Prueba Honda HR-V 2015: Conducción y conclusiones
Nueve años ha tardado Honda en devolver a la vida el HR-V. Las tendencias de mercado, junto con la nueva estrategia comercial han hecho que la marca japonesa se haya lanzado de cabeza al segmento C SUV donde el Honda HR-V 2015 deberá batirse con otros rivales como el todopoderoso Nissan Qashqai.
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Publicado: 24/07/2015 17:00
Si hace nueve años que no sabíamos nada del HR-V, hace 16 que lo vimos por primera vez. Corría el año 1999 cuando Honda lo lanzó por primera vez, y a lo largo de sus siete años de vida no lo vimos cambiar un ápice. Este modelo poco o nada recuerda a él. Muchos han sido los cambios, y cómo ya te he comentado en las anteriores partes de la presentación del Honda HR-V 2015, este no se parece en nada. De hecho los propios responsables de la marca reconocen que hay dos cosas que no han cambiado en el coche. Una es el nombre y otra es espíritu.
En esta ocasión os voy a hablar de la dinámica y la conducción de las dos únicas versiones que Honda va a comercializar en nuestro país, las mismas de las que ya te hablé en la primera parte de la presentación, el gasolina 1.5 i-VTEC y el diésel 1.6 i-DTEC. Vayamos primero con la versión más extravagante de todas.
Prueba Honda HR-V 2015 1.5 i-VTEC
Es a priori la variante menos atractiva para el mercado español, sin embargo Honda considera que un 20% de los clientes se decantarán por ella. Su motor de cuatro cilindros y 1.500 cc desprende una potencia de salida de 130 CV con un par máximo de 155 Nm. Toda esa potencia se dirige hacia las ruedas delanteras, puesto que como recordaréis el HR-V 2015 no cuenta con versiones europeas de tracción total, estas solo pisarán territorio americano y asiático.
Asociado al motor podemos encontrar una caja de cambios manual de seis velocidades o una transmisión automática CVT de siete velocidades (solo el diésel dispondrá de ella). En mi caso he tenido la ocasión de probar esta rara asociación: motor de gasolina y cambio CVT. Como digo no es la reunión más habitual que nos vamos a encontrar en el Honda HR-V pero aun así será una opción a considerar.
Si eres de los que recorres pocos kilómetros al año, y buscas un coche del aspecto SUV puede que esta sea una elección que debas mirar. Su motor gasolina, sin turbos, muestra un comportamiento muy progresivo, muy tranquilo, y en ciertos momentos con cierta falta de empuje. Son apenas 155 Nm que sumados al peso del coche (entre 1.300 y 1.400 kilogramos) provocan unas reacciones lentas. Sin embargo su comportamiento puede llegar a sorprender por la suavidad de rodadura y la rumorosidad que desprende. Puede ser tu aliado en esos no excesivos kilómetros que piensas recorrer.
Otro detalle que te sorprenderá es el del consumo. Tenemos la fea costumbre de pensar que los gasolina, por el simple hecho de ser gasolina consumen más, y sí, es cierto, pero ya no estamos en esa era en la que un coche de gasolina podía acabar con tu bolsillo. Durante la prueba, sin que el ahorro fuera el principal objetivo de la misma, el ordenador de a bordo desprendía un dato de 6,3-6,4 litros cada 100 kilómetros, y esa es una buena cifra. Tan buena que puede hacerte pensar a la hora de tomar una decisión, ya que el gasolina es más de 1.000 euros más barato que el diésel, y tal cómo están los precios de los carburantes son muchos litros de gasolina.
Aunque el motor es realmente bueno, una sabia elección, el cambio no está a la altura del mismo. Honda ha jugado mucho con la electrónica asociada al cambio, incluyendo soluciones y sistemas que mejoran el rendimiento y la dinámica de conducción, sin embargo no llega a ser una opción que yo recomiende, aunque si te gustan los automáticos, no buscas un gran rendimiento y no tienes mucho dinero para gastar, puede que sí sea tu opción. Una pena que no hayan echado mano a esa transmisión ZF de nueve velocidades del Honda CR-V, de ser así seguramente estaría diciendo todo lo contrario.
Prueba Honda HR-V 2015 1.6 i-DTEC
En primer lugar he tenido ocasión de probar el gasolina con el CVT, y posteriormente he cambiado al diésel. Tengo que decir que el comportamiento es como la noche y el día, no solo estoy hablando de motor, que ahora os daré más detalles, es todo, de verdad parece otro coche. El tarado de las suspensiones no es igual, la dirección no es la misma, y por supuesto el rendimiento no es el mismo. En esta ocasión el cambio es manual con seis velocidades.
La verdad es que es un motor que ya habíamos tenido la ocasión de probar. Lo hicimos en el Honda Civic y como en aquella ocasión, debo decir que su comportamiento es realmente bueno. Honda ha sabido integrarlo en el HR-V sin ningún problema. Sus cuatro cilindros turbo y sus 1.600 centímetros cúbicos de cilindrada rinden 120 CV y 270 Nm de par motor. Unas cifras muy en consonancia con la media del sector y que realmente son las apropiadas para movernos sin problemas.
De verdad que su comportamiento es extraordinario. No tiene ningún problema para empujar el coche, lo hace con solvencia y determinación, y encima lo hace de una manera eficiente, porque en este caso es capaz de presentar cifras de consumo un litro inferiores a las de su hermano de gasolina. No te será difícil moverte en cifras que superen ligeramente los cinco litros. Si a esto le sumamos un depósito de gasolina de 60 litros, estamos hablando de más de 1.000 kilómetros de autonomía.
Como ya os he dicho antes, en el caso del diésel el cambio es un manual de seis velocidades. Honda ha decidido que el diésel no tendrá opción automática por el momento. Solo si el mercado lo demanda se traerá la combinación, y en esta ocasión sí que se haría con el cambio ZF de nueve velocidades, así que igual habría que ir pidiéndoselo ya a la marca japonesa. Mientras esto llega tendremos que conformarnos con la versión manual, y oye ningún problema. El cambio sabe aprovechar tanto la potencia como el par mediante recorridos de la palanca cortos, suaves y precisos. Nada que reprochar en este aspecto.
Honda afirma que ha pensado en una conducción dinámica a la hora de diseñar el HR-V. Todo depende de lo que consideremos por dinámica, pero la verdad es que me ha sorprendido el comportamiento de este. Al igual que el gasolina es cómodo, suave, y devorador de kilómetros. Si a todo esto le sumamos la confianza que dan los productos de Honda, estamos ante la versión con mayor potencial de ventas dentro de la gama y un modelo que pondrá las cosas difíciles al resto de marcas. Un rival más.
Conclusión
Puede parecer que Honda se haya visto apremiada a la hora de sacar a la venta el HR-V. Es lo que demanda el mercado en la actualidad y el hecho de repescarlo indica que hay mucho beneficio en este segmento. Sin embargo no hay que confundir esto con un producto de dudosa calidad. El Honda HR-V 2015 destaca por diferentes razones: diseño, calidad, espacio y comportamiento. Una buena elección para aquellos que busquen un coche de estas características. Mi recomendación es que elijas la combinación ganadora, diésel y cambio manual, no te defraudará.