Primera toma de contacto con el MG ZS Hybrid+, una apuesta sin rival

MG ha escuchado al mercado. La compañía de origen británico ha llevado un paso más allá todo el concepto de «vehículo asequible» y ha querido medirse con las marcas más conocidas del sector. Esto lo ha hecho sabiendo cuál es la receta clave: buen producto por un bajo precio. Y precisamente esto último no es algo que hayan logrado quitando cosas de sus coches, pues estos están, como mínimo, al mismo nivel que sus rivales costando mucho menos.

Muestra de ello es el golpe sobre la mesa que han dado con el nuevo MG ZS Hybrid+. Este producto estaba inicialmente enfocado en el sector más accesible (con todo lo que ello implica). Ahora ha dado un vuelco a todo lo imaginable y es, posiblemente, uno de los productos más maduros de su gama. Durante su presentación nacional nosotros hemos podido verlo, tocarlo y probarlo brevemente. Con todo ello, hemos podido sacar nuestras propias conclusiones rápidas.

Así es el MG ZS Hybrid+

Este es un producto que ya hemos conocido de otras noticias, como la de su presentación digital. Sin embargo, no ha sido hasta ahora cuando lo hemos podido ver, tocar y probar en primera persona. El coche, en materia estética, salta a la vista por lo bien logrado de su diseño. El nuevo lenguaje que llegó de la mano del MG3 Hybrid+, y que aquí lleva un paso más allá todos sus apéndices principales.

La gran parrilla frontal cuenta con unas lamas horizontales decorativas en su interior. Más arriba de esta se instalan unos faros de grandes dimensiones y que están unidos entre sí por una moldura horizontal. Sobre el propio capó se ubica ahora el emblema de la marca, sello de identidad de este nuevo lenguaje de diseño. La trasera es donde menores cambios han llegado con respecto al actual ZS, aunque también cuenta con su innegable personalidad estética.

El MG ZS Hybrid+ cuenta con las siguientes medidas: 4.430 mm de longitud, 1.818 mm de anchura y 1.635 mm de altura. Su distancia entre ejes es de 2.610 mm. El modelo ha crecido en todas sus cotas con respecto al ZS actual de motor térmico. Su carrocería se puede decorar en siete tonalidades diferentes y cuenta con tres juegos de llantas diferenciadas, las cuales van desde las 16 a las 18 pulgadas de diámetro.

Un interior muy bien rematado

Una vez entramos en el habitáculo del MG ZS Hybrid+, la sensación de calidad es realmente notable. La mayoría de elementos susceptibles al tacto cuentan con un acolchado y una sensación bastante agradable. Este tipo de recubrimiento se ubica sobre el salpicadero, consola central y parte de las puertas (no entera). También los plásticos duros que tiene son de un tacto nada desagradable, por lo que en conjunto se podría decir que todo aprueba con nota.

Sobre el salpicadero se alojan dos pantallas de información y entretenimiento: una instrumentación digital y una multimedia, cada una con 12,3 pulgadas de diagonal. Estas ofrecen una fluidez y una buena visión de sus menús. Además de las clásicas pantallas, también goza de unos botones físicos de acceso directo que siempre son realmente bien recibidos.

En términos de habitabilidad, la segunda fila es bastante generosa, pues personas de hasta 1,85 metros de estatura viajarán cómodamente en esta hilera. Su espacio para las piernas y para la cabeza es bastante extenso.

Finalmente, el maletero del MG ZS Hybrid+ es también notable, pues ofrece 443 litros de volumen mínimo. En caso de precisar un espacio aún mayor, esta capacidad ascenderá hasta los 1.457 litros en caso de abatir la segunda fila de asientos. Además, incluye un compartimento bajo el piso en el que almacenar y transportar objetos más pequeños.

Mecánica híbrida y potente para el nuevo SUV de MG

El MG ZS Hybrid+ equipa la misma mecánica que ya estrenó el MG3 Hybrid+ hace unos meses. Esto lo convierte de pleno derecho en el SUV híbrido del segmento B más potente, algo que mirando su equipamiento y precios (siguiente apartado) lo plantea como un modelo sin rival real en el mercado.

El SUV ofrece una mecánica compuesta por un motor térmico de gasolina con 1.5 litros de cubicaje. Por sí sólo, eroga una potencia de 102 CV y 128 Nm de par máximo. Este está unido a un sistema eléctrico formado por un motor de 136 CV y 250 Nm, así como por una batería de 1,83 kWh de capacidad.

Con todo ello, el MG ZS Hybrid+ ofrece una potencia máxima conjunta de 196 CV y 425 Nm. Al mismo tiempo, su aceleración desde parado hasta lo 100 km/h lo ejecuta en 8,7 segundos, mientras que su consumo medio homologado es de apenas 5 litros a los 100 km y equipa la ansiada etiqueta ECO de la DGT.

Acabados y precios del MG ZS Hybrid+

El MG ZS Hybrid+ se ofrece en tres niveles de acabados: «Standard», «Comfort» y «Luxury». Desde el primero y más accesible («Standard») el modelo se muestra realmente bien equipado, con elementos tan particulares como cámara y sensores de aparcamiento, navegador, pantalla central de 10,25 pulgadas o climatizador automático.

El acabado «Luxury», el más generoso de la gama, incorpora llantas de 18 pulgadas, cámara 360 grados, pantalla central multimedia de 12,3 pulgadas, asiento del conductor con regulación eléctrica, asientos delanteros y volante calefactados, así como unos cristales traseros tintados.

Mirando su precio de partida, el MG ZS Hybrid+ parte en España desde 22.990 euros, sin añadir promociones o descuentos. En caso de añadirlos (financiación y promoción por el acabado), la factura final será de 20.490 euros. Para tomar referencias, el acabado «Comfort» hace lo propio desde 24.990 euros (21.990 euros con descuentos) y el «Luxury» parte desde 26.990 euros (23.990 euros con descuentos).

Toma de contacto dinámica con el MG ZS Hybrid+

Puede que a muchos le suene raro que un coche que presenta tan buenas credenciales, una vez tras el volante, las sensaciones sigan siendo positivas, pues ya sabemos que, como dicen por ahí, «quien ataca al precio termina pecando en otros aspectos». Esto no es ni una sombra de lo que sucede con el MG ZS Hybrid+. Durante nuestra primera -y breve- toma de contacto dinámica con él, podríamos catalogarlo sin riesgo a error de que se trata de un coche con las tres «B» (bueno, bonito y barato).

El puesto de conducción es eminentemente alto, lo que da lugar a una buena visibilidad exterior desde la mayoría de sus flancos. Pero a esto ayuda también que el salpicadero tenga una situación mucho más baja que en otros vehículos de la competencia. Con ello da una aún mayor visibilidad. A esto ayuda también que el volante pueda bajar su altura considerablemente, con lo que, de primeras, este apartado cobra un notable alto.

La sensación de buen hacer continúa acto seguido de arrancar el coche y salir. Su palanca de cambios (de diseño muy personal) tiene un tacto realmente bueno, así como en el propio inicio de la marcha en el coche. Nada de tirones o aceleraciones absurdamente bruscas. Todo es bastante suave y bien terminado.

Otro punto que me ha gustado mucho es que su dirección transmite realmente bien. No cuenta con un tarado excesivamente asistido, sino que tiene cierto peso, algo que me gusta mucho, especialmente en rutas de altas velocidades. Las suspensiones también juegan un papel fundamental en otorgar buena comodidad a los ocupantes, sin llegar al punto de balanceos o posible inestabilidad.

En vías rápidas, bien es cierto que no cuenta con el habitáculo más insonorizado o aislado del mundo. Eso es cierto, pero de primera mano puedo confirmar que es mejor que su competidor más directo en este apartado. El MG muestra una solidez y una puesta a punto mucho mejor que la de sus rivales, haciendo que este sea un coche con el que se pueda viajar sin ningún tipo de incomodidad en ningún apartado.

No obstante, a velocidades bajas o medias, el sistema tenderá a circular alimentándose principalmente mediante el sistema eléctrico, dejando el de combustión apagado y con el consiguiente ahorro de combustible que ello implica. En nuestro recorrido, que tuvo lugar principalmente por autopista, el ZS Hybrid+ nos dejó un consumo medio de apenas 5 litros a los 100 km. Esa es una cifra que se podrá reducir notablemente.