Toyota Prius 4g contra Toyota Prius 3g, nuevas tecnologías (III)
En la última parte de la prueba veremos hasta qué punto hay un salto tecnológico entre las dos generaciones. Han pasado casi siete años desde la salida al mercado de la tercera generación del Prius en Japón, y han cambiado algunas cosas desde entonces
Aunque hay un salto generacional entre el Toyota Prius modelo de 2009 y el de 2016, lo cierto es que no hay una enorme diferencia en cuanto a tecnología, si comparamos el último modelo con el Executive saliente con todos los extras de seguridad. Si comparamos con un Prius menos equipado -como la unidad roja de las fotos- el salto es mucho mayor, evidentemente.
Tecnologías como los faros integrales en LED, luces de circulación diurna, acceso y cierre "manos libres", sensor de luces y lluvia, el visor HUD, conexión Bluetooth, altavoces JBL o control de crucero adaptativo ya estaban disponibles en 2009 para los Prius 3g más equipados. Faltaban algunas cosas, como el plegado eléctrico de los espejos (vino en 2012) o conectores USB por debajo del Executive.
A diferencia del control de crucero convencional, que se limita a mantener una velocidad programada, el control de crucero adaptativo utiliza un radar para tener en cuenta el tráfico. Si los vehículos precedentes van más despacio, el coche decelera y mantiene la distancia de seguridad hasta que el carril queda libre o el conductor decide cambiar de carril. También podía realizar un frenazo de emergencia si se detectaba una colisión inminente.
El modelo de 2009 también tiene asistente de mantenimiento de carril (LKAS) disponible, con el cual el conductor es avisado mediante alerta visual y acústica de que va a abandonar el carril sin usar el intermitente. Es más, se produce una leve corrección en el volante. En ese sentido, el nuevo Prius no tiene nada de novedoso. Eso sí, el nuevo avisa de vehículos en el ángulo muerto de los espejos de forma electrónica.
El techo con placas solares no está disponible en el Prius 4g, sino en el Prius Prime
Lo que sí hace el nuevo Prius es captar señales de tráfico -como limitaciones de velocidad- y otros posibles obstáculos urbanos, como peatones u otros vehículos, gracias al Toyota Safety Sense. Otra función que antes no estaba disponible es el cambio automático de luces de carretera a luces de cruce, para no deslumbrar a otros usuarios de la vía.
También podía equipar el Prius 3g el sistema de aparcamiento automatizado (IPA), si bien su efectividad es más reducida y depende bastante de que se hayan delimitado las plazas con pintura. El nuevo Prius, además de aparcar mejor, evita los toques entre paragolpes, porque frena al coche en seco intentando apurar los huecos. A fin de cuentas, los sistemas evolucionan en solo cinco años.
En los modelos de 2009, los Prius 3g tienen la instrumentación con una gama de colores muy reducida, cuatro en el tablero principal, y verde para el visor superior o HUD. En la nueva generación las pantallas van totalmente a color, pero con el restyling de 2012 la calidad visual de los indicadores ya mejoró bastante, llegando el color a las pantallas centrales.
El nuevo sistema Toyota Touch 2 es más moderno y versátil que el Touch 1 que incorporó el Prius 3g en 2012. Anteriormente el sistema de navegación no estaba pensado para conectarse al exterior, y tenía una gestión más pobre de los archivos en formato USB. No obstante, el modelo de 2009 tenía un navegador muy moderno en su momento. Es una lástima que el Touch 2 no esté disponible -ni opcionalmente ni como accesorio- para los Prius 3g.
Donde el nuevo modelo despunta claramente es con el sistema de recarga de teléfonos móviles sin cables -mediante estándar Qi- o el climatizador automático inteligente que corta el flujo de aire donde no hay pasajeros. Eso sí, se echa de menos una función del Prius 3g, y es que los botones del volante se dibujan en la pantalla, así el conductor sabe qué va a tocar, sin necesidad de bajar la vista. A pesar de todo, el nuevo Prius sale ganando, lo lógico en un coche más moderno.
Si tenemos en cuenta las diferencias entre ambas generaciones, descubrimos que no son tantas como puede haber entre otros modelos, donde el salto se nota más. Se van a echar de menos muchas cosas en la nueva gama Prius, como la existencia de modelos básicos a un precio más asequible. Existir, existen, pero Toyota España no los va a comercializar.
El nuevo Prius equivale al Prius 3g Executive a tope de extras, y el nuevo sale mejor de precio si tenemos ese detalle en cuenta. Si lo comparamos -erróneamente- con un Prius 3g ECO o Advance, menos equipados, obviamente es más caro. En la nueva generación solo hay dos extras posibles, o la tapicería de cuero o la pintura metalizada. El resto viene todo de serie.
En ambos casos, al lanzarse los Prius 3g y Prius 4g, la calificación en seguridad pasiva por EuroNCAP es de cinco estrellas (ahora son más difíciles de conseguir) y las credenciales medioambientales de las mejores de su categoría. Ambos han sido punteros en el momento que han salido al mercado, solo que el nuevo modelo pretende volver a ser un modelo de nicho, mientras que el Prius 3g se pensó más como un superventas.
Ahora mismo la gama híbrida de Toyota es más grande, y como alternativas al Prius se pueden valorar los Toyota Auris, Auris TS (familiar) y Prius+ (monovolumen 5+2). Al no haber alternativas dentro de la gama Prius 4g, a un menor presupuesto hay que optar a uno de ellos. Habrá que esperar a sus nuevas generaciones para contar con las ventajas del nuevo sistema híbrido, plataforma TNGA, etc.
Lo que sí está confirmado es la llegada de la versión híbrida enchufable, Prius Prime, que equivale al Prius Plug-in de la generación anterior. El enchufable no estuvo disponible comercialmente hasta 2012, porque en los años anteriores se hizo una prueba piloto con 600 prototipos a lo largo del mundo. El Prius Prime tiene un diseño más diferenciado y mejores prestaciones que el Prius Plug-in saliente.
No espero que la nueva generación de Prius alcance los tres millones y pico de unidades de la generación 3g, que tuvo un enorme éxito en Estados Unidos y Japón. En el mercado europeo es un modelo que se va a ver menos, y desde luego en Madrid o Barcelona no los veremos uniformados como taxis, porque no se han homologado como tales. En cambio, veremos más Auris TS o Prius+, pero no tantos, pues la competencia a GLP de Dacia o los Toledo/Rapid han reducido la cuota de mercado de la gama Prius.
Y aunque admito el avance de la nueva generación, me sigo quedando con el mío...