Prueba Skoda Karoq 2022, mejoras con dos puntos a destacar (Con vídeo)
El Skoda Karoq, el segundo coche más vendido de la marca checa se renueva para seguir siendo una opción a tener en cuenta. Su evolución le ayuda, aunque se deja en el tintero un par de detalles a tener en cuenta.
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Publicado: 09/07/2022 12:00
El Skoda Karoq siempre ha sido una de las apuestas más lógicas del segmento de los C-SUV, llegando a ser el segundo modelo más vendido de la compañía en el año 2020. Para tratar de mantener ese ritmo comercial los checos sacan ahora una actualización. Un restyling de mitad de ciclo comercial que mantiene las buenas características introduce algunas novedades, pero que presenta un par de problemas que no se pueden pasar por alto ¿Quieres saber cuáles son? Pues quédate conmigo porque lo vamos a descubrir.
El Karoq es un coche relativamente joven, nacido en el año 2017 su nombre proviene de la unión de dos palabras Kaa’Raq y Ruq de la lengua tribal Alutiq. Durante estos 5 años en el mercado ha dejado patente su buen hacer, pero estaba claro que necesitaba renovarse para plantar cara a su más joven competencia como el Nissan Qashqai, el Citroën C5 Aircross, el Hyundai Tucson o el KIA Sportage. Todos ellos, como ya he dicho, más modernos que el Skoda.
Exteriormente hay que reconocer que los checos no se han complicado mucho la vida. La mayor parte de las novedades se reciben en el frente donde destacan los nuevos parachoques, la estilizada parrilla y las remodeladas ópticas, que ahora pueden llevar tecnología matricial de LED como opción. A eso hay que sumar nuevos juegos de llantas de hasta 19 pulgadas, nuevas pinturas de guerra y una trasera donde una vez más los cambios se aplican en los faros y en el parachoques, además de eliminar el logo del portón para incluir bien grande el nombre Karoq. Todo ello sin cambiar sus medidas.
Largo | Ancho | Alto | Dist. ejes | Maletero | |
---|---|---|---|---|---|
Skoda Karoq | 4,39 metros | 1,84 metros | 1,6 metros | 2,64 metros | 521 - 1.630 litros |
Siguiendo con la línea de no tocar mucho lo que ya estaba bien, Skoda apenas cambia el formato del interior, aunque hay detalles que se renuevan como el volante o las molduras. Eso tampoco tiene por qué significar nada malo o negativo ya que el Karoq ha mostrado un excelente interior desde sus inicios. Bien acabado, buenos materiales y una agradable sensación de calidad.
A nivel de equipamiento las novedades se centran en incluir sistemas de conectividad más avanzados, una nueva tapicería con materiales veganos y una iluminación ambiental mejorada. Todo ello se suma a una oferta tecnológica muy completa donde destaca la instrumentación digital con pantalla de 10,25 pulgadas (disponible a partir del acabado Ambition), un sistema multimedia con pantalla táctil de entre 6,5, 8 y 10 pulgadas a partir del acabado Style, cámara de aparcamiento, techo solar, acceso y arranque sin llave, climatizador automático y un completo equipo de asistentes a la conducción. No se echa en falta nada grave.
Uno de los aspectos en los que siempre ha destacado el Skoda Karoq es en la habitabilidad de sus plazas traseras. Pensado para las familias encontramos tres asientos individuales en una proporción 40:20:40 con ajuste longitudinal y vertical donde se permite extraer el asiento central para ofrecer cuatro plazas (VarioFlex). El espacio para adultos tampoco supone un problema, porque como puedes ver hay mucha distancia con respecto a los asientos delanteros. Tampoco faltan los detalles de confort como la climatización trasera, o el reposabrazos. El maletero es otro gran aliado familiar. Sus generosas proporciones le permiten ofrecer un espacio mínimo de 521 litros y un máximo de 1.630 litros. Uno de los más grandes de su categoría.
Prueba Skoda Karoq 2022
Como recordarás, al principio de la prueba he comentado que si bien el Karoq tiene muchas cualidades, hay dos inconvenientes a tener en cuenta. El primero de ellos es que no ofrece versiones con etiqueta ECO. Skoda ha optado por mantener la flota mecánica que ya conocíamos, con alguna pequeña excepción. La oferta principal está compuesta por motores de gasolina. Tres variantes con motores 1.0, 1.5 y 2.0 TSI con 110, 150 y 190 caballos. El único diésel es el 2.0 TDI de 150 caballos.
Versión | Potencia | Par motor | Consumo | Tracción | Cambio | Etiqueta |
---|---|---|---|---|---|---|
1.0 TSI | 110 CV | 200 Nm | 5,8 litros | 4x2 | 6 MT | C |
2.0 TDI | 116 CV | 300 Nm | 4,7 litros | 4x2 | 6 MT/ 7 DSG | C |
1.5 TSI | 150 CV | 250 Nm | 6,1 litros | 4x2 | 6 MT/ 7 DSG | C |
2.0 TDI | 150 CV | 340 Nm | 5,1 litros | 4x2/4x4 | 6 MT/ 7 DSG | C |
2.0 TSI | 190 CV | 320 Nm | 7,5 litros | 4x4 | 6 MT/ 7 DSG | C |
Ninguno de ellos ofrece un formato electrificado, ni siquiera una simple microhibridación. Eso quiere decir que todos los Karoq ofrecen la etiqueta C. En un mundo donde cada vez es más complicado moverse, donde cada vez se nos limita más por el distintivo o la mecánica de nuestro coche, disfrutar de la pegatina ECO es una ventaja importante, algo que busca mucha gente, y eso Skoda no lo ofrece.
A ver, tampoco se me malinterprete, porque también reconozco que los motores que hay son muy buenos y encajan perfectamente con el Karoq. Mi apuesta personal sería por el 1.5 TSI o por el 2.0 TDI, ambos con 150 caballos. Potencia más que suficiente para todo lo que te puedas proponer, aunque si buscamos un consumo menor, algo que también es importante teniendo en cuenta los precios actuales de los combustibles, lo mejor es el diésel.
En cuanto a su conducción, hay que reconocer que el Karoq ofrece todo lo que un cliente SUV pueda pedir o necesitar. Es cómodo, muy bien asentado en carretera, los largos viajes son un juego de niños, y encima ofrece ese espacio interior tan versátil y adaptable que enamorará a las familias. Dinámicamente no se le pueden poner muchas pegas, hay versiones de tracción delantera y tracción total con cajas de cambio manuales de seis marchas o automáticas de 7 con un coste adicional de unos 2.000 euros, algo carete.
Y ya que entramos en harina, llega el momento de hablar del segundo punto delicado del renovado Karoq. Si bien Skoda podría haber equilibrado la balanza de la etiqueta con un precio más asequible, ha optado por mantener unos precios que resultan difíciles de defender. Para que te hagas una idea, el precio de salida de un Sportage gasolina con pegatina ECO Mild-Hybrid es de 28.100 euros con ofertas. 26.825 euros en el caso del Nissan Qashqai. Los precios del Skoda Karoq oscilan entre los 28.200 y los 43.900 euros, sin promociones. Que cada uno eche sus propias cuentas.
Conclusiones
El Karoq ya era un buen SUV, familiar, atractivo, equipado y cómodo. Era un producto redondo y lo sigue siendo con las mejoras, pero los tiempos han cambiado. Los conductores de hoy tienen la etiqueta medioambiental como uno de los principales argumentos de compra y el checo no la tiene. Eso no quiere decir que sea malo, porque no lo es, sólo que no podrá batallar en igualdad de condiciones frente a su competencia.