Prueba Suzuki Vitara 1.6 DDiS 4x4: precio, motores y equipamiento

La carrocería bi-tono le sienta muy bien

Antes de comenzar a contarte mi experiencia con el nuevo Suzuki Vitara debo confesar que éste ha sido uno de los coches que más me ha sorprendido en los últimos meses. El Vitara es, probablemente, el modelo más conocido del fabricante japonés. Se comercializa desde 1988 y su cuarta generación, la cual probamos aquí, fue presentada en el Salón de París de 2014 y se fabrica en la planta de Esztergom (Hungría).

El nuevo Vitara se ha reinventado y el enfoque offroad de sus predecesores se ha ido suavizando hacia un estilo más urbano. El mercado manda. Su predecesor contaba con dos versiones de carrocería: una corta de 3 puertas y otra larga de 5 puertas (Grand Vitara) mientras que el modelo actual se sitúa en una posición intermedia ofreciendo sólo la carrocería de 5 puertas.

Gama y motores

La gama inicial del crossover de Suzuki estaba compuesta por sólo dos opciones mecánicas, una de gasolina (VVT) y otra turbodiésel (DDiS). En ambos casos se tratan de motores de 1,6 litros que desarrollan una potencia de 120 CV y pueden ser de tracción delantera o emplear el eficaz sistema de tracción total ALLGRIP.

Recientemente se ha añadido un motor de nuevo desarrollo que sigue los patrones de downsizing que impera en la industria automovilística. Se trata del tope de gama Vitara S, que recurre a un nuevo motor de gasolina 1.4 BoosterJet con turbo e inyección directa para generar 140 CV. Esta versión está disponible exclusivamente con tracción a las cuatro ruedas.

En cuanto a transmisiones, todas las variantes pueden recurrir a un cambio manual de seis marchas -cinco en el 1.6 VVT- o una nueva transmisión automática de seis velocidades denominada TCSS. Este nombre es el acrónimo de Twin Clutch System by Suzuki y hace referencia a que se trata de una caja de doble embrague.

El motor 1.6 DDiS de inyección directa y 120 CV es la única opción diésel

Diseño y equipamiento

Con 4.175 mm de longitud, 1.775 mm de anchura y 1.610 mm de altura, el nuevo Vitara es más pequeño que el anterior Grand Vitara y se mete de lleno en la lucha con los modelos del segmento B-SUV. En la gama del fabricante japonés se coloca por debajo del Suzuki SX4 S-Cross, cuya carrocería tiene 125 mm más de longitud.

El Vitara ha recibido cinco estrellas en el test de EuroNCAP

El Vitara tiene un diseño exterior moderno y atractivo y además su carrocería puede estar pintada en hasta ocho combinaciones bi-tono y seis con un solo color. Esta unidad, en color Rojo Bright con techo en Negro Cósmico Perlado Metalizado, es una de las opciones más atractivas.

Las formas regulares de la carrocería y la amplia superficie acristalada permiten ofrecer una buena visibilidad en todas las direcciones, algo que se agradece a la hora de realizar maniobras. Hablando de visibilidad también juegan un papel importante los faros LED de las luces de cruce, que se distinguen rápidamente por los proyectores de color azul. El Vitara S cuenta con una parrilla de diseño específico y faros LED con proyector en color rojo.

Las suspensiones elevadas permiten hacer rutas camperas sencillas sin preocupaciones

Al acceder al habitáculo observamos que el principal aspecto mejorable del Vitara son sus acabados. Los materiales empleados transmiten poca calidad porque todo está realizado en un plástico duro, algo basto y apariencia pobre. Al menos en los acabados superiores (GLX y S) esta sensación se mitiga un poco gracias a que las puertas delanteras cuentan con inserciones de ante en los paneles y de cuero sintético en el reposabrazos.

En la parte superior del salpicadero hay tres elementos circulares. Dos de ellos se corresponden a salidas de aire y un tercero es un reloj analógico que también tiene pinta de barato, para ser sinceros. Además, este reloj no resulta especialmente útil ya que también podemos ver la hora -en formato digital- en el panel de instrumentos y en el sistema multimedia. Desde luego, si llegamos tarde no podremos excusarnos diciendo que no sabíamos la hora…

El moderno sistema multimedia no cuenta con botones físicos, ni siquiera para el control del volumen de audio. La pantalla táctil tiene una respuesta rápida y una calidad de imagen correcta. El principal inconveniente es que el texto mostrado suele tener unos iconos y una fuente muy pequeños, que obliga a prestar demasiada atención a la pantalla para ver las indicaciones. En este monitor también se muestran las imágenes de la cámara trasera, que ofrece una buena visión y resulta muy útil.

El sistema de infoentretenimiento es muy completo

En el aspecto práctico cabe destacar que hay suficientes compartimentos repartidos por el habitáculo para vaciarnos los bolsillos, como es el caso de la generosa guantera, de los dos posavasos en la consola central, los huecos para botellas en las puertas o el reposabrazos con un cofre portaobjetos.

No hay problemas para encontrar una posición cómoda tras el volante del SUV urbano japonés gracias a las amplias regulaciones de la columna de dirección y el asiento. Dos adultos pueden encontrar acomodo sin problemas en los asientos traseros si bien la plaza central tiene limitada su utilidad por un generoso túnel de transmisión que resta espacio para los pies.

El maletero tiene una capacidad de 375 litros y ofrece un espacio regular muy aprovechable. Hay varios ganchos para sujetar la carga, aunque parecen endebles. También se dispone de un práctico doble piso que permite distribuir mejor el equipaje o enrasar el suelo a la hora de abatir el respaldo de los asientos traseros. Con ellos abatidos la superficie no es completamente plana pero el volumen de carga se amplía hasta los 1.120 litros.

El doble fondo es ligero y se coloca con facilidad

La altura libre al suelo es de 185 milímetros

Suzuki brinda cuatro niveles de equipamiento denominados GL, GLE, GLX y S. El más básico cuenta de serie con aire acondicionado, retrovisores eléctricos, elevalunas eléctricos delanteros, siete airbags, radio CD, volante multifunción, ordenador de a bordo, asiento del conductor regulable en altura, ESP, sistema Auto Start Stop y control de presión de neumáticos, entre otros elementos.

Por su parte, el más completo tiene faros LED -para luces cortas-, barras de techo, climatizador, sistema multimedia con navegador y cámara trasera, control de velocidad adaptativo (ACC), volante de cuero, tapicería mixta en tela y cuero, asientos delanteros calefactables, sensores de aparcamiento delantero y trasero, control predictivo de frenada (RBS) y control de descenso de pendientes.

Los faros LED tienen el proyector azul

Precio del Suzuki Vitara

El crossover japonés está disponible en los concesionarios españoles desde los 15.350 euros que cuesta la versión de acceso. La variante que hemos probado es la 1.6L DDiS 4x4 GLX, contando por tanto con el acabado más completo de todos los ofrecidos por Suzuki y su precio de venta es de 23.010 euros.

En la siguiente tabla tienes los precios de todas las versiones del Suzuki Vitara: están incluidos el impuesto de matriculación, transporte y Plan PIVE 8, pero no cuentan con los gastos de de matriculación. En todos los casos la pintura metalizada tiene un sobrecoste de 416 euros y la pintura bi-tono de 726 euros. Llama la atención que en algunas versiones las tarifas se sitúan muy próximas a las del Suzuki SX4 S-Cross, un modelo de mayor tamaño.

Mañana hablaremos del comportamiento dinámico del Suzuki Vitara diésel ¡No te pierdas la segunda parte de la prueba!