TOYOTA PRIUS+ 1.8 HSD Advance. Toma de contacto. Las siete plazas más silenciosas del mundo

Cuando el Prius llegó al mercado dio la sensación de ser un jugador que saltaba al campo sin calentar. Se trataba del primer híbrido de gran producción que la gente podía conducir y, lo que es mucho más importante, que la gente podía comprar. Pero el boca a boca iba lleno de desconfiados mensajes: “corre poco”, “la batería solo dura dos kilómetros”, “el motor es de gasolina”... y a todo ello había que sumarle un rotundo “es feo”. Sin embargo, y como gota a gota, el coche empezó a cuajar en los clientes y, a medida que los Prius iban haciendo kilómetros, las impresiones sobre él fueron cambiando (todo esto en España, ya que en países como EE.UU. este modelo se convirtió en el icono del consumo de las mentes más verdes).

Motor.es ha tenido la oportunidad de asistir a la presentación internacional de una nueva versión pensada para que sean siete, y no cinco, los pasajeros que puedan disfrutar de los beneficios de desplazarse en este automóvil. Y esta es la mejor prueba de que la historia de nuestro protagonista va para largo. Arrancamos.

Diseño

Empiezo hablando del diseño y, a diferencia de otros reportajes, en esta ocasión no voy a opinar sobre la imagen del protagonista. Eso lo voy a dejar en manos del lector, que al final es quien decide. Pero si que es obligatorio hacer un matiz: Toyota ha conseguido que la imagen de su berlina sea inconfundible. Un Prius, parece y es un Prius desde cualquier ángulo y a cualquier distancia que se le vea. Esta, casi, obviedad no lo es tanto en los tiempos que corren o en determinados segmentos de automóviles. Así que primer punto a favor de Toyota por desmarcarse y hacer algo original.

En el caso de esta nueva versión de siete plazas, el estilo se ha mantenido fielmente. Aunque se ve claramente como en la parte trasera la ganancia de espacio para que quepan los dos asientos supletorios implica la conversión del tercer volumen de la berlina (el maletero) en una zaga más alta y cuadrada. Hay más cambios, como la mayor distancia entre ejes, anchura de vías o la longitud y altura de la carrocería. Con todo ello, Toyota habla del Prius+ como un monovolumen compacto y lo cierto es que lo es, pero sorprende como lo han hecho manteniendo fírmemente las líneas originales del modelo original.

El interior del Prius+ también trae sorpresas como el nuevo diseño de la consola central (con la reubicación de la palanca de la caja de cambios automática debajo del botón de arranque y más cercana al volante), los asientos de la segunda fila con regulación longitudinal que puede desplazarse hasta 25 centímetros y las dos plazas traseras (abatibles) con las que este automóvil entra de lleno en el punto de mira de las familias. Toyota vuelve a dejar su cuño en el diseño y fabricación de este habitáculo y no solo en su apariencia, si no en la calidad que presenta.

En cuanto a la ergonomía, es un coche amplio en todas las plazas, aunque es cierto que la menor superficie acristalada que tiene con respecto a algunos rivales dan una sensación de ser más pequeño de lo que en realidad es. Incluso en las dos plazas traseras, la mayoría de los adultos podrán acomodarse sin problemas.

Como marca la norma, todos los asientos son reclinables y, en el caso de los asientos posteriores, hacen que el maletero llegue hasta los 505 litros de capacidad.

Mecánica

Si al hablar de la imagen hay claras diferencias con respecto al Prius normal siendo fiel a las líneas maestras de diseño, en la mecánica son idénticos (o casi). El motor híbrido HSD es el mismo propulsor de 136 CV que mueve a la berlina aunque con una novedad que con la que Toyota abre una nueva etapa en su planteamiento de vehículos híbridos. La batería de niquel e hidruro metálico ha sido sustituida por una de iones de litio.

En la práctica la autonomía 100% eléctrica de ambos modelos es la misma (unos dos kilómetros) pero el Prius+ tiene que mover un peso 125 kg mayor y, además, esta nueva batería tiene una capacidad de carga más rápida además de ser más ligera (ocho kilos menos) y más compacta, lo que ha permitido alojarla a continuación de la consola central entre los asientos delanteros. El tema de que el peso del coche no se disparase con el incremento de tamaño ha sido una constante en su diseño y componentes como el capó de aluminio y un novísimo techo solar fabricado en una resina especial super resistente y un 40% más ligera dan buena muestra de ello.

El Prius+ se puede utilizar en tres modos diferentes de conducción: EV (solo eléctrico), ECO (combinando el motor híbrido y térmico en busca del menor consumo) y POWER, que ofrece las mejores prestaciones.

Más novedades técnicas para el Prius+. Estrena un nuevo asistente al aparcamiento de los que pulsas el botón, el coche detecta que el hueco es correcto y empieza a realizar los movimientos del volante para la maniobra. Y el otro elemento importante es el sistema de compensación del cabecero de la carrocería que va gestionando, de forma automática, la entrega de potencia del motor. Pasad a la siguiente pestaña de la prueba en la que os cuento con más detalle cómo funciona este dispositivo.

En marcha

Silencio, se rueda... ¡Siete y acción! El Prius+ es un Prius y, como tal, es suave y silencioso. En esta versión, y dado que la potencia del motor es la misma que para el normal, se nota que se trata de un automóvil más pesado. En las aceleraciones a fondo el motor sube de vueltas de forma subita y sin saltos, gracias a la caja de cambios de convertidor de par, mientras vemos subir la cifra de km/h en el parabrisas gracias a un sistema de Head Up Display. Es capaz de acelerar hasta los 100 km/h, saliendo desde parado, en 11,3 segundos aunque la forma en la que esto ocurre es tan 'civilizada' que llega a parecer que tarde más. No es un coche rápido, pero tampoco lo pretende y la verdad es que cumple con las exigencias dinámicas que se le pueden exigir a un automóvil de estas características.

Durante la cena que Toyota organizó tras la presentación internacional en Bratislava, pude hablar con el presidente de la marca en España, Jacques Pieraerts, y entre los muchos datos interesantes que compartió con los periodistas invitados, nos habló de cómo cambia la mentalidad y la forma de conducir cuando uno se habitúa al uso de los coches híbridos.

Algo con lo que estoy completamente de acuerdo y que hay que tener muy en cuenta a la hora de probar un automóvil como este. El Prius+ se conduce de una forma suave, tratando con delicadeza el pedal del acelerador para que el sistema HSD vaya combinando perfectamente el papel del motor de gasolina y el eléctrico. Pisando a fondo y con los dos a pleno régimen tendremos la aceleración necesaria para adelantamientos e incorporaciones sabiendo que no se está formando un remolino en el depósito de 45 litros de combustible.

Hablando de consumo, teóricamente se mueve entre los 3,8 litros a los 100 hasta los poco más de 4 en urbano. En nuestra toma de contacto, la cifra media fue de unos 4,7 dado que estábamos testando diferentes aspectos dinámicos del modelo a través de las carreteras secundarias de Austria y Eslovaquia.
Comparado con el normal, el Prius+ consume más, lógicamente, porque es más grande, más pesado, y tiene un coeficiente aerodinámico algo peor que el de la berlina, 0,28 Cx (por 0,25 del Prius 'a secas'); pero no dejamos de hablar del automóvil de siete plazas más frugal del mercado.

En cuanto a su comportamiento en carretera, prima la suavidad. Como he adelantado, el sistema de compensación de cabecero de la carrocería hace su trabajo con eficacia. Sin que el conductor tenga que hacer nada, se hacen ligeros ajustes en la entrega de la potencia para ir superando las subidas y bajadas del asfalto. Resta par cuando se sube y lo añade cuando se baja, con ello se consigue que la inclinación de la carrocería se vaya equilibrando de forma sutil, pero apreciable ofreciendo una experiencia de conducción realmente confortable.

Conclusión

Con el modelo normal ganando cuota de mercado (incluso en los complicados tiempos que corren) la llegada del Prius+ añade un nuevo atractivo a la gama de Toyota. Un automóvil de estas características por menos de 30.000 euros como precio para la versión de acceso se convierte en una interesante opción de compra para las familias que busquen espacio interior, confort y tecnología aplicada a la reducción de consumos. Argumentos, todos ellos, que pesan mucho en estos días en la decisión de compra.

PROS Y CONTRAS

ProsConsumo
Suavidad de marcha
Modularidad interior

Contras
Prestaciones
Capacidad del maletero

Datos y equipamiento

DATOS Y EQUIPAMIENTO

Precio: 29.200 euros

DimensionesLongitud: 4.615 mm
Anchura: 1.775 mm
Altura: 1.600 mm
Distancia entre ejes: 2.780 mm
Maletero: 505 l
Depósito: 45 l
Peso en vacío: 1.570 kg

MotorTipo: Híbrido, gasolina atomósférico y eléctrico
Cilindrada: 1.798 cm3
Nº Cilindros: 4
Potencia máxima: 99 CV a 5.200 rpm (136 CV en conjunto)
Consumo oficial combinado: 4,1 l/100km
Emisiones CO2: 101 g/km
Cambio: Automática 6 velocidades
Transmisión: Delantera

Prestaciones
Velocidad máxima: 165 km/h
Aceleración 0-100 km/h: 11,3 s

Equipamiento
Airbag conductor y acompañante, lateral delantero y de cortina
ABS y control de estabilidad VSC+, control de tracción E TRC, repartidor electrónico de la frenada EBD, sistema de arranque en pendiente HAC,
Pilotos de LED
Sistema de Radio/CD/MP3 con seis altavoces
Volante multifunción
Climatizador
Ordenador de a bordo
Pantalla multifunción 6,1 pulgadas Toyota Touch
Llantas de aleación de 17 pulgadas

Opciones
Pintura metalizada: 500 euros
Paquete Touch & GO 750 euros