Prueba Smart Forfour Electric Drive: ¿Dónde demonios cargo? (I)
El coche es algo caro sin ayudas y aunque se mueve con soltura y es de los más pequeños del mercado, otros eléctricos ya ofrecen más batería, que no es más necesaria para la ciudad, pero libera mucho estrés. En esta entrega nos centramos más en dónde recargar tu Smart Electric Drive si no tienes enchufe en casa.
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Publicado: 11/12/2017 10:00
Es justo que esta prueba contenga dos entregas por un sencillo motivo: no dispongo de cargador en el domicilio pero sí en la oficina. Es un escenario probable de los tres posibles: tener uno en ambos lugares, tener uno en uno de los lugares o no tener ninguno. Lo más lógico es que quien adquiera un coche eléctrico 100% tenga un punto de carga en casa, y si no, directamente te recomiendo que no te lo compres.
Ser tajante es ser sincero en este caso pero en Madrid (mi ciudad de trabajo y residencia), el tiempo es un bien escaso y es cierto que el Smartcumple con creces la mayoría de recorridos de los ciudadanos, aunque todas las noches el utilitario pide que se le recargue. En algunos casos puede ser una vez cada dos o tres noches; eso ya va dentro de cada caso en particular. El problema es que el estrés de la autonomía existe, y no se va rápido. Quizá en un coche con una batería mayor que supere con tranquilidad los 200 kilómetros reales sería menor, pero en el pequeño Smart, de inicio uno cuenta (teóricamente), con no más de 155 kilómetros.
Por supuesto, la cifra ha de considerarse como una referencia porque en los primeros trayectos sube o baja de forma alarmante. He llegado a tener la batería al 100% con una autonomía teórica por encima de los 200 kilómetros, pero también con 130 kilómetros. No me preocupa porque no es la primera vez que veo baremos en los coches eléctricos. Lo recomendable es saber cuánto podremos recorrer, y para ello hay que habituarse a conducirlo.
Por poner en contexto el vehículo: el Smart Electric Drive de pruebas es un forfour(cuatro pasajeros) aunque se puede adquirir en las tres carrocerías disponibles. El precio de partida sin ayudas es de 23.966 euros, que es elevado. Tiene un motor eléctrico de 60 Kw que le permite acelerar de 0-60 km/h en 5,5 segundos y a 100 km/h en 12,7 segundos.
Pesa 1.200 kilos en vacío y podría recargarse en 6 horas teóricas desde un 20% al 100% en un enchufe doméstico, aunque se reduce un 40% en una base mural. Homologa 155 kilómetros de autonomía y tiene 185 litros de maletero con asientos divisibles en 50-50 que aumentan la capacidad a 960 litros. El coche mide 3,49 metros de largo con una corta batalla de 2,49 metros aunque lo que más sorprende es su diámetro de giro entre bordillos de 9,05 metros, motivado por un voladizo cortísimo delantero.
¿Dónde cargo en la red pública?
Existe una gran cantidad de desinformación respecto a este tema, que no falta de información, sino más bien de interés. Por orden, el usuario es el que más interés tiene y el que mejor informado llega a la compra. Luego, los comerciales que venden sus productos. Por último la administración, los centros comerciales y otros gestores de puntos de carga (que no las propias empresas que suministran los puntos) que podrían ofrecer un gran servicio porque tienen los recursos pero desluce el conjunto la falta de formación.
En el reportaje dije que no tengo un punto de carga en casa, lo que implica, en mi caso, pasar de viernes a lunes buscándome literalmente la vida. Mis recomendaciones si te sientes identificado y por pasos:
1) Busca por internet en páginas especializadas dónde hay puntos de carga cercanos.
Encontré en la página web Electromaps una alta fiablidad de la red de carga que había en mi municipio (Pozuelo de Alarcón). Mi recomendación es ponerse en contacto con atención al ciudadano y solicitar las tarjetas de los puntos de carga que le interesen a cada uno. En algunos casos es posible que se tenga que abonar un dinero y en otros, como fue el mío, me salió gratis (aunque deberían habérmela cobrado).
En Pozuelo existe un punto Mennekes (el estándar que lleva el Smart), gestionado por la empresa Ibil. Una vez tuve la tarjeta, mi sorpresa es que para poder darla de alta y rellenarla de dinero tenía que haberse registrado previamente a mi nombre, pero como me la regalaron no he podido darla de alta y he intentado ponerme en contacto con la empresa para que me arregle el problema y sin mucho éxito. Problemas aparte, creo que una vez arregle mi situación, tendré un punto accesible pero no cómodo... por no hablar de que necesitaré un cable Mennekes-Mennekes.
2) Los centros comerciales, un gran plan
Afortunadamente cada vez hay más centros comerciales con puntos de carga gratuitos para los clientes. He visitado dos: un Carrefour y un Hipercor. En el primero hay un par de puntos de carga tipo Menkkes-Menekkes, lo que implica que tengo que tener un cable adecuado. El Smart equipa un Menekkes y en el otro extremo un enchufe macho convencional de pared.
Igualmente, Electromaps me sugería que para que active la corriente del punto de carga hay que avisar a atención al cliente del centro comercial. Allí el personal no sabe muy bien contestarme cómo activar el punto de carga y todos coinciden en que no funciona. Todos salvo una persona que me dice que sí funciona pero que no sabe cómo. No disponen de tarjetas y como no tengo el cable adecuado, no puedo comprobar si en realidad es gratuito (el punto de carga era accesible levantando la tapa con la mano).
Afortunadamente, Carrefour ha decidido instalar dos enchufes convencionales justo encima de la caja, lo que me permite cargar. Uno de los empleados me admite que un taxista llega algunas mañanas y abandona el coche durante unas horas en el punto gratuito. Tras una hora de carga recupero entre 10 y 20 kilómetros de autonomía y concluyo que cualquier ciudadano de Pozuelo, si va a Carrefour durante ese tiempo, el trayecto le saldría gratuito. Te regalan la visita, pero no cargarás tu coche completamente a menos que no lo abandones en el parking, lo que es completamente ineficiente.
Los centros comerciales te regalan su visita en forma de carga. Cada hora sumamos unos 10-15 kilómetros de autonomía.
En el Hipercor de Pozuelo pasa tres cuartos de lo mismo, aunque ahí hay más marcas implicadas, como BMW, que tiene varias Wallbox Menekkes (solo la manguera que se enchufa directamente en el coche) y también te regalaría la visita pero no sirve para cargar tu coche al 100%.
Si las posibilidades de realizar una carga completa son mínimas, el Smart exige que tengas un enchufe en casa. En mis trayectos he enchufado de forma gratuita tan sólo en tres ocasiones con tiempos acumulados de 3 horas y 50 minutos. En total he aumentado la batería un 25% y actualmente tengo autonomía para 47 kilómetros (teóricos) y un acumulado de 112 kilómetros... y mi próximo enchufe está a 21 kilómetros de distancia.
En la segunda parte, abandonaré la odisea del fín de semana para usar el coche a diario, con carga accesible y seré usuario de las ventajas como aparcar gratuitamente en el centro, condición de los vehículos con etiqueta ‘cero emisiones’.