Prueba Opel Astra 1.2 Turbo de 145 CV, potencia y eficiencia conjunta
El Opel Astra es ya un viejo conocido. Vio la luz en el año 2016, y en el año 2020 ha actualizado levemente su exterior y profundamente su eficiencia y tecnología, ofreciendo ahora un catálogo de motores más recortado pero con potencias que van desde los 105 hasta los 145 CV. Hoy nos ponemos tras el volante de la opción de gasolina más potente.
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Publicado: 01/03/2020 19:00
El Opel Astra es uno de los últimos indicios de que existió vida más allá de PSA. Hasta hace no muchos meses, la marca alemana pertenecía al grupo automovilístico General Motors. El gigante americano se deshizo de Opel, acordando su venta y traspaso al grupo francés PSA.
Desde este traslado, hemos sabido de varios modelos que ya se encuentran completamente abrazados a la filosofía del grupo francés, como el nuevo Corsa, un modelo nacido puramente bajo la batuta del país vecino. En cambio, modelos como el que hoy nos ocupa, continúan con la antigua receta.
El nuevo Opel Astra ya pudimos conocerlo durante su presentación internacional por tierras alemanas. En aquel momento nos pareció un modelo bastante redondo, muy positivo en algunos aspectos y correcto en la gran mayoría. Hoy, durante la presentación nacional del compacto alemán, vamos a conducir y a conocer más en profundidad su motorización más potente de gasolina: el 1.2 litros tricilíndrico de 145 CV.
Una estética continuista a cambio de una mayor ingeniería interna
En el apartado estético no me pararé mucho, pues ya han sido varias las veces que os hemos contado que la marca no ha puesto especial interés en modificar profundamente el nuevo modelo, con respecto al pre-restyling, claramente, siguiendo la filosofía del “si algo funciona, por qué cambiarlo”.
Exteriormente, en su frontal, podemos ver como la parrilla anterior ha evolucionado hasta tomar el diseño actual, muy continuista, pero con unas nuevas formas que le dan un aire renovado al modelo. Bajando la mirada nos toparemos con el lugar que más horas de papel y lápiz ha recibido, el parachoques frontal es completamente nuevo.
En la trasera, se ha tocado aún menos, pues no encontramos nada que no estuviese antes. Lo dicho anteriormente, una actualización muy liviana. ¿Os parecen pocos cambios verdad?. Los auténticos cambios no se ven, y es que en el nuevo Opel Astra se ha trabajado mucho en las zonas "invisibles".
Una nueva parrilla activa que se abre o cierra automáticamente dependiendo del nivel de refrigeración que necesite su mecánica. Los bajos del coche han sido completamente carenados para una mejor fluidez del aire, ofreciendo menor resistencia al paso del viento, con lo que mejora la eficiencia y consumos del coche. Con decir que se ha trabajado tanto en la aerodinámica de este coche que el único modelo de la marca que iguala el coeficiente obtenido es el mítico Opel Calibra, ahí es nada.
Aunque la estética no sea algo diferenciador en este lavado de cara, sí que lo es su apuesta por la eficiencia y la tecnología
Tecnológicamente encontramos muchas evidencias de renovación, empezando por la nueva cámara frontal, la cual ya no solo detecta las señales y a otros vehículos, ahora también incluye la detección de peatones, pudiendo realizar una frenada de emergencia en caso necesario. También se han añadido nuevas funciones como nuevo control de crucero adaptativo Stop & Go, asistente para el mantenimiento del carril y el asistente de aparcamiento.
Merecen una mención aparte los faros Intellilux LED, los cuales, a través de la cámara delantera, adaptará la posición de las luces y su intensidad, para así evitar los deslumbramientos a otros conductores. Como referencia, cada faro tiene un consumo energético de tan solo 13 W, cuando unos alógenos al uso precisan de alrededor de 70 W. Como vemos, la eficiencia se ha cuidado hasta al más mínimo detalle en el nuevo Opel Astra. En esta tecnología lumínica, Opel fue pionera hace 4 años en insertarla en un vehículo perteneciente al segmento C en una marca de corte generalista. Ahora han vuelto a hacer lo mismo con el renovado Corsa.
La tecnología interior también ha sido actualizada, obteniendo la ansiada compatibilidad con Android Auto y Apple CarPlay, y una pantalla táctil más generosa, de 8 pulgadas, que funciona correctamente bien, y posee una fluidez bastante buena. El sistema más completo que podremos encontrar en el nuevo Astra, es el denominado Multimedia Navi Pro.
Esta pantalla multimedia está perfectamente integrada en el salpicadero, nada de extrañas pantallas flotantes ni nada parecido. Sus 8 pulgadas son más que suficientes para dar un buen servicio de conectividad a sus pasajeros. El navegador posee la capacidad de visualización en tres dimensiones, lo que le da un toque muy particular, aunque sí es cierto que teniendo la posibilidad de conexión total con nuestro smartphone, los navegadores propios están en claro desuso.
Base de carga inalámbrica, parabrisas y volante calefactado, equipo de sonido Bose con 7 altavoces o el sistema con función masaje, calefacción y refrigeración para los asientos delanteros. Como vemos las dotaciones tecnológicas del Astra son muy completas.
Nuevas motorizaciones
En cuanto a las diferentes mecánicas en el Opel Astra, vemos nuevamente como la eficiencia y los consumos ridículos priman sobre todo. En el apartado de gasolina nos ofrecen dos motores, un 1.2 Turbo tricilíndrico, con potencias de 110, 130 y 145 CV. La segunda opción la tenemos en un 1.4 Turbo con 4 cilindros y 145 CV. Suena raro que existan dos motores distintos para una misma potencia (145 CV), la diferencia está en la caja de cambios. Mientras que en el 1.2T, todos los niveles de potencia equipan una caja manual, si queremos montar una automática, tendremos que acudir obligatoriamente al 1.4T, donde lo casaremos con una caja de variador contínuo (CVT), novedad absoluta en el Astra.
En el apartado diésel, encontramos una única motorización, un 1.5D, también tricilíndrico, disponible con 105 y 122 CV asociados a una caja de cambios manual de 6 relaciones. El más potente puede equipar en opción la caja de cambios automática de 9 velocidades con convertidor de par (AT9).
Para el año 2024 Opel promete poner en el mercado una variante eléctrica de cada uno de sus modelos, ya sea 100% eléctrica o híbrida enchufable. Ahí tenemos el ejemplo del Corsa-e, del que ya conocimos de primera mano su proceso de fabricación. En esta generación del Astra no veremos dicha versión ecológica, pues este modelo seguirá siendo General Motors hasta el reemplazo generacional, donde si evolucionará en todos los sentidos para acoger de lleno la filosofía PSA, así como una versión 100% eléctrica. Durante el año 2022 podremos ver esta nueva generación, dando el pistoletazo a las ventas en el 2023.
Volviendo a las motorizaciones actuales, estas ofrecen una eficiencia abrumadora. La media de emisiones se sitúa entre los 99g/km para los gasolina, y los 90g/km para los diésel. Además, su consumo medio será para los gasolina de apenas 4,3 litros/100 km, y de 3,4 litros/100 km para los diésel. Cifras que hacen clara alusión al empeño de la marca por respetar las nuevas normas Euro 6.
Prueba dinámica
Como he mencionado más arriba, el Opel Astra, no hace mucho caso a las reglas actuales y pone en el mercado un vehículo que a pesar de un lavado de cara muy sutil, sus cambios reales se centran en poner a punto al coche mecánica y tecnológicamente. Esto es algo que se siente y percibe nada más te sientas en el puesto de conducción. Lugar con una posición algo más alta de lo esperado, aunque no es nada incómoda, más bien todo lo contrario.
Sus nuevos asientos más envolventes acomodan a conductor y pasajero a la perfección. Su función masaje y climatización harán que el viaje sea mucho más llevadero de lo que cabría esperar. La regulación del volante en altura y profundidad se adapta a la perfección a cada conductor. La posición en la que se encuentra la palanca de cambios conjuga bien con el reposabrazos, proporcionando una comodidad más que aceptable.
La instrumentación semi digital, posee una pantalla central en la que veremos la velocidad a la que circulamos, navegación y otros datos de interés para el conductor. Esta pantalla está flanqueada por dos diales en los que se muestran las revoluciones del motor (izquierda) y otra en la que vemos el nivel de gasolina y la temperatura del aceite.
Su dinámica es relajada pero posee la potencia más que suficiente para salvar cualquier situación que se nos presente
Nuestra elección de hoy va hacia la motorización 1.2 turbo de 145 CV unida al cambio manual de 6 relaciones, la más potente del catálogo. Emprendemos la marcha y lo primero que salta a la vista es la suavidad del cambio y de sus pedales. Ambos poseen el tacto justo para que podamos sentir qué pasa más allá de ellos, no están sobre asistidos ni parece que estés manejando los mandos en una PlayStation.
La suavidad del cambio y de los pedales se traslada a la dirección, también con un tacto justo y correcto sin entrar en asistencias exageradas ni nada parecido. Trasmite muy bien lo que pasa por debajo de nuestras posaderas, generando una confianza que se traslada directamente a una conducción mucho más precisa, aunque sin entrar en deportividades, este coche no está diseñado para eso, pero sí es cierto que si eres de los que le gustan apurar el límite de velocidad de la vía, con este coche irás seguro y confiado.
La suspensión es muy correcta, se traga todas las imperfecciones del asfalto para dotar a sus ocupantes de una conducción más relajada, aunque se mantiene en un correcto equilibrio de estabilidad y comodidad. Esta juega mano a mano con la dirección de la que os he hablado anteriormente.
Pasando ahora a hablar del motor 1.2 turbo que equipa nuestra unidad, este da unos resultados más que correctos en todos los aspectos. En lo referente a la potencia, podemos decir que sus 145 CV son más que suficientes para movernos con soltura sobre todo tipo de vías, incluso me atrevería a decir, a falta de haberle echado el guante, que con la potencia de 130 CV ya lograríamos este objetivo. El 110 quizás sí que eches en falta en algún momento algo más de potencia, para adelantamientos o incorporaciones a vías rápidas.
Volviendo al 145 que es el que hoy nos ocupa, tiene un tirón notable para todas las situaciones que se nos presenten, además posee un rango bastante amplio de revoluciones en los que obtener respuesta, desde las 1.500 rpm el motor comienza su empuje con cualquiera de las marchas insertadas. Además de todo esto, su sensación es muy refinada, juega bien el mano a mano con la caja de cambios, dirección y amortiguación, ofreciendo un manejo más que correcto en todos los sentidos.
Su rumorosidad es muy contenida, el sonido del mismo solo se deja oír levemente cuando cruzamos el umbral de las 3.500 revoluciones, y más fuertemente 1.000 revoluciones por encima. En ocasiones muy contadas tendremos la necesidad de llegar a tales cifras revolutivas, por lo que en el ámbito general, el sonido emitido es prácticamente imperceptible. Quizás lo más sonoro sea la propia rodadura, pues ni siquiera el sonido del viento es tan perceptible, demuestra aquí el buen hacer de la eficiencia aerodinámica en este renovado modelo.
En cuanto a consumos no puedo dar una cifra real, pues la ruta que nos ofreció la propia organización de Opel recorría algo menos de 70 kilómetros, la gran mayoría del tiempo a través de carreteras secundarias poco transitadas, aún así, el consumo que pudimos sacarle a nuestra unidad fue de 6,1 litros, una cifra más que correcta sabiendo que no cuidamos la eficiencia precisamente. Desde la marca dan una cifra de consumo medio de aproximadamente 4,3 litros. Para alcanzar ese nivel quizás tengas que trabajártelo, pero lo que no será muy complicado es mantenerlo en la raya de los 5 litros o incluso bajarlo de ahí.
Por último y antes de concluir con este apartado dinámico, debo puntualizar que en esta prueba tuve la oportunidad de ir sentado en los asientos traseros durante un buen trayecto, y lo cierto es que me convenció bastante la habitabilidad de esta zona, incluso siendo una persona de una estatura alta no tendrás problemas en viajar aceptablemente en el Astra, sin problemas de espacio para la cabeza o piernas, incluyendo un plus de comodidad con el reposabrazos central. 4 pasajeros viajarán bien en este coche, 5 ya irán apretados pues al que le toque el asiento trasero central, no tendrá la misma comodidad que los otros dos.
Conclusión
El Opel Astra, al igual que sucedió en nuestra primera toma de contacto durante su presentación internacional en Alemania, me ha convencido notablemente. Es un coche que guarda la corrección en todos los aspectos, sin llegar a despuntar en algo concreto. Es correcto en comodidad, habitabilidad, circulación, consumos y precios. Si buscas el desplazamiento confortable y eficiente, el Opel Astra debe de estar en los puestos más altos de tu cuaderno de posibilidades.
En cuanto a precios, el Opel Astra 2020 pone su punto de inicio en España a partir de los 21.800€ del motor 1.2T con caja manual de 6 velocidades y 110 CV. Este precio sin ningún tipo de descuento añadido puede llegar a 16.500 euros por la simple entrega de un vehículo a cambio. Un precio más que correcto para un coche de estas características. En cambio, sin quieres optar por la motorización de la que hoy os hemos hablado, el precio ascenderá hasta los 28.600 euros, los cuales pueden quedarse en 23.265 euros si hacemos entrega de un coche.