Motor.es

Primer contacto Mazda3 2019, nuevas aspiraciones sin tapujos (con vídeo)

Mazda inicia una nueva era para la marca con la llegada del Mazda3 2019. La nueva generación del modelo compacto sube la apuesta en cuanto a diseño, calidad y tecnología para fijar el punto de mira en los modelos premium. Te lo enseñamos en vídeo.

Primer contacto Mazda3 2019, nuevas aspiraciones sin tapujos (con vídeo)

13 min. lectura

Publicado: 23/01/2019 12:00

2019 es el año de la evolución para Mazda. Por diseño, por calidad, por tecnología… y por aspiraciones. Sí, el fabricante japonés ha elevado su punto de mira para apuntar sin tapujos a las marcas premium. Dicen que entran en una nueva era. El primer modelo de esta nueva filosofía es la cuarta generación del Mazda3 que llegará en muy pocas semanas a los concesionarios.

Qué mejor coche para llevar a cabo este ambicioso propósito que uno de los modelos estrella de la marca, que ya acumula seis millones de unidades vendidas en todo el mundo. El renovado compacto japonés se presentó en el Salón de Los Ángeles de 2018 y ahora ha realizado su primera aparición en España, momento que he aprovechado para conocerlo de primera mano y comprobar si da lo que promete.

En cuanto a diseño exterior queda claro que no hay cambios radicales con respecto al modelo anterior ya que era uno de los compactos visualmente más atractivos del mercado. Es una evolución del lenguaje de diseño Kodo que ahora presenta una combinación de superficies fluidas y ángulos muy marcados, dos características que parecen contradictorias pero que se han combinado con maestría.

Calcula ahora el precio de tu seguro de coche

Calcula tu precio online

El color Soul Red Crystal cuesta 800 euros pero es sencillamente espectacular

Estos ángulos se aprecian principalmente en el frontal con la parrilla característica de la marca de un tamaño generoso y unos faros que se estiran hacia atrás. Los grupos ópticos pueden ser faros Full Led adaptativos dependiendo de la versión. En cuanto a las superficies suavemente curvadas se aprecian en el lateral y en la redondeada trasera, donde no hay nervaduras notables ni puntos de tensión sino unos sinuosos volúmenes que se insinúan según los reflejos de la luz.

El aspecto más llamativo de esta nueva generación es el grueso pilar C, que gana presencia al ser muy voluminoso. No gustará a todo el mundo pero está claro que aporta un gran peso visual a la trasera y sobre todo mucha personalidad. En cualquier caso el conjunto emana sofisticación y una cierta deportividad.

Hay tres niveles de equipamiento: Origin, Evolution y Zenith

Como ocurría hasta ahora, esta cuarta generación del Mazda3 también contará con dos opciones de carrocería: el hatchback de cinco puertas con 4,46 m de largo y el Sedán de cuatro puertas. El Mazda3 Sedán tiene 20 cm más de longitud y ahora tiene un tercer volumen más alargado. Muestra un aspecto más maduro y luce un pilar C más convencional.

Pude comprobar que el Sedán tiene un maletero notablemente más generoso que el 5 puertas y crece respecto a la generación anterior. El hatchback cuenta con la practicidad del portón y seguirá siendo la estrella de la gama ya que hasta ahora era la elección en 9 de cada 10 unidades vendidas.

De las tres primeras generaciones del Mazda3 se comercializaron 6 millones de unidades en todo el mundo

Mazda no ha facilitado datos oficiales de la capacidad de carga pero te adelanto que el Mazda3 Sedán ofrece 450 litros de maletero (444 litros en el acabado Zenith por la presencia del subwoofer del equipo de sonido Bose). Por su parte, la versión de cinco puertas se queda en 358 litros (354 litros en el acabado Zenith) una cifra poco impresionante que resulta incluso ligeramente inferior a la del modelo precedente.

En el interior de la cuarta generación del Mazda3 se respira un aire lujoso y cuidado. Abundan los materiales de tacto mullido en el salpicadero y las puertas, hay muchos detalles cromados que le dan un toque elegante y el único elemento que no me convence del todo es el abuso del plástico negro brillante en la consola central porque se ensucia con facilidad.

La atmósfera es muy acogedora y desde Mazda aseguran que han trabajado para reducir al máximo las vibraciones y el ruido que llegan al interior del coche. Hay más material aislante en la estructura del habitáculo y hasta las alfombrillas tienen una capa fonoabsorbente para cumplir esa función. Al ser una presentación estática no es posible comprobar cuál es el resultado en marcha pero en parado y con las puertas y ventanillas cerradas ciertamente se escucha muy poco ruido del exterior.

El interior del Mazda3 transmite una elevada sensación de calidad

El diseño es muy minimalista, con una ergonomía estudiada y poco tiene que ver con el modelo anterior. El volante es muy similar al de los actuales modelos de Mazda aunque es completamente nuevo, como se puede apreciar en el diseño de los botones. Entre ellos el del control de crucero adaptativo, de serie en todos los acabados.

A través del aro se puede observar el cuadro de instrumentos que es inédito en Mazda al presentar una pantalla digital de siete pulgadas en la parte central de la instrumentación acompañada a ambos lados por indicadores analógicos. Ese display digital proporciona una buen a imagen pero tiene pocas opciones de personalización. Complementando la información para el conductor tenemos un head-up display que también es de serie en todas las versiones y proyecta los datos directamente sobre el parabrisas.

Hablando de pantallas hay que hacer mención del renovado sistema multimedia con una pantalla de 8,8 pulgadas en la parte superior del salpicadero. Tiene una nueva interfaz con gráficos con muy buena definición y un manejo fluido e intuitivo. Desde la versión más básica del Mazda3 tenemos navegador, compatibilidad con Android Auto y Apple CarPlay y está asociado a un equipo de sonido de ocho altavoces. El acabado Zenith mejora la apuesta sonora con un equipo Bose con 12 altavoces.

El sistema multimedia cambia por completo su interfaz

Debajo se sitúa el climatizador bizona, también de serie, una toma USB, el freno de estacionamiento eléctrico, los mandos de manejo (HMI Commander) del sistema de infoentretenimiento, y en el caso de las versiones con caja automática un interruptor para la función Sport del cambio. A diferencia de algunos de sus rivales no puede equipar una base de carga inalámbrica de smartphones. Detrás, un apoyabrazos deslizante esconde en su interior un compartimento muy grande para guardar objetos y una conexión de 12V y una segunda toma USB.

Los asientos son completamente nuevos y resultan realmente confortables porque se ajustan bien al cuerpo y son muy mullidos. Opcionalmente pueden contar con ajustes eléctricos y memoria de posiciones y también pueden estar calefactados pero no ventilados. La visibilidad hacia adelante es buena y hacia atrás se ve perjudicada por la gran anchura del pilar C y la posición muy inclinada de la luneta aunque afortunadamente todas las versiones vienen de serie con sensor de aparcamiento trasero que nos ayudará en las maniobras.

Además de todo lo mencionado, el compacto de Mazda también tiene un gran equipamiento de seguridad. Toda la gama cuenta con un sistema de asistencia a la frenada en ciudad con detección de peatones, detector de fatiga, sensores de luz y lluvia, control de ángulo muerto, detector de tráfico trasero, asistente de cambio de carril y un sistema de reconocimiento de señales de tráfico.

Las plazas traseras proponen un sitio correcto para las piernas y la cabeza. La caída del techo limita esta cota de altura a pasajeros de hasta 1,80 m de estatura, mejorando ligeramente la habitabilidad del modelo anterior. No he encontrado diferencias entre el 5 Puertas y el Sedán. Los asientos de esta segunda fila son confortables pero carecen de salidas de aireación propias o de alguna toma USB. Aquí tenemos un reposabrazos que condiciona la comodidad de la plaza central, que también se ve perjudicada por un túnel de transmisión bastante grande: tiene este tamaño tan generoso porque por primera vez el Mazda 3 puede tener versiones con tracción total.

La oferta mecánica del compacto de Mazda mantendrá una versión diésel, el 1.8 Skyactiv-D de 116 CV. Las estrellas de la gama serán las dos motorizaciones de gasolina que se ofrecen ya que ambas están asociadas al sistema semihíbrido M Hybrid que les permitirán lucir la etiqueta ECO. Utilizan un motor eléctrico y una batería de iones de litio de 24V además de un sistema de regeneración de energía durante las frenadas.

El Mazda3 5 Puertas es deportivo y atrevido. El Sedán busca un público más tradicional

Se trata del motor 2.0 Skyactiv-G de 122 CV y del novedoso 2.0 Skyactiv-X de 181 CV que pueden tener un cambio manual o automático siempre de seis velocidades. Además, el propulsor Skyactiv-X puede ser de tracción delantera o estar vinculado a un nuevo sistema de tracción total inteligente i-Activ AWD.

Este motor Skyactiv-X es el que se está llevando todos los focos porque es realmente innovador. Cuenta con un novedoso sistema de ignición que, según las necesidades, puede funcionar por chispa como un motor de gasolina convencional o por compresión tal y como lo hacen los motores diésel. Este sistema denominado SPCCI (Ignición por Compresión Controlada por Chispa, en inglés) permite que el motor Skyactiv-X ofrezca el refinamiento y la potencia de un motor de gasolina y al mismo tiempo el par y consumos de un motor diésel.

Aún tendremos que esperar un poco para conducir el nuevo Mazda3 pero lo cierto es que promete y mucho. A finales de febrero llegará al mercado con la carrocería de cinco puertas y a finales de junio estará disponible con la carrocería Sedán. En cuanto a precio, desde 23.415 euros a los que habrá que añadir 500 euros más para el Sedán. Hay una promoción de lanzamiento que resta 2.700 euros así que resulta un precio muy interesante teniendo en cuenta la calidad y el diseño de esta nueva generación y sobre todo el amplísimo equipamiento de serie disponible en todas las versiones.

Pixel