Sedán, Cabrio, Hatchback, Coupé... El Renault Mégane, a lo largo de su dilatada historia, ha estado disponible en una amplísima variedad de carrocerías. Unas variantes de carrocería que, con el paso de los años, ha tenido que adaptarse a los cambios de tendencia en el mercado. La denominación comercial Sport Tourer desempeña un papel protagonista en la gama Mégane. ¿El motivo? Es usada por el modelo familiar. El Renault Mégane Sport Tourer ha sobrevivido hasta nuestros días.
El «apellido» Sport Tourer, o simplemente ST, acompaña al Mégane desde que este modelo fuera presentado en sociedad en el Salón del Automóvil de Frankfurt del año 1995. Es, junto con el modelo Hatchback (5 Puertas), las únicas carrocerías que podemos encontrar actualmente en el configurador de Renault.
A sus espaldas tiene cuatro generaciones, numerosas actualizaciones y millones de unidades fabricadas. El Mégane Sport Tourer, si de algo puede presumir, es de ser uno de los compactos familiares más exitosos de la historia del mercado europeo del automóvil. Un modelo que ha sabido adaptarse perfectamente a los cambios de tendencia que se han vivido en las últimas décadas en el Viejo Continente.
Tiene unas dimensiones compactas. El Mégane Sport Tourer actual mide 4,63 metros de largo. Una longitud que le sitúa en la parte alta del segmento C. En su espacioso interior hay un total de cinco plazas. La distancia entre ejes se sitúa en los 2,71 metros. El maletero cubica un volumen de carga de 563 litros. Una cifra que se puede incrementar hasta los 1.543 litros en caso de abatir los respaldos de los asientos posteriores.
Está encuadrado en un segmento donde la competencia es voraz. A diario debe enfrentarse a una larga lista de adversarios de primer nivel. Entre los principales rivales del Renault Mégane Sport Tourer se encuentran modelos como el SEAT León Sportstourer, el Ford Focus Sportbreak, el Opel Astra Sports Tourer, el Peugeot 308 SW, el Toyota Corolla Touring Sports, el Hyundai i30 Cw, el KIA Ceed Tourer y el Volkswagen Golf Variant.
La gama de motores del Renault Mégane Sport Tourer ha variado de manera importante con el paso de los años. El modelo actual está disponible en los concesionarios junto a una pequeña selección de motorizaciones. Está disponible con motores de gasolina, diésel e híbrido enchufable (PHEV). En función del motor elegido nos encontraremos con una caja de cambios manual o una transmisión automática. Siempre con una configuración de tracción delantera.
El Mégane híbrido enchufable irrumpió en escena en el convulso año 2020. Debutó como parte de las novedades del «facelift» que sufrió la cuarta generación del compacto francés. Unas novedades que fueron mucho más allá de un simple cambio de diseño exterior o de una mejora del equipamiento tecnológico. La versión PHEV se presentó con la carrocería Sport Tourer. Más adelante esta opción mecánica acabaría llegando al modelo Hatchback (5 Puertas).
Está equipado con una batería de iones de litio de 9,8 kWh. Gracias a esta batería, y según el ciclo WLTP, puede circular hasta 50 kilómetros en modo 100% eléctrico. Por lo tanto, luce el distintivo ambiental 0 Emisiones de la DGT (Dirección General de Tráfico) con todas las ventajas de movilidad que ello supone.
El Renault Mégane Sport Tourer se fabrica en España. Y más concretamente en unas instalaciones del Grupo Renault en Palencia. Luce el sello «Made in Spain» al igual que el Mégane Hatchback. En cuanto a la variante de carrocería tipo sedán, se fabrica lejos de nuestras fronteras. En Bursa (Turquía).