Prueba Jeep Compass 2017
La segunda generación del Jeep Compass quiere marcar su propio estilo dentro del segmento de los SUV compactos. Una imagen inconfundible, un elevado confort de marcha y las aptitudes camperas más sobresalientes de la categoría, que se maximizan en su versión Trailhawk, son sus principales rasgos. Lo hemos probado en su presentación.
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Publicado: 20/06/2017 12:00
Hay que reconocer que el anterior Jeep Compass se había quedado muy desfasado en comparación con el resto de la gama del fabricante norteamericano en cuestiones de diseño, calidad y habitabilidad. Una marca especialista en modelos SUV y todoterrenos no podía permitirse el lujo de tener un producto poco atractivo en el segmento de los crossovers compactos que actualmente concentra 1,6 millones de unidades vendidas en Europa.
Por ello, para esta nueva generación del Compass la marca ha puesto toda la carne en el asador. El salto en calidad, diseño, seguridad, confort y tecnología es evidente lo mires por donde lo mires. Este nuevo modelo se sitúa entra en el Renegade, con el que comparte plataforma, y el Cherokee metiéndose de lleno en la categoría C-SUV con sus 4.394 mm de longitud.
Tradición y personalidad se dan la mano para definir su diseño
Jeep no se ha andado con medias tintas y para el diseño exterior se ha inspirado directamente en su buque insignia, el Grand Cherokee. El resultado me parece muy satisfactorio ya que se ha conseguido mantener el aire de familia del resto de modelos en este C-SUV al tiempo que se le ha dotado de su propia personalidad. La imagen es robusta y discreta, con formas modernas, bien proporcionadas y sin estridencias.
Un buen ejemplo de este ADN común con el resto de componentes de la familia Jeep es la tradicional parrilla con siete ranuras. El Compass manifiesta su estilo propio con marcos cromados sobre un fondo negro brillante en cada ranura. Los faros también están perfilados en negro dotando al modelo americano de una mirada inconfundible.
En el lateral, si hay algo representativo de Jeep son los poderosos pasos de rueda trapezoidales que suponen una parte importante de la imagen robusta y contundente de este crossover. Tenemos a nuestra disposición un abanico de llantas de 16 a 19 pulgadas, según el nivel de equipamiento escogido, para completar su estilo.
De manera opcional el techo puede estar pintado en color negro brillante para crear un efecto de techo flotante, contrastando con la tonalidad de la carrocería para la que están disponibles hasta 12 colores diferentes. También se puede disfrutar de un gran techo solar panorámico practicable que aporta mucha luminosidad al interior.
El rasgo más personal es la moldura cromada que recorre la parte alta de las ventanillas laterales y que se une de manera ininterrumpida con la parte trasera del vehículo, recorriendo el pilar C, los pilotos traseros de LED y la luneta. Este elemento envuelve totalmente al Compass, siendo una característica de diseño única que lo distingue de cualquier otro modelo de Jeep.
Mucho espacio para los ocupantes, poco para el equipaje
Al abrir la puerta nos recibe un interior bien rematado realizado con materiales agradables al tacto y buenos ajustes. El volante multifunción tiene un tamaño y grosor muy acertados, mientras que sus botones son grandes y de manejo intuitivo. Delante tenemos un cuadro de instrumentos que muestra la información de manera clara y se acompaña de una pantalla LED con 3,5 ó 7 pulgadas, según el acabado, con todos los datos del ordenador de a bordo. No hay posibilidad de equipar un Head Up Display pero tampoco se echa en falta.
El salpicadero está presidido por la pantalla del sistema multimedia encastrada en una moldura trapezoidal, como manda la tradición en Jeep. Existen tres posibles sistemas de infoentretenimiento que se denominan Uconnect 5.0, Uconnect 7.0 y Uconnect 8.4 NAV (como habrás adivinado el número hace referencia al tamaño de la pantalla). Todos ellos cuentan con Uconnect LIVE que da servicios de noticias, radio online, proporciona recordatorios de mantenimiento o permite la conexión a Facebook, entre otras cosas. Además Uconnect 7.0 y Uconnect 8.4 NAV tienen funciones Apple CarPlay y Android Auto.
El sistema más completo, Uconnect 8.4 NAV, integra un sistema de navegación y la aplicación Jeep Skills. Ésta muestra multitud de datos del coche e indicadores específicos para la conducción todoterreno. Potencia y par en tiempo real, fuerzas G generadas, el ángulo de dirección, la aceleración 0-50 km/h y 0-100 km/h, la distancia de frenado, la inclinación, la altitud, el nivel de la batería, la presión de aceite, la temperatura, todo está monitorizado en esta aplicación.
El espacio y el confort están garantizados tanto delante como detrás. En la segunda fila de asientos hay un buen espacio para las piernas y la cabeza, incluso para pasajeros de estatura elevada, y hasta la anchura es notable porque caben tres adultos con un confort adecuado para viajes largos. Lástima que no se pueda ajustar la inclinación del respaldo ni exista la posibilidad de desplazar longitudinalmente la banqueta.
A mi juicio, el maletero es el punto débil porque sólo ofrece 368 litros de capacidad. Si se prescinde de la rueda de repuesto el espacio crece hasta los 438 litros, un volumen que sigue estando por debajo de la media en este segmento. Con esta última configuración obtenemos un doble fondo que se puede colocar a dos alturas, útil para distribuir la carga. Abatiendo los asientos posteriores se alcanzan los 1.251 litros.
También resulta extraño el procedimiento de extracción de la bandeja posterior, porque las formas irregulares del maletero obligan a abatir los asientos primero. Es verdad que no es algo que se haga todos los días, pero sorprende que algo a priori tan sencillo necesite una operación tan compleja. Al menos, eso sí, las versiones superiores disfrutarán de un práctico portón de accionamiento eléctrico.
Prueba Jeep Compass Limited 2.0 MultiJet II 170 CV 4x4 Automático
Ya te hemos contado previamente la gama y precio del Jeep Compass 2017, pero a modo de resumen te recuerdo que la oferta mecánica diésel incluye el 1.6 MultiJet II de 120 CV y el 2.0 MultiJet II de 140 y 170 CV mientras que en gasolina se ofrece el 1.4 Turbo MultiAir2 con 140 y 170 CV. La tracción puede ser delantera o total y dependiendo del motor escogido es posible disfrutar de un cambio manual de seis marchas o una caja automática de convertidor de par con nueve velocidades.
Durante el evento de presentación de este modelo por los alrededores de Lisboa tuve la oportunidad de realizar recorridos por carretera y una ruta offroad con la lujosa versión Limited animada por el motor diésel de 170 CV, la tracción total y el cambio automático. En todo momento el Compass me pareció un coche muy confortable con un ajuste de suspensión que, ante todo, busca filtrar las irregularidades y los baches.
La postura de conducción es elevada, como cabe esperar, y la sonoridad se mantiene dentro de límites lógicos. No me ha terminado de convencer el cambio automático de nueve velocidades porque no resulta especialmente rápido, a veces le falta algo de suavidad y me da la sensación de que debilita las prestaciones del motor. Además, esta transmisión cuesta 2.500 euros más que la caja manual así que yo tendría mi elección muy clara.
Cuando abordamos carreteras reviradas el Compass prefiere ritmos tranquilos ya que la agilidad no está entre sus virtudes aunque sin duda brinda una buena estabilidad y sensación de seguridad. Las prestaciones no brillan, quizá debido a que la versión más ligera ya se va a los 1.509 kg, un peso notable. La dirección transmite muy poca información de lo que ocurre bajo las ruedas y la suspensión permite un balanceo de la carrocería evidente pero no exagerado.
Estas características evidencian sus ventajas cuando se deja atrás el asfalto. El poco feedback del volante evita vibraciones y golpes a pesar de circular por caminos de tierra rotos, con piedras, baches y zanjas. La suspensión se traga todos los obstáculos sin rechistar, tratando con mimo a los ocupantes del coche.
Si algo sabe hacer bien la marca americana es una buena tracción total, y en la del Compass el sistema Jeep Active Drive que ofrece una tracción 4x4 activa es sencillamente fantástica. El mando Selec-Terrain permite elegir el funcionamiento de la misma según el terreno por el que circulemos entre cuatro modos (Auto, Snow, Sand y Mud). El sistema puede enviar el 100% de par disponible a cualquier rueda cuando es necesario. Aquí es donde el coche está en su salsa.
Prueba Jeep Compass Trailhawk 2.0 MultiJet II 170 CV 4x4 Automático
Hablando de conducción offroad, hay que poner la mirada en las variantes Trailhawk del SUV de Jeep. Si el acabado Limited supone el tope de gama en términos de sofisticación y equipamiento, la versión Trailhawk propone la mejor capacidad 4x4 para los más aventureros.
Con respecto al resto de acabados, el Compass Trailhawk eleva la altura libre al suelo casi 2,5 cm adicionales, incluye placas protectoras de metal en los bajos (con 3 mm de espesor), equipan neumáticos todoterreno y montan paragolpes delantero y trasero específicos que mejoran aumentan el ángulo de ataque y salida.
Para comprobar sus aptitudes todoterreno la organización del evento planificó una fantástica ruta por el Parque Natural de Sintra-Cascáis, mucho más exigente que la que realizamos con el Compass Limited. A pesar de todo fue un juego de niños para el Trailhawk, que superó los obstáculos con mucha sencillez. Sin ninguna duda, el Jeep Compass Trailhawk es el mejor SUV compacto en conducción offroad.
Además de las características específicas que he comentado antes, el Trailhawk disfruta de un sistema de tracción exclusivo denominado Jeep Active Drive Low. Es más completo que el de las versiones 4x4 estándar pues añade un modo de conducción adicional (Rock), reductora y el sistema Selec-Speed Control con control de descensos (Hill-descent Control).
Por carretera no he notado diferencias dinámicas entre el Trailhawk y el resto de variantes. Mantiene también el amplio equipamiento de seguridad que incluye sistemas como el aviso de colisión frontal, el aviso de salida de carril, el detector de ángulo muerto o el control de crucero adaptativo. Está claro que la vertiente aventurera no está reñida con la seguridad y el confort.
Conclusión
El nuevo Jeep Compass llegará a principios de julio a los concesionarios españoles con un precio que parte de los 25.500 euros, sin tener en cuenta los posibles descuentos y promociones que puedan acompañar su lanzamiento. La gran evolución con respecto a la generación anterior es evidente en todos los planos y no será extraño que una vez asentado en el mercado se posicione como el modelo de más volumen de Jeep, título del que actualmente presume el Renegade.
Argumentos para convencer no le van a faltar. El Compass 2017 garantiza un diseño atractivo e inconfundible, un buen confort de marcha, un equipamiento generoso y una habitabilidad destacada a pesar de que el maletero muestra lagunas en su funcionalidad. Pero ante todo su gran rasgo diferenciador es su elevada capacidad offroad, sin rivales en el segmento, para los aficionados a las excursiones camperas que quieran disfrutar de un SUV mucho más allá del asfalto.