Prueba Toyota Supra A90 prototipo: la vuelta del mito es inminente
Ya hemos probado la nueva generación de Toyota Supra que llegará a nuestro mercado en 2019. Lo hemos conocido en su última fase de prototipo y lo hemos probado en el Circuito del Jarama y en la sierra madrileña. Descubre con nosotros el nuevo Supra A90.
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Publicado: 19/09/2018 12:00
Hace más de dos años que llevamos observando los prototipos del Toyota Supra siendo probados en todas las partes del mundo, por lo que cuando recibí la invitación para probar y conocer el modelo -en fase final de prototipo- me emocioné bastante. En primer lugar por representar a motor.es en un evento tan exclusivo, donde iba a convertirme en uno de los primeros cuatro españoles en probar el modelo y en segundo por tener una vez más la oportunidad de charlar con el equipo de ingenieros del proyecto. Esto último además te permite, gracias a las conversaciones que se mantienen a lo largo del día, un acercamiento más íntimo y auténtico al enfoque y motivaciones del modelo.
La sombra del Supra es muy larga, la marca lo sabe y la carga de desarrollar el sucesor de unos de los deportivos más famosos de todos los tiempos es grande. Para conocer un poco más este icono te recomiendo repases su historia que comenzó en 1978 con su primera generación.
En este este primer contacto el coche sigue tapado, con un patrón muy peculiar, tal como se vió en su debut en pista en el Festival de la velocidad en Goodwood. El modelo me lo conozco de memoria, pero en vivo y teniendo tiempo para acercarte y tocarlo sin prisas es cuando empiezas a apreciar sus rasgos. Su aspecto resulta muy exótico, con líneas sinuosa y fuertes que delatan su origen japonés.
Tiene un cintura muy marcada, entradas y salidas de aire falsas -tendencia en muchos modelos de calle- y unos pilotos delanteros y traseros realmente afilados. En su parte trasera una doble salida de escape incrustada en un generoso difusor -con una luz de frenado tipo LMP1- remata su estampa deportiva, realzada por un parabrisas muy inclinado y un techo de doble burbuja. Las llantas de 19 pulgadas equipan Michelin Pilot Super Sports en medidas 255/35 en la parte delantera y 275/35 en la parte trasera, como un BMW M4.
Toyota siempre ha tenido un pie en el mundo de la competición desde sus orígenes, aunque en nuestro país en las últimas dos décadas solo ha potenciado su rostro híbrido. Bajo las siglas GR, Gazoo Racing, llegan vientos de cambio donde la deportividad de la marca tomará un mayor protagonismo, comenzando en primer lugar por GT86 y Yaris GRMN, continuando por Supra y por otras sorpresas en los próximos años, sin olvidar las distintas competiciones donde el fabricante tiene presencia, como el WEC o el WRC.
Tras llegar al Circuito del Jarama un breve briefting nos explica los puntos claves del coche y nos confirma que los prototipos que vamos a probar equipan un motor con una potencia superior a 300 CV. Se resisten en darnos el dato exacto, aunque apuesto por 350. El equipo de ingenieros nos ha contado que el desarrollo ha sido influenciado en gran parte por las rutinas de sus futuros propietarios. ¿Qué hará un futuro propietario con su nuevo Supra?
Por ello, el 90% del desarrollo ha tenido lugar en la calle. En carreteras rápidas en el Circuito de Miramás y carreteras de Francia. Largos recorridos atravesando Estados Unidos, pruebas de velocidad máxima en Autobahn, semanas de trabajo en el circuito de Nurburgring y pruebas sobre hielo y nieve en Suecia. Para que no decepcione a los propietarios más traviesos, han reconocido que también han estudiado el comportamiento del coche derrapando, haciendo donuts y drift.
Habitáculo para dos
No sé deciros como de definitivo es el habitáculo del prototipo en el que me he montado ya que estaba todo tapado con una lona, pero si no es idéntico es muy próximo al definitivo que equipará el modelo acabado. Intento fijarme en detalles que la lona deja al descubierto, donde puedo ver algunos botones como los controles del climatizador o la fibra de carbono decorativa que veo en el túnel de transmisión. El maletero es muy accesible desde el asientos del conductor, aunque no hemos visto el separador que delimitará el habitáculo y maletero -que no he podido abrir- aunque parece que como tal no habrá una distinción de estos dos espacios.
La instrumentación del cuadro de mandos es completamente digital
Como es de esperar hay elementos que recuerdan a BMW, como la pantalla multi informativa que corona el salpicadero -parece que finalmente saltará a la producción en serie - así como la calidad de algunos elementos que pude ver, como los botones del túnel central donde se encuentra el botón del modo Sport y la palanca de la caja de cambios automática, transmisión asociada obligatoriamente a este motor. Por el momento no habrá un cambio manual para este motor, en principio se ha descartado.
Los asientos son muy acolchados, no son nada duros pero acogen el cuerpo acompañándonos cuando llega el momento de afrontar curvas, tanto en circuito como en la calle. No está previsto unos asientos opcionales con una apariencia deportiva - su diseño era bastante convencional- pero ello no excluye que Gazoo Racing esté trabajando en una línea de accesorios como llantas, labios para paragolpes, stickers o sistemas de escape.
Opcionalmente ofrece suspensión adaptativa que rebaja la altura en 7 mm
Técnica y sensaciones al volante
Su chasis emplea acero prensado en caliente, con el que reducen peso ganando en rigidez, y tiene algunas partes en aluminio, los trenes rodantes y todo el conjunto de las suspensiones. No he podido confirmar si algunas piezas de su esqueleto emplea fibra de carbono, aunque creo que así es. Su batalla es de, aproximadamente, 2440 mm y su peso en báscula será de unos 1.500 kg. Datos aproximados por el momento, ya que por el momento no quieren confirmar muchos datos.
He podido probarlo por autopista, carreteras nacionales, caminos rurales, y por supuesto también en pista. El Circuito del Jarama ha sido el testigo del evento, tal como lo fue el Toyota GT86 en el momento de su presentación.
El GT nos acompañó durante la ruta en carretera, como vamos dos invitados por coche y a nuestra derecha se sienta un miembro de la organización, nos turnamos con el Supra y el GT86. Este último es más áspero con menos filtraciones de la carretera al habitáculo, y con una gran diferencia de prestaciones a favor del modelo camuflado.
Los números son una cosa pero lo importante son las sensaciones. Esa es su máxima.
El Supra es sorprendentemente cómodo, me esperaba un GT86 superlativo, con su tacto duro y exigente, pero hay que hacer memoria y recordar que en realidad el Supra siempre ha estado encuadrado entre las filosofías Coupé y Gran Turismo. Vehículos de ciertas prestaciones y aspecto deportivo, pero realmente cómodos y utilizables en el día a día como. El nuevo supra A90 es exactamente una reinterpretación de estos conceptos que siempre lo han definido.
La postura de conducción es muy baja, con las piernas muy estiradas, centrado entre el eje delantero y trasero, teniendo pleno control sobre qué está a nuestro alrededor y sobre el comportamiento del coche en movimiento. La caja de cambios automática no es una transmisión de doble embrague, es un convertir de par "deportivo" de 8 relaciones fabricado por ZF que tiene un funcionamiento sensacional.
Durante las tandas en circuito la centralita de la caja gestiona perfectamente las transiciones de marchas. En modo manual, ya sea por las levas o desplazando al carril lateral la palanca -con un diseño y tacto 100% alemán- el coche obedece de manera instantánea las órdenes que le damos. No es tan rápido como un doble embrague, pero le sienta genial. La séptima y octava marcha son de desahogo. A 120 km/h, en la última relación, el motor apenas gira a 1.500 rpm.
Con los datos que tenemos podemos aproxima que realizará el 0 a 100 en menos de 5 segundos. Cuando hundes el pie en el acelerador, el Supra sale disparado hacia delante, con un sonido en el habitáculo apoyado por el sistema de audio heredado de los alemanes y bastante discreto desde el exterior, donde curiosamente si que se aprecia el sonido de su válvula de descarga, algo muy japo, muy Fast & Furious.
Esperaba que estos prototipos tuvieran un sonido de escape más escandaloso, pero eso tiene fácil solución, el mundo del aftermarket. Me dejan caer que queda trabajo por hacer en el sonido que se aprecia dentro del habitáculo.
Los frenos que equipa están firmados por Brembo, pero tampoco tenemos más información. Según el fabricante están preparados para trabajar a altas temperaturas, también en circuito. Durante mi experiencia en pista así ha sido, aunque es cierto que no he corrido durante mucho tiempo.
Teniendo en cuenta su potencia el Supra resulta muy fácil de conducir, y os recuerdo que bajo el capó se encuentra un motor de gasolina de seis cilindros en línea sobrealimentado con un turbocompresor de doble entrada con más de 300 CV, ¿Eso es bueno o malo?
Cuenta con un único modo deportivo que endurece su suspensión adaptativa y su dirección, el diferencial activo también trabaja para que no tengamos problemas de tracción: para buscar la efectividad. El trabajo del diferencial está condicionado por las señales que le manda su centralita que tiene en cuenta parámetros como el agarre del neumático, la potencia que el motor manda al eje trasero, el recorrido del acelerador o si se toca el pedal de freno. Gracias a distribución variable del par motor entre las ruedas traseras, limita el deslizamiento entre la rueda trasera interior y exterior en curva, lo que permite salir de ellas a mayor ritmo.
Es un deportivo muy ágil, con un reparto de pesos perfecto 50/50, con un centro de gravedad más bajo que el GT86 y una rigidez torsional idéntica a la del mítico Lexus LFA. Cambia de trayectoria con suma facilidad, de manera muy estable también a alta velocidad. Transmite confianza y resulta muy divertido.
Conclusiones tras la primera toma de contacto
En algunos países Europeos, a comienzo de Octubre podrá hacerse una pre-reserva 100% online. En España este coche podrá comprarse en cualquier concesionario oficial, aunque para ello habrá que esperar al primer trimestre del año viene. Su precio es otra incógnita, puede que la cifra para esta combinación esté comprendida entre los 50 y 55.000 euros, aunque por el momento son todo elucubraciones.
Por el momento el punto flojo que le veo es su sonido, el sonido de escape. La limitación en esta parte le corresponde a Toyota, ya que ha decidido equipar un silencioso muy discreto que no le de problemas con la legislación.
Cuando me monté en el Supra la primera impresión fue ligeramente decepcionante, ya que todo era muy fácil y cómodo. Un error de expectativas disipada en cuando choqué con la realidad: todavía no conocía el trabajo de Toyota. Es un error dejarse llevar en exceso por los mitos del pasado, ya que con el paso del tiempo a estos se les da un halo e importancia que empiezan a crecer imparablemente y acaban por distanciarse mucho de la realidad.
El nuevo Toyota Supra ésta a la vuelta de la esquina, será un coche exclusivo e impactante visualmente. Es un más que digno sucesor para la historia de los deportivos de Toyota que será una alternativa de la versiones deportivas del Audi TT, 718 Cayman o incluso al Alpine A110.