Probamos el Opel Astra Sports Tourer, un familiar compacto

El Astra es una institución en si misma. Un compacto de éxito que estrena generación en su formato más familiar. Ponemos a prueba el nuevo Opel Astra Sports Tourer y descubrimos qué novedades y mejoras trae con respecto al modelo anterior.

Probamos el Opel Astra Sports Tourer, un familiar compacto

16 min. lectura

Publicado: 07/07/2022 11:00

Hablar del Astra es hablar de una marca dentro de la órbita de Opel. El fabricante alemán, ahora dentro de la esfera del Grupo Stellantis, ha vendido más de 10 millones de unidades de su compacto desde que lo lanzara originalmente en el año 1991. Mucho ha pasado desde entonces, y a día de hoy nos encontramos ante la última de sus generaciones, la sexta edición que añade ahora su formato más familiar, el Opel Astra Sports Tourer que ya he podido probar durante la presentación internacional.

El Opel Astra integra a su versión más familiar y espaciosa, el Sports Tourer

Yéndome hasta los mismísimos orígenes de Astra, a la sede de Rüsselsheim am Main, en Alemania, he podido conocer la segunda y la última de las carrocerías que el compacto va a ofrecer a los conductores europeos. Con el apellido Sports Tourer, Opel se adentra en el segmento más familiar de la categoría de los compactos, la que sigue siendo una de las más importantes por volumen de ventas en el viejo continente.

Hay que reconocer que los diseñadores han logrado que los formatos extendidos ganen mucha más presencia que en el pasado. Ya no son esos coches alargados con forma de caja, aburridos y anodinos. En el presente contamos con los compactos y berlinas familiares más elegantes de los que ha habido, algo a lo que el Astra Sports Tourer no se escapa. El equilibrio en su vista lateral está muy logrado, contando con unas proporciones muy correctas y con unas líneas muy atractivas.

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El voladizo trasero de un metro permite ampliar el maletero hasta alcanzar los 597 litros

El frontal recibe casi todo el protagonismo. Un morro que no difiere en nada al de su colega más compacto. Recibe la misma filosofía de diseño que hemos visto en otros productos de la casa como el Opel Corsa, el Opel Mokka o el Opel Grandland. En la trasera sí se ha modificadon el parachoques y el portón, integrándose la matrícula en él. Aunque resulta llamativa no me termina de convencer la presencia de molduras lacadas en el exterior de un coche, ni en el Astra familiar ni en ninguno.

Para rematar la vistosidad del conjunto se complementa con pinturas de un solo tono muy llamativas donde destacan el Kult Yellow, el Kobal Blue y el Kardio Red. Otra muestra más que los familiares actuales no son tan aburridos como antes. Además de ello se añaden juegos de llantas entre las 16 y las 18 pulgadas, personalizables a través de varios niveles de acabado que ofrecen aspectos diferentes, desde versiones sobrias de acceso a modelos más deportivos con el acabado GS Line.

Opel AstraOpel Astra Sports Tourer
Largo4,37 metros4,64 metros
Ancho1,86 metros1,86 metros
Alto1,44 metros1,48 metros
Distancia entre ejes2,67 metros2,73 metros

La versión familiar es más grande en longitud, altura y distancia entre ejes

Un familiar de este tipo está enfocado a un propósito principal, ofrecer más espacio para pasajeros y carga. El Astra Sports Tourer estira las medidas al máximo, creciendo 27 centímetros de largo y seis centímetros en distancia entre ejes. Eso va a repercutir en el volumen de carga. El Opel Astra Sports Tourer ofrece un maletero con 597 litros de capacidad, 175 litros más que el compacto. A máxima capacidad el volumen se extiende hasta los 1.634 litros, resultantes al abatir la segunda fila de asientos en una proporción 40:20:40.

Hay que reconocer que en el resto del habitáculo no hay grandes diferencias con respecto al Opel Astra convencional de tres volúmenes y cinco puertas. El aspecto es el mismo, al igual que los materiales empleados. Eso quiere decir que nos encontramos una mezcla muy correcta de superficies blandas y plásticos duros que generan una sensación de calidad correcta para el segmento generalista. Hay modelos mejor acabados, pero también otros peores.

El interior está muy bien presentado, mucha tecnología aunque demasiados plásticos duros

Al igual que en el exterior no me gustan las molduras de plástico lacadas, tampoco me gusta verlas en el interior donde quedan muy bien a la vista, pero no resultan tan prácticas, sobre todo la parte del túnel central que es bastante probable que acabe rallada con el paso del tiempo y del uso. A lo que no puedo poner mucha pega es a la disposición de los elementos, aunque sólo en los acabados más completos, ya que en las versiones de acceso el panel de instrumentos está bordeado por molduras más vastas que no resultan tan agradables.

El hecho de contar con instrumentación digital de serie debe dar una muestra de la mucha tecnología que el Astra Sports Tourer es capaz de incorporar. Destaca la presencia de faros matriciales de LED, sistema multimedia con pantalla táctil de 10 pulgadas, climatizador automático, Head-Up Display, asientos delanteros con función masaje y climatizados, conectividad para dispositivos móviles, cámara de aparcamiento, sensores de proximidad y un destacado equipo de seguridad y asistentes a la conducción de nivel 2.

Al volante del Opel Astra Sports Tourer

Con respecto a la oferta mecánica disponible, la gama del compacto familiar queda resumida a cuatro versiones en el momento de su lanzamiento comercial. Se trata de dos versiones de gasolina un diésel y un híbrido enchufable que se sitúa como el más potente de la familia. La potencia se desvía siempre al eje delantero mediante la gestión de un cambio manual de seis marchas, o a una transmisión automática de serie para el híbrido y opcional para el resto de modelos de la gama.

El bloque de gasolina es el conocido 1.2 Turbo que podemos ver en otros modelos de la casa. Se trata de un bloque de tres cilindros turboalimentado con una cilindrada de 1.199 centímetros cúbicos. Desarrolla dos niveles de potencia: 110 y 130 caballos con 205 y 230 Nm de par motor, respectivamente. En cuanto a consumos, las cifras oficiales destacan gastos de entre los 5,5 y los 5,9 litros a los 100 kilómetros. La DGT los reconoce con la etiqueta C.

La única variante de gasoil, el 1.5 Diésel, es, a priori, una de las opciones más interesantes. Cuenta con un motor de cuatro cilindros turboalimentado con 1.499 centímetros cúbicos de cilindrada. Un bloque muy equilibrado que ofrece 130 caballos de potencia y 300 Nm de par motor. Con la etiqueta C de la DGT el consumo medio homologado entre los 4,5 y los 4,8 litros a los 100 kilómetros, es decir, un litro menos que los motores de gasolina.

Si buscamos electrificar nuestra vida, el Astra Sports Tourer PHEV es la mejor alternativa posible. Con un esquema híbrido enchufable cuyo motor principal es un bloque de gasolina de cuatro cilindros y 1.598 centímetros cúbicos. A él se suma un segundo motor eléctrico delantero y una batería de iones de litio con una capacidad bruta de 12,4 kWh. Las cifras homologadas anuncian una potencia máxima combinada de 180 caballos y 360 Nm de par motor con una autonomía eléctrica de 60 kilómetros y la etiqueta CERO de la DGT.

Los modos de conducción apenas modifican el comportamiento del coche, aunque sí afinan la respuesta de algunos elementos

Bajo toda esa carrocería, tecnología y mecánica se esconde la plataforma EMP2 que el Grupo Stellantis emplea en una amplia variedad de modelos, desde el Peugeot 308 al Peugeot Rifter, pasando por el DS 4, entre otros. Se trata de una estructura modular y adaptable a diversas carrocerías y modelos, diseñada para contar con avanzadas versiones electrificadas, como es el caso que nos ocupa. Al igual que el resto de híbridos enchufables, si queremos sacar el máximo provecho a la unidad será obligatorio contar con un punto de recarga donde poder insuflar vida a la batería una vez esta haya agotado su carga.

Dinámicamente hablando el Opel Astra Sports Tourer se sitúa como un modelo muy equilibrado y neutro en sus respuestas. Gracias a un chasis más rígido que el de la generación anterior y sendas modificaciones en el conjunto de suspensiones y dirección, el Astra familiar tiene un carácter muy natural y agradable. Pensado para entornos fáciles como las autopistas y las carreteras secundarias, cada viaje puede resultar muy placentero gracias a un tacto suave y a un buen aislamiento de la cabina.

El diseño está muy equilibrado, la forma y la función se dan la mano

La gama de motores se suma a ese equilibrio, aunque mi apuesta personal sería por el 1.2 Turbo de 130 caballos o por el 1.5 Diésel de 130 caballos. Las opciones más acertadas por precio, prestaciones y consumos. Si somos grandes rodadores nada mejor que el diésel, aunque con el coste de los carburantes en una escalada sin freno hay que echar muy bien cuentas de qué es lo que compensa más. A pesar de ello, el diésel sigue siendo una excelente apuesta.

En cuanto al híbrido enchufable hay que echar más cuentas si cabe. Además de ofrecerse desde un precio de venta considerablemente más alto, estamos obligados a la instalación del punto de carga si realmente queremos sacar provecho a esa tecnología eléctrica, lo que a su vez incrementa el precio de venta. Con batería hay que reconocer que el empuje es bastante contundente, no habiendo problemas para adelantar o para arrancar desde parado. Bien diferente es cuando la batería llega a su fin, pudiendo recargar la pila en poco menos de dos horas a 7,4 kW.

Las plazas traseras son algo justas, pasajeros de más de 1,85 dan con la cabeza en el techo

En condiciones normales la pila ronda una vida aproximada de 50 kilómetros, aunque hay varios modos de conducción que permiten gestionar el formato de circulación, desde una circulación 100% eléctrica a un modo de autogestión híbrido, el formato más recomendado gracias al buen hacer del programa. El problema es que antes o después la pila va a terminar su carga y en ese momento estaremos circulando con un motor de 1.6 litros de 150 caballos y el sobrepeso de la batería, por no mencionar que el volumen de carga se reduce hasta los 516 litros.

¿Compensa el PHEV? Sí, pero puede que no para todo el mundo. Resulta ideal para conductores que tengan la posibilidad de cargar en casa y que su media de kilómetros diaria no exceda de los 50-60 kilómetros. En ese caso concreto sabemos que durante la semana vamos a ahorrar, pero a la hora de alejarnos de la urbe y circular en modo térmico el gasto de combustible rondará los 7 litros a los 100 kilómetros. También hay que sumar las ventajas que otorga la etiqueta CERO de la DGT.

El Astra Sports Tourer PHEV puede alcanzar hasta 135 km/h en modo eléctrico

Por el momento no se han detallado los precios de venta, aunque sí la gama de acabados: Elegance, GS Line y Ultimate. El híbrido enchufable será el más caro de todos con un sobrecoste de unos 6.000 euros con respecto a los modelos de acceso. Coste que también viene compensado por un mayor equipamiento de serie. La oferta comercial será anunciada en breve, aunque caben esperar cifras de salida próximas a los 26.000 euros para las versiones de acceso con mecánica 1.2 Turbo de 110 caballos y cambio manual. El PHEV arrancará en cantidades próximas a los 34.000 euros.

Conclusiones

El Opel Astra Sports Tourer gana en su nueva generación. Gana en diseño, habitabilidad, comportamiento y tecnología. Se puede decir claramente que es mejor coche de lo que ha sido nunca, y eso no es poco. Está claro que sus rivales no le van a poner nada fáciles las cosas, pero el planteamiento es bueno. Su gran maletero es su mejor aliado, aunque podría mejorar en algunos aspectos como la ampliación de la gama mecánica o la personalización del interior, además del uso excesivo del plástico negro lacado en el interior.

El maletero es enorme, hasta 1.634 litros, con formas rectangulares y aprovechables
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