el mismo motor, con potencia reducida, no me cabe duda alguna que su comportamiento será igual de bueno, aunque con menos pegada claro.

Los encargados de poner a punto el Tipo bien merecen un reconocimiento, pues tras dar la vuelta al mundo más de 200 veces en kilómetros y kilómetros de pruebas, el comportamiento es intachable. Un motor bien afinado, refinado y brioso se suma a una caja de cambios perfectamente ajustada, y a una suspensión con el correcto punto de ajuste entre en confort y el dinamismo. Lo mejor de todo es que se nota ese trabajo y dedicación.

El motor más potente de toda la gama es más que suficiente para tirar del Tipo SW y todo lo que este pueda cargar en sus 550 litros. Es un bloque elástico con una entrega de potencia muy lineal y progresiva. Un término medio entre en el comportamiento y el ahorro. Bien es cierto que si vas a andar todo el día cargado, o si vas a circular mayoritariamente por carreteras de montaña este es el motor que te recomiendo, pues no te defraudara.

Sus 550 litros de maletero crecen de manera exponencial si abatimos la segunda fila de asientos

Durante la prueba los consumos no se antojaron importantes. La intención era comprobar la capacidad del motor. Aunque tengo que reconocer que alguna miradita al ordenador sí que cayó y este desprendía cifras que rondaban entre los seis y los siete litros. Repito, no son datos veraces pues la prueba no trato de averiguar lo ahorrador del coche, y si lo capaz. Y una vez más digo que más capaz de lo que uno podría esperar.

Si me centro en el terreno de la comodidad, he de decir que el Tipo SW es exactamente igual que sus hermanos una vez más. Presenta las mismas cotas interiores que el cinco puertas, por lo que el espacio para los ocupantes interiores es exactamente el mismo. Por supuesto solo varía el tamaño del maletero, que crece 110 litros. 30 con respecto al sedán. Es bastante silencioso, bastante cómodo y muy apañado para todo.

No cabe duda, viendo los datos de ventas que está cosechando la variante sedán, 22.000 en toda Europa en apenas cinco meses, que el Tipo SW será un buen éxito para Fiat. En realidad se espera que toda la gama lo sea. Llamará la atención por su excelente relación calidad-precio. Casi inigualable por sus rivales. Por el momento la variante familiar será la que más tarde en llegar, pues no lo hará hasta después del verano. Por el momento a precio desconocido. Según se vayan acercando las fechas de lanzamiento las conoceremos.

Pero si sois unos ansiosos, y queréis haceros una idea de por dónde rondarán, calcular unos 2.000 euros más que el 5 puertas. Eso quiere decir que partirá aproximadamente de los 13.000 euros para la gama gasolina y de los 15.000 para los diésel. Mucho coche por ese precio, aunque claro estos presupuestos incluyen oferta de lanzamiento, plan PIVE y descuentos por financiación.