Clasificación de los coches por segmento y carrocería

La oferta actual de vehículos es numerosa y variada, por lo que es imprescindible el uso de diferentes términos y clasificaciones para diferenciar unos de otros.

Clasificación de los coches por segmento y carrocería
Existen múltiples tipos de coche en función de su carrocería.

8 min. lectura

Publicado: 18/09/2019 18:10

La Dirección General de Tráfico establece un sistema en función del uso para el que se destina y características concretas como el peso, pero a nivel técnico y comercial existen otros modos de clasificar a cada uno de ellos.

Historia

Tal y como hemos visto en artículos anteriores de este mismo diccionario, muchos de los términos empleados en la automoción provienen de los carruajes tirados por caballos y que, desde finales del siglo XIX, comenzaron a trasladarse a los automóviles.

En 1930, la variedad era tal que la Cámara Sindical de Carroceros de París decidió presentar una clasificación con el objetivo de unificar los términos con los que se definían los diferentes tipos de coches. Coches abiertos como ‘Faetón’, cerrados como ‘Coupé’ o ‘Limousine’ y descubiertos como ‘Cabriolet’ o ‘Berlinas’ eran sólo algunos de los términos, mucho aún hoy vigentes.

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Algunos de ellos desaparecieron con el paso del tiempo y otros llegaron fruto de nuevas tendencias y modas, como por ejemplo ‘Monovolumen’, ‘SUV’ o ‘Compacto’. Para intentar unificar todo este maremagnum de términos, la Unión Europea estableció una clasificación en 2018, que comprende siete tipos de vehículos: berlina, berlina con portón trasero, familiar, coupé, descapotable, multiuso y camioneta familiar.

Sin embargo, la tendencia más asentada en la actualidad, especialmente en los medios de comunicación especializados y entre los profesionales del sector, es la que separa a los distintos coches por segmentos.

Microcoche

Este tipo, denominado ‘Kei Car’ en Japón, representa a los vehículos de menor tamaño que son más un paso intermedio entre la motocicleta y el coche. Miden menos de 300 cm de longitud y suelen tener como máximo dos plazas e incluso en algunas ocasiones tres ruedas.

Algunos ejemplos de este tipo son el famoso Isetta o el Tata Nano.

Segmento A

Es la categoría de vehículos más pequeños de entre los matriculados como convencionales y su longitud no suele superar los 370 cm. Lo habitual es que ofrezcan espacio para cuatro plazas y suelen contar con un modesto motor de tres o cuatro cilindros y una carrocería tipo ‘Hatchback’, es decir, dos puertas laterales y portón trasero.

En esta categoría encontramos ejemplos como el del Fiat 500 o el Toyota Aygo.

Segmento B

Hablamos de los populares utilitarios, que son vehículos de unos 420 cm de largo y cuentan con motores de entre 1000 y 2000 c.c. por lo general. Suelen disponer de cinco plazas y acostumbran a tener tres o cinco puertas.

El Seat Ibiza o el Renault Clio son buenos ejemplos de este segmento.

El Seat Ibiza es uno de los reyes del segmento B.

Segmento C

Son los llamados compactos y representan al tipo de carrocería ‘Hatchback’ de mayor tamaño y presencia. En este apartado encontramos espacio suficiente para cinco pasajeros y las longitudes pueden llegar hasta los 460 cm con motores de entre 80 y 140 cv. en la mayoría de las ocasiones.

Algunos modelos representativos son el Volkswagen Golf o el Peugeot 308.

Segmento D

Hablamos ya de longitudes cercanas a los 490 cm y que ofrecen un destacable espacio interior para cinco ocupantes, con motores que pueden llegar a tener seis u ocho cilindros y que cuentan con un maletero de grandes dimensiones.

En este apartado podemos encontrar vehículos como el Ford Mondeo o Kia Optima.

Segmento E

Los vehículos de este segmento ofrecen ya un nivel de equipamiento y lujo destacable, englobando carrocerías como la sedán o la familiar, que pueden llegar hasta los 500 cm de longitud y que ofrecen un tamaño interior cómodo y apto para familias de varios miembros.

Entre los modelos más populares de este segmento encontramos el Mercedes Clase E o el Jaguar XF.

Los vehículos del segmento E cuentan ya con un tamaño considerable.

Segmento F

Las llamadas berlinas de representación entran en esta categoría con longitudes de más de 500 cm y estandartes de la capacidad tecnológica y de diseño de cada marca: suelen ser el buque insignia de cada una de ellas, con permiso de los deportivos.

En este caso, hablamos de modelos como el Porsche Panamera o el Audi A8.

SUV

En este caso hablamos de los muy populares todocamino o ‘Crossover’, que en los últimos años han irrumpido en el mercado con gran fuerza. Este tipo de vehículos está basado en plataformas de otros modelos y cuentan con una altura libre al suelo superior, lo que les permite adquirir cierta capacidad para rodar fuera del asfalto, aunque sin llegar a las cualidades offroad de los todoterreno.

En realidad los SUV no forman un segmento propio por sí mismos y, en función de su tamaño, pueden pertenecer al B, C, D, etc. Ejemplos de B-SUV son el C3 Aircross y en entre los C-SUV podemos encontrar el Nissan Qashqai. En la categoría D-SUV entrarían modelos como el Volvo XC60.

El Nissan Qashqai fue uno de los principales impulsores de la categoría SUV.

Todoterreno

Su utilidad es clara dado el nombre que reciben, pues se trata de vehículos con un claro carácter polivalente que les permite circular con facilidad por carreteras, caminos y campo a través. En este caso la altura libre al suelo es considerable, así como el tamaño interior en la mayoría de los casos.

En los últimos años el lujo ha pasado a ser también una característica habitual, acompañando a las tradicionales ruedas de grandes dimensiones, así como el recorrido de las suspensiones y, también, el alto consumo de combustible gracias a estas y otras características como los grandes motores y carrocerías voluminosas.

En este caso algunos modelos representativos son el Land Rover Discovery o el Mitsubishi Montero.

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