El nuevo Škoda Kodiaq en 5 claves, el gran SUV familiar de siete plazas

Škoda ha renovado recientemente al Kodiaq con una cuarta generación. El gran SUV de la firma checa se ha puesto al día en todos y cada uno de sus puntos: estética, mecánica e interior, entre otros. Pero la mejor manera de conocer al modelo de forma rápida es a través de sus cinco claves principales.

Este no es un modelo nuevo para nosotros, pues ya lo pudimos poner a prueba hace sólo unas semanas durante su presentación internacional. Bien es cierto que para sacar unas conclusiones más certeras sobre todos sus puntos, lo mejor es tener una toma de contacto más profunda, especialmente para poder hablar con más ahínco sobre temas como el confort de viaje y consumos reales. No obstante, ya hemos podido sacar unas primeras conclusiones al respecto.

1 - Diseño

El Škoda Kodiaq ha cambiado por completo su fisionomía con respecto a la generación pasada. Ahora, en términos generales, cuenta con una imagen mucho más ruda y musculosa. Todos sus apéndices han crecido en este renovado SUV, incluyendo los pasos de rueda, capó, así como los parachoques y elementos decorativos. Con todo ello, su imagen es ahora realmente espectacular.

Entre sus cambios más llamativos se encuentran sus faros delanteros, los cuales ahora son dos en cada lado (cuatro en total), también su parrilla incluye ahora una línea lumínica horizontal que cruza todo el elemento de izquierda a derecha. Mirando su perfil, llama la atención cómo la línea de techo ahora es más recta y horizontal, haciendo así hueco para los ocupantes interiores. El pilar C, por su parte, cuenta con una decoración propia en algunos acabados.

Por último, echando un vistazo a la zaga, esta incluye unos nuevos grupos ópticos en forma de C y que se unen entre sí por una barra de luz LED. El nombre de la marca decora todo el centro, mientras que el del nombre se ubica en la esquina inferior izquierda. Además, todos los bajos del coche están recubiertos por plástico negro, dando así la sensación de ser un coche más aventurero.

2 - Habitabilidad interior

Adentrándonos en el habitáculo del nuevo Škoda Kodiaq descubrimos un entorno con un diseño más minimalista y tecnológico que hasta ahora. Tras el volante se ubica una pantalla que hace las funciones de instrumentación digital de 10 pulgadas, mientras que coronando el conjunto se haya una de 13 pulgadas con conexión vía Apple CarPlay y Android Auto. En la zona inferior se ubican los ya conocidos Smart Dials, los cuales se pueden personalizar para ejecutar diferentes acciones.

Los asientos delanteros son realmente cómodos para todo tipo de situaciones. Además, estos se adaptan a la perfección a cualquier tipo de fisionomía. La segunda fila está protagonizada por un espacio más que generoso en todas sus medidas, tanto para las piernas, la cabeza o la anchura del hueco. Y como guinda, el Kodiaq cuenta con una tercera fila en opción, donde pueden entrar otros dos ocupantes. Esto es exclusivo de los motores térmicos «puros», pues el híbrido enchufable no cuenta con esta variante.

Finalmente, el hueco del maletero es todo lo grande que cabría esperar para un modelo como este. Con las tres filas disponibles para uso, su volumen de carga es de 340 litros, mientras que si sólo van a usarse dos filas, la capacidad será de hasta 910 litros, en el mejor de los casos. Como en la mayoría de vehículos de este tipo, la segunda fila se puede abatir para lograr así los 2.105 litros de volumen máximo.

3 - Opciones mecánicas

El Škoda Kodiaq en su renovación generacional cuenta con cinco opciones diferentes para su mecánica. Como variante más ecofriendly encontramos la híbrida enchufable. Esta versión cuenta con el motor 1.5 TSI de 150 CV al cual se le vincula un sistema eléctrico compuesto por un motor de 116 CV y una batería de 25,7 kWh. El resultado de todo esto es la obtención de la etiqueta Cero de la DGT y una autonomía eléctrica de más de 100 kilómetros.

En el caso de las variantes mecánicas más tradicionales, el Škoda Kodiaq cuenta con bloques diésel y de gasolina. En el primer caso, ofrece con dos versiones, una con tracción delantera y otra con tracción total. En ambos casos está movido por el archiconocido 2.0 TDI de 150 CV y 193 CV, respectivamente.

Por último, también ofrece dos escalones en la sección de la gasolina. El primero y más accesible es un 1.5 TSI que se apoya en un sistema eléctrico Mild-Hybrid. Su tracción es delantera y su potencia es de 150 CV y 250 Nm de par máximo. La segunda opción es el 2.0 TSI con 204 y tracción total. Este último no cuenta con apoyo eléctrico. Todas y cada una de estas opciones mecánicas incluyen un cambio automático DSG.

4 - Precios

El Škoda Kodiaq arranca en España con un precio de partida de 42.960 euros (sin incluir ayudas o promociones) junto al motor 1.5 TSI y el acabado Selection de acceso. Esta versión, recordemos, cuenta con la etiqueta ECO de la DGT gracias al uso del sistema eléctrico Mild-Hybrid.

En el caso de que las etiquetas de la DGT no sean un problema, ambas opciones diésel cuentan con la insignia C de la DGT. Esta motorización parte desde los 46.060 euros para el de 150 CV, y de los 49.160 euros para el de 193 CV y tracción total.

Por último, la alternativa híbrida enchufable cuenta con un precio de partida de 49.560 euros, aquí no se incluyen ayudas o descuentos disponibles. Recordemos que el Plan MOVES III cuenta con la opción de ayuda a la compra de estas mecánicas electrificadas. Este precio viene de la mano del acabado Selection, mientras que si se busca un toque de deportividad, el Sportline tiene un precio inicial de 53.960 euros.

5 - Dinámica confortable

Como buen Škoda, el Kodiaq está pensado plenamente para el confort de sus ocupantes. No es un coche con el que ir a hacer un tramo de curvas a toda velocidad, pues su concepción no es esa. Por contra, este gran SUV será tu mejor amigo en caso de llevar a cabo un largo viaje por autopista. Sus amortiguaciones pueden hacerse más o menos rígidas según el modo de conducción escogido o por el propio gusto de sus usuarios.

Esto garantiza que la comodidad interior será siempre elevada, se viaje en la plaza que sea. El asiento del conductor es bastante confortable para largos recorridos y la propia posición es bastante elevada, pudiendo así otear todo lo que pase alrededor del coche, pues su visión periférica es notable.

En el caso del modelo de gasolina e híbrido enchufable (los cuales pudimos poner a prueba brevemente durante su presentación nacional) nos dejó muy buen sabor de boca en la práctica totalidad de aspectos. A altas velocidades (a 120 km/h por autopistas) apenas se siente ruido más allá del aerodinámico, y sólo en ciertos momentos. Su aislamiento del exterior es realmente bueno.

La dirección, por su parte, cuenta con un tarado, por lo general, bastante suave y en todos los modos de conducción. Apenas se percibe diferencia en este aspecto al cambiar entre uno u otro. No obstante, estos modos sí se dejan notar en la respuesta y la sensibilidad del pedal del acelerador.

Como referencia, tras varios kilómetros recorridos con ambas motorizaciones, el motor de gasolina de 150 CV dio como resultado un consumo de 6,3 litros/100 km, mientras que el híbrido enchufable hizo lo propio con 4 litros. En ninguno de los casos fuimos pendientes de este dato o haciendo una conducción que favoreciese a ello, por lo que estas cifras podrían ser fácilmente mejorables en un día a día corriente.